Desde el Ministerio de Energía afirmaron que los valores de los combustibles crecerán producto de un acuerdo sellado entre el Gobierno y las petroleras. El precio por litro superará los 20 pesos en los surtidores. Nuevo golpe al bolsillo del consumidor
En una muestra más de que la inflación no detiene su escalada, el precio de los combustibles sufrirá en menos de doce meses su quinto ajuste, golpeando todavía más el desgastado bolsillo de los consumidores.
Según informó ayer el Ministerio de Energía que conduce Juan José Aranguren, a partir del fin de semana que viene los valores de los combustibles se incrementarán en un 8%, debido al acuerdo sellado entre el Gobierno nacional y las empresas petroleras refinadoras y comercializadoras.
De esta manera, el importe de la nafta Premium estará ahora por encima de los 20 pesos el litro, mientras que la Súper y el gasoil se ubicarán por arriba de los 18 pesos. Así, quienes necesiten de sus autos o camiones para trabajar se verán totalmente perjudicados y deberán trasladar dicho incremento a los productos que venden o a las labores que hacen.
No obstante, desde las cámaras que nuclean a las petroleras solicitan un aumento mayor ya que consideran que los efectos de la devaluación de diciembre de 2015 todavía no han sido absorbidos por los precios. Por esa razón vienen conversando con Aranguren y las autoridades nacionales una suba para mediados de año que ronde el 20%. Los expendedores y consumidores, por su parte, han salido a remarcar que sería un “disparate” imposible de sobrellevar por los bolsillos de los argentinos.
Uno de los dichos populares más usados por los argentinos dice que “para muestra basta un botón”, y eso puede advertirse claramente en estos días, en que para llenar un tanque de 50 litros con nafta Súper se necesitan $850, y más aún a partir del domingo, cuando ese costo trepará hasta los $935.
El incremento del 8 por ciento que comenzará a regir en el año que se recién se inicia es el quinto en menos de doce meses: durante 2016 los precios aumentaron un 6% en enero, un 6% en marzo, un 6% en abril y un 10,1% en mayo, lo cual genera que en la Argentina el precio esté en US$ 1,20 por litro, cuando el promedio a nivel mundial es de 0,97 centavos de dólar.
Para los expertos locales, la alta carga impositiva que tienen los combustibles en el mercado interno, que ronda el 41 por ciento, es lo que hace elevar su valor a niveles mucho más altos que los precios internacionales, por lo que piden al gobierno de Mauricio Macri cambios tributarios sustanciales para poder bajar el valor de las naftas.
A su vez, ayer el Ministerio de Energía resolvió que los titulares de bocas de expendio de combustibles líquidos deberán informar a esa cartera los precios al minorista de las naftas (grados 2 y 3), gasoil (grados 2 y 3) y del GNC que comercializan, dentro de las ocho horas de producida una modificación en tales precios en surtidor.
Aumentos que no cesan
ENERO 2016: Súper $13,80. Premium $15,50.
MARZO 2016: Súper $14,64. Premium $16,53.
ABRIL 2016: Súper $15,51. Premium $17,52.
MAYO 2016: Súper $17,08. Premium $19,30.
ENERO 2017: Súper $18,30. Premium $20,65.
El Ministerio de Energía y Minería oficializó hoy la creación del “sistema en línea de información de precios de combustibles en surtidor”, mientras ultima detalles para el primer incremento del año.
La Resolución 314 - E/2016, publicada en el Boletín Oficial, establece que las empresas expendedoras deberán publicar los valores de las naftas, el gas oil y el GNC.
Por tal motivo, las empresas deberán presentar la información relativa a precios de comercialización minorista dentro de las 8 horas de producida una modificación en el precio en surtidor.
Además, los consumidores podrán denunciar falta de información o inconsistencias entre los precios informados y los precios verificados en las bocas de expendio, pudiendo el Ministerio suspender a las empresas hasta tanto regularicen la situación
“La adecuada protección de los derechos de los consumidores requiere de la disponibilidad de información cierta, clara y detallada sobre todo lo relacionado con las características esenciales de los bienes y servicios provistos y sobre las condiciones de su comercialización, la cual constituye a su vez, uno de los pilares fundamentales para el fortalecimiento de la competencia en los mercados”, señala la Resolución.