El Gobierno dispuso prorrogar hasta el 31 de diciembre de 2017 el tratamiento impositivo diferencial para la producción de biodiésel y la eximición de gravámenes al biodiésel empleado como combustible líquido en la generación eléctrica.
Así lo estableció mediante el Decreto 1325/2016, publicado hoy en el Boletín Oficial, que destacó "el papel trascendental que reviste la incorporación de la energía renovable en la matriz energética nacional".
"La incorporación de los biocombustibles a la matriz energética nacional continúa contribuyendo a cubrir las exigencias que plantea el incremento de la demanda de combustibles e impulsando el crecimiento del sector agropecuario y de las economías regionales, con el agregado de valor a sus materias primas", destaca.
Durante 2016, se alcanzó un récord en su producción de biodiésel de más de 2,7 millones de toneladas, un aumento del 50% respecto al año anterior, según la Cámara Argentina de Biocombustibles (Carbio).
Con este volumen de producción, Argentina ocuparía el cuarto puesto en el ranking de producción mundial de biodiésel, con un 9% de participación sobre un mercado internacional de más de 30 millones de toneladas, tres puntos porcentuales más que en 2015.