Un año después de la promesa por parte del Gobierno Británico de revisar de la estrategia energética, el Reino Unido es el primer país en dar un paso para cumplir con su compromiso contra el cambio climático desde que entró en vigor el Acuerdo de París el pasado cuatro de noviembre: ha anunciado que sigue adelante con su plan de cierre de las centrales térmicas de carbón.
El Instituto Internacional de Derecho Internacional y Medio Ambiente, IIDMA, ha emitido un comunicado al respecto en el que expresa su esperanza de que el ministro de Energía, Álvaro Nadal, siga el ejemplo del Reino Unido.
En este sentido, recuerda que la quema de carbón es la principal fuente de emisiones de CO2 generada por el sector eléctrico además de generar otros contaminantes con un gran impacto en la salud y el medio ambiente: NOx, SOx y partículas. Ahora con un Gobierno ya formado y Ministerio nuevo, el IIDMA se pregunta: ¿cuándo se hará lo mismo en España?
“Para asegurar que haya una transición energética económica, limpia y justa en España la responsabilidad recae, principalmente, en el nuevo Ministerio de Energía, Turismo, y Agenda Digital dirigido por Don Álvaro Nadal Belda. Éste debería seguir el ejemplo del Department of Business, Energy and Industrial Strategy del Reino Unido, presentando un plan detallado para que se lleve al cabo el cierre de las centrales térmicas de carbón en España a más tardar en 2025“, señala este Instituto.
Precisamente, para demostrar que existen alternativas, Greenpeace presentará en Marrakech, donde tiene lugar estos días la COP22, un detallado informe que analiza la transición al fin del carbón, basado en el caso de estudio de la cuenca minera de Andorra, en la provincia de Teruel, en el que ha colaborado el instituto Istas de CCOO.
Por su parte, el IIDMA destaca que el Gobierno español tiene una ventaja significativa frente al británico para realizar el cierre de las centrales en los próximos años: mientras que la quema de carbón representa el 15 % de la potencia eléctrica instalada total en el Reino Unido, en España, según datos de la Red Eléctrica Española de 2015, solo un 9,68 % de la potencia instalada corresponde al carbón. Una cifra que, dado que el sistema actual español tiene una capacidad excedentaria de alrededor del 30%, muestra que el cierre de las centrales térmicas es una meta viable.
Asimismo, subraya que en el ejercicio 2016 la energía procedente de fuentes renovables superó a la procedente de combustibles tradicionales durante los meses de febrero a mayo y que el suministro de energía procedente de carbón disminuyó considerablemente en comparación al año 2015 cuando fue la segunda fuente de energía. “Por tanto, la retirada del carbón del mix energético español no supondría ningún riesgo a la garantía de suministro“, concluye.
“No se trata de cómo se hará sino de cuándo se redactaran los planes -como ha hecho el Reino Unido esta semana- y cuándo se pondrán en vigor las políticas necesarias para cumplir con los compromisos que se han hecho para afrontar el cambio climático predicando con el ejemplo“, apostilla el Instituto Internacional de Derecho Internacional y Medio Ambiente.
El nuevo Ministerio de Energía, Turismo, y Agenda Digital, que dirige Álvaro Nadal Belda, debería seguir el ejemplo del Department of Business, Energy and Industrial Strategy del Reino Unido, presentando un plan detallado para que se lleve al cabo el cierre de las centrales térmicas de carbón en España a más tardar en 2025".
El Instituto insiste así en que "la retirada del carbón del mix energético español no supondría ningún riesgo a la garantía de suministro". Además -recuerda en su nota-, "la quema de carbón es la principal fuente de emisiones de CO2 generadas por el sector eléctrico, además de ser fuente de otros contaminantes con un gran impacto en la salud y el medio ambiente" (como los óxidos de nitrógeno, los óxidos de azufre y las partículas). "No se trata de cómo se hará -concluye el Instituto-, sino, cuándo se redactarán los planes -como ha hecho el Reino Unido esta semana- y cuándo se pondrán en vigor las políticas necesarias para cumplir con los compromisos que se han asumido para afrontar el cambio climático predicando con el ejemplo".
El Instituto IDMA se define como "una organización de derecho ambiental, fundada en diciembre de 1996 con el fin de contribuir a la protección del medio ambiente y a la consecución de un desarrollo sostenible a través del estudio, desarrollo, aplicación y ejecución del Derecho desde una perspectiva internacional y multidisciplinar". Desde 1998, el Instituto IDMA es una organización acreditada ante la hoy Asamblea de Medio Ambiente de las Naciones Unidasdependiente del Programa de Naciones Unidas de Medio Ambiente (Pnuma). En 2001 fue declarada de utilidad pública.