Apurímac es la región con mayor potencial minero en el país. Incluyendo a Las Bambas, alberga una cartera adicional de proyectos valorizada en US$19.713 millones, más del 33% del total estimado en el ámbito nacional para los próximos años.
Entre los principales proyectos mineros de Apurímac destacan Haquira (US$2.800 mlls.), Hierro Apurímac (US$2.300 mlls.), Cotabambas (US$1.963 mlls.), Los Chancas (US$1.560 mlls.), Trapiche (US$1.000 mlls.) y Anubia (US$90 mlls.), todos aún en etapa de exploración. En conjunto, representan una inversión de US$9.713 mlls., similar a la de Las Bambas (US$10.000 mlls.).
Todos estos proyectos se ubican en distritos con niveles de pobreza que superan el 50%, y en una región cuyos indicadores económicos y sociales se encuentran en el tercio más pobre del país.
Beneficios tangibles
Apurímac fue la región que más creció en el Perú durante el segundo trimestre de este año. Según el Instituto Peruano de Economía (IPE), la actividad económica regional se expandió en 226% en este período, marcada principalmente por el crecimiento del sector minero asociado a la puesta en operación de la mina cuprífera.
El IPE estima además que solo la producción de Las Bambas añadiría S/4.160 millones a la economía apurimeña, cifra que representa 1,75 veces el PBI que alcanzó la región durante el 2015 (S/2.600 millones).
Con esto, en el 2016 se observará un reordenamiento de la estructura productiva apurimeña. De ser una región sustentada en los servicios y la construcción (que representaron en conjunto el 44% del PBI regional el año pasado), pasará a ser principalmente minera.
Brechas pendientes
Si bien la región ha disminuido su índice de pobreza en casi 31 puntos porcentuales durante los últimos 12 años [ver infografía], aún sigue reportando niveles altos para el promedio nacional.
Un 39% de la población apurimeña es pobre, pero hay marcados contrastes entre algunas provincias y distritos. Mientras la capital, Abancay, registra un 31,8% de población pobre, la provincia de Cotabambas –que, además de Las Bambas, alberga a los proyectos Haquira y Cotabambas– tiene más de 70,2%, más del doble.
Actualmente, Apurímac ocupa el puesto 16 de 24 regiones en el Índice de Competitividad del IPE; sus mayores carencias están en los rubros de educación, instituciones, entorno económico e infraestructura.
Algunos avances
Además del monto invertido en la implementación del proyecto, que dinamizó sectores de la economía local como la construcción y algunos servicios, la presencia de Las Bambas ha tenido un impacto en la región antes del inicio de la producción, tanto con el Fondo Social Las Bambas (Fosbam) como a través del adelanto del canon minero, recibido por el gobierno regional y algunas provincias en el 2013.
El Fosbam ha ejecutado proyectos en educación, salud y saneamiento por casi US$64 millones. En tanto, el Ejecutivo –a través del Ministerio de Economía y Finanzas– adelantó los recursos del canon minero por S/400 millones al Gobierno Regional de Apurímac y a las provincias de Andahuaylas, Cotabambas, Grau y Abancay para la ejecución de proyectos. Los beneficiados se comprometieron a devolver lo prestado con sus ingresos futuros de canon.
Esos recursos forman actualmente gran parte de su presupuesto de inversión. Sin embargo, la ejecución de estos aún está en niveles bajos. El avance del presupuesto destinado a proyectos es de 49% en el ámbito regional y 45,4% en el ámbito municipal en lo que va del año.
“La ejecución es lenta. Eso se debe a las dificultades que tienen las municipalidades pequeñas para formular proyectos. Uno de los objetivos del Fosbam era el fortalecimiento de la capacidad institucional de las municipalidades para prepararlas para la llegada del canon”, opina Epifanio Baca, especialista de la ONG Propuesta Ciudadana. 
Así se repartió el canon adelantado en Apurímac
Apurímac recibió cerca de S/400 millones como adelanto por canon minero en el 2013 por el proyecto Las Bambas. Según el gobernador Wilber Venegas, de esta cifra S/149 millones pasaron a manos del gobierno regional. El resto fue dividido entre las municipalidades provinciales de Chincheros, Abancay y Grau; cada una recibió S/80 millones en promedio.
Venegas dijo a El Comercio que, para obtener el adelanto del canon, la anterior gestión presentó una lista con cerca de 30 proyectos con estudios de perfil aprobados. Se plantearon proyectos de carreteras, hospitales, colegios y defensas ribereñas, así como obras de riego. “Algunos de esos proyectos los han dejado en arbitraje. Hemos ejecutado el 95% de ellos con el dinero del canon”, dijo.
La deuda ha sido refinanciada con el MEF para que sea pagada a partir del 2021. “Se estima pagar S/30 millones por cinco años”, agregó Venegas.
Datos
La participación del sector minero en el PBI de Apurímac será de 65% al terminar el 2016. A fines del 2015 fue de 10%.
El 33% de la cartera de proyectos mineros en el país se concentra en Apurímac, incluyendo a Las Bambas (ya en fase de explotación).