El complejo metalúrgico de La Oroya (Junín) y la mina Cobriza (Huancavelica), activos de la empresa Doe Run, que actualmente se encuentra en liquidación en marcha, podrían ser vendidos en febrero del próximo año. Así lo informaron fuentes en la Junta de Acreedores de la compañía a Perú21.
Indicaron que, para concretar la subasta en ese mes, la Junta —que está integrada por el Estado, los trabajadores de Doe Run, Doe Run Cayman y otros acreedores— modificó parte de los convenios de venta que se mantenían desde 2015 con la finalidad de presentar “una propuesta más clara” a los potenciales postores.
“El 3 de noviembre se aprobarán las bases y el precio de venta; desde ese momento, los interesados en adquirir las propiedades podrán acercarse a conocer los contratos”, detallaron las fuentes a este diario.
Agregaron que existen siete grandes compañías —entre nacionales e internacionales— interesadas en adquirir la metalúrgica y Cobriza; y un mismo número tienta hacerse solo de esta última. No obstante, no quisieron revelar los nombres de las firmas. Dirige es la empresa a cargo de tramitar la venta de los activos de Doe Run. Además, es la que administra transitoriamente las operaciones de la refinería y la mina.
El representante de Dirige, Pablo Peschiera, confirmó a Perú21 que en noviembre la Junta de Acreedores aprobará las nuevas condiciones para concretar el negocio.
“El convenio anterior establecía una subasta internacional, pero en agosto de 2015, la norma cambió y ahora la venta debe hacerse vía remate público; con el anterior acuerdo se debía aprobar la compra, pero ahora solo deben aprobarse las condiciones para la venta”, explicó Peschiera, quien agregó que el pago a los acreedores se hará de acuerdo a ley.