Perforar la cordillera de los Andes para hacer dos ductos de carretera de 13,9 kilómetros (km), con dos calzadas por sentido, además de edificar dos complejos fronterizos con sus respectivas aduanas y servicios es, a grandes rasgos, el proyecto que hoy presentaron los gobiernos de Argentina y Chile y que se conoce como Túnel de Agua Negra.
Se trata de uno de los 26 pasos que ambos países se comprometieron a desarrollar o mejorar a lo largo de la cordillera Agua Negra nació en el tratado de Maipú en 2009, fue suscrito por las presidentas Michelle Bachelet y Cristina Fernández, estará ubicado a unos 3.600 metros de altura y unirá la Región de Coquimbo con la transandina Provincia de San Juan, y será el túnel más largo entre Chile y Argentina.
A partir de 2009, ambas naciones conformaron la Entidad Binacional Túnel Agua Negra (Ebitan), que a través de dos protocolos definió primero los estudios técnicos y luego el aspecto financiero, así como los protocolos para hacer un llamado a licitación conjunta adecuándose a las normativas de los dos países.
En una actividad realizada hoy en las dependencias del Ministerio de Obras Públicas (MOP), las autoridades de ambos países anunciaron el inicio de la primera etapa de la licitación, que es certificar a las empresas que podrán participar en el concurso público para construir el túnel, las que tendrán como plazo hasta mayo de 2017 para inscribirse, señaló el ministro del ramo, Alberto Undurraga: “Con este anuncio iniciamos el camino hacia el punto de no retorno de la construcción de un túnel”.
La etapa de precalificación es obligatoria para las firmas interesadas y, según datos de la cartera, asciende a 19 compañías, en su mayoría extranjeras, que en el último año han solicitado reuniones e información sobre el proyecto. La inversión de la obra será de US$ 1.414 millones, y será financiada vía convenio con el Banco Interamericano del Desarrollo (BID) por ambos gobiernos. Las autoridades señalaron que no se descarta la instalación de un peaje, cuando esté operando, para cubrir gastos de mantenimiento.
El ministro de Hacienda de Argentina, Alfonso Prat-Gay, destacó el hito señalando que “en momentos en que en algunos lugares del mundo se debate la posibilidad de levantar muros, nosotros estamos rompiendo y haciendo un túnel para conectar a las dos naciones hermanas, conscientes de que la integración cultural e histórica requiere además de integración física”.
Lo anterior se basa en que el proyecto también se unirá al corredor bioceánico que conectará los puertos de Coquimbo con el de Porto Alegre en Brasil,
Luego de esta etapa, se espera licitar la obra para adjudicarla en 2018. El plazo de construcción fluctúa entre ocho y 10 años. El ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, explicó que “después vienen las obras de ingeniería, de investigar cuánto de verdad cuesta; uno no sabe qué se va a encontrar debajo del cerro y hay que hacer ajustes en ese momento”.
Las autoridades también se refirieron a la congestión que se generó en Los Libertadores el pasado fin de semana largo y que se origina por el creciente número de argentinos que está pasando la frontera para comprar en Chile. El ministro de Transportes transandino, Guillermo Dietrich, llamó a “trabajar en todos los cruces. El último fin de semana hubo muchos problemas y tenemos que avanzar en mejorar”. Valdés aseguró que “ese es un tema viejo que no hemos podido solucionar completamente, que ha avanzado, pero que nos queda claramente por trabajar”.
Actualmente, en la zona funciona un camino internacional que, según informó el intendente de Coquimbo, Claudio Ibáñez, es estacional, es decir, opera sólo en los meses de verano, entre noviembre y marzo. Sólo se permite el ingreso de autos menores, furgones y vehículos 4×4. En temporada alta se registra el ingreso de unos 1.500 vehículos por día, y se espera que el túnel aumente ese flujo a unos 2.200 vehículos, el 70% de ellos sería de carga.
Por ello, añadió Ibáñez, se está avanzando en las vías de acceso, sobre todo para los vehículos mayores y camiones. “Estamos haciendo estudios de rutas alternativas al Valle del Elqui, y midiendo cuál será el impacto que tendría el tránsito de camiones; también estamos evaluando un bypass a la altura de La Higuera, porque no queremos generar efectos negativos en la zona”.
Entre los rubros que se verían beneficiados por el túnel están la industria de la Cal, uva, cobre, trigo, soja, tabaco, harinas, autopartes y transporte de pasajeros.
TELÁM
La ceremonia, que se realizó en el ministerio de Obras Públicas chileno, fue encabezado por los ministros chilenos de Relaciones Exteriores, Heraldo Muñoz; de Obras Públicas, Alberto Undurraga, y de Hacienda, Rodrigo Valdéz, junto a los ministros argentinos de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, y de Transporte, Guillermo Dietrich, además del embajador argentino en Chile, José Octavio Bordon, y su homólogo trasandino en Buenos Aires, José Antonio Viera-Gallo.
El ministro Prat-Gay calificó la construcción del túnel como la materialización del “anhelo que mantienen hace mucho tiempo los pueblos chileno y argentino”.
“Gracias al aporte del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), a la vocación política de Michelle Bachelet y del presidente Mauricio Macri, nos alegra poder anunciar que se inicia este proceso de precalificación, en momentos donde en algunos lugares del mundo se debate por levantar muros, nosotros estamos rompiendo el muro para conectar dos naciones hermanas”, dijo.
Prat-Gay resaltó además que “somos conscientes de que la integración cultural e histórica requiere además una física y que esto le va a dar la posibilidad de desarrollo para chilenos como argentinos. Sabemos que el proceso llevará años de construcción pero fortalecerá la integración entre los dos países”.
Para el canciller chileno, Heraldo Muñoz, el túnel “es una expresión concreta de integración y de unidad entre los dos países con acciones tangibles y sin retórica” y destacó que "estamos en un momento óptimo en las relaciones bilaterales, donde exportamos energía hacia Argentina y hoy iniciamos este proceso de precalificación para la construcción del túnel de Agua Negra".
Resaltó además que "se ha reconstituido el comité empresarial binacional y prontamente visitaremos Buenos Aires para tener el 2+2, la reunión de cancilleres y ministros de defensa. Pero más importante aún hemos constituido un comité para pensar el 2030 entre Argentina y Chile. Es decir ponemos la vista en el horizonte, para no sólo conectar la región de Coquimbo con San Juan, sino para integrarnos mirando hacia el futuro y para eso aún nos queda mucho por hacer”, dijo.
Sobre el túnel, que tendrá una extensión de 13,9 kilómetros y contará doble vía en ambos sentidos, el ministro argentino de Transporte, Guillermo Dietrich, consideró que “es de importancia para dos regiones de nuestros países y viene a concretar la profundización la integración territorial”.
“Si bien son importante los anuncios, más lo son los hechos y debo valorar el trabajo que realizamos en conjunto con el ministro Undurraga, de manera logística y de forma concreta para mejorar la conectividad entre nuestros países”.
Por último, Valdéz, el ministro chileno de Hacienda, valoró el respaldo del BID para la construcción del viaducto el cuál tendrá una inversión de 1.475 millones de dólares.
“Este proceso lo estamos haciendo con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo, lo que garantiza calidad en la competitivad, la transparencia y reglas claras en este proceso, que contará con los máximos estándares internacionales para que vengan los consorcios más importante del mundo a competir por el proyecto y así sirva como ejemplo para todos los otros pasos fronterizos que tenemos”.
También estaban presentes el gobernador de San Juan, Sergio Uñac, y el intendente de la región de Coquimbo, Claudio Ibáñez, quienes remarcaron que el túnel permitirá de una mejora en la integración física, comercial y cultural, que el pueblo de San Juan pueda mirar también al oeste y el del Coquimbo al este, ya que la Cordillera ya no será una separación.
La construcción del Túnel de Agua Negra permitirá también dinamizar los sectores productivos exportadores del Mercosur, ya que dispondrán de una conexión alternativa para mejorar la comercialización hacia países del área del Pacífico, creando miles de puestos de trabajo (directos e indirectos) en la construcción.
El área de influencia directa de este Corredor Bioceánico, desde Porto Alegre en Brasil hasta Coquimbo en Chile, en el que está inserto este proyecto, sumaría un total aproximado de 252.000 millones de dólares de PIB regional, entre Argentina, Chile y Brasil.
En la ceremonia, el ministro Prat-Gay aprovechó de anunciar que hoy entra en vigencia el tratado de doble tributación entre Chile y Argentina, “lo que hará más efectiva la integración entre las empresas y también va a contribuir en hacer más sencilla la inversión de argentinos en Chile y de chilenos en Argentina”.
TIEMPO DE SAN JUAN
En un paso más de lo que ambos gobiernos definieron como clave para la integración binacional, Argentina y Chile podrán en marcha hoy el proceso de licitación internacional para construir el túnel vial cordillerano Agua Negra, que unirá la provincia de San Juan y la región chilena de Coquimbo.
El proyecto, que tiene financiamiento aprobado por unos u$s 1600 millones por parte del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), prevé la construcción de dos túneles uno de ida y otro de vuelta para el tránsito vehicular, principalmente de camiones y forma parte de la iniciativa de corredor bioceánico central, que a futuro permitirá conectar la región de los puertos chilenos con la ciudad brasileña de Porto Alegre.
Con una ceremonia en la capital trasandina, de la que participarán funcionarios chilenos y argentinos encabezados por el ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay, y su par de Transporte, Guillermo Dietrich ambos gobiernos abrirán el llamado a precalificación de empresas, para diseñar y construir el túnel fronterizo que busca "mejorar la conectividad de los dos países y generar condiciones para el transporte de carga, de pasajeros, así como potenciar el desarrollo económico y turístico", expusieron desde el gobierno de Michele Bachelet al realizar la convocatoria.
Tras el anuncio a cargo de los ministros de ambos países, Bachelet se reunirá con los funcionarios de las administraciones centrales, así como autoridades de Coquimbo, San Juan y del ente binacional Túnel Agua Negra (Ebitan), creado en 2010 para avanzar en el proyecto.
"La participación de Bachelet en esto es una señal política concreta del apoyo que le ha asignado Chile este año a la licitación y a la construcción del túnel", manifestó Uñac en declaraciones a la prensa cuyana.
La obra de Agua Negra, que considera estudios de ingeniería, expropiaciones territoriales y la construcción, podría estar concluida en ocho o diez años, de acuerdo con las estimaciones de las autoridades chilenas.
Se estima que tras la precalificación de las empresas, hacia fin de año se podrán abrir los sobres para conocer quiénes siguen en carrera y para abril próximo se abra el proceso licitatorio.
Agua Negra es un paso fronterizo histórico muy utilizado aunque las condiciones viales distan de ser ideales, y además en los inviernos suele quedar suspendida la circulación por las nevadas en la zona. Con el túnel, de 14 kilómetros por la montaña y a un menor altitud (4000 metros sobre el nivel del mar del lado argentino, contra los 4800 actuales) que el actual paso, las autoridades de Ebitan estiman que será transitable durante todo el año.
El proyecto forma parte de una serie de planes de infraestructura para mejorar la conectividad tanto vehicular, como ferroviaria y aérea entre ambos lados de la Cordillera. En ese marco, uno de los hitos este año fue la reactivación del tren trasandino norte, que une Salta con los puertos chilenos de Mejillones y Antofagasta.
Además del túnel de Agua Negra, también avanza el proceso para revitalizar otro paso cordillerano: Las Leñas, que unirá el sur mendocino, desde la ciudad de San Rafael, con la región chilena de Libertador Bernando OHiggins. Se trata de un túnel vial de 11,5 kilómetros de largo, para el cual en enero de 2015 se creó el ente binacional (Ebileñas), que se constituyó en Buenos Aires en abril último. Las autoridades de ambos países consideran que ese cruce también será operativo durante todo el año, por lo que se convertirá en la mejor alternativa para el paso Cristo Redentor, también en Mendoza, que suele tener prolongados cierres en el invierno y largas demoras durante las vacaciones.