Gerente general de SQM asistió a la comisión investigadora del litio, donde defendió las acciones de la minera ante polémica con Corfo.
“No voy a justificar cosas que se hicieron o que no se hicieron, no tengo por qué hacerlo y están en proceso de investigación. Habrá responsabilidades personales que tendrán uno u otro asumir”.
Con estas palabras se refirió el gerente general de SQM, Patricio de Solminihac, a la investigación existente por aportes irregulares a la política en la que se ha visto involucrada la empresa minera.
De Solminihac asistió ayer a la sesión de la comisión investigadora del litio en la Cámara de Diputados, ocasión en aludió esta situación, la que calificó como un momento “difícil” para la compañía.
El ejecutivo manifestó que SQM mantiene un “apoyo total a las investigaciones”, y que “pase lo que deba pasar”.
Agregó que la empresa entregó “camiones de papeles” al Servicio de Impuestos Internos (SII), prestando la colaboración necesaria para su investigación. “Lo mismo con el Ministerio Público, no sólo con la participación de muchos nuestros, incluido yo, en las declaraciones, también en entrega de información permanentemente todas las semanas. Y lo vamos a seguir haciendo. También con la Superintendencia de Valores y Seguros y las instituciones que nos supervigilan en EE.UU.”, agregó.
Respecto del contrato especial de operación de litio, que en 2012 fue anulado a días de que SQM se lo adjudicara en una licitación, De Solminihac reconoció que la empresa cometió un error, aunque no de mala fe. “Cometimos un error administrativo, que en vez de contestar una cosa contestamos otra. Nos sentimos tranquilos que no hemos hecho nada impropio”, señaló.
Sobre el caso cascadas, el ejecutivo dijo no conocerlo, y que nada tiene que ver con la empresa. “Es un accionista de SQM que tiene otro sistema y claramente es independiente”, sostuvo.
A través de una presentación de 18 láminas, De Solminihac expuso la visión de la empresa sobre el conflicto que mantiene con Corfo, la que solicita el término anticipado del contrato existente entre ambos por presuntos incumplimientos.
En su exposición, dijo en relación con la determinación de la renta de arrendamiento (donde Corfo acusa que SQM dejó de pagar US$ 8,9 millones) que las partes revisaron en 1997 el precio a utilizar. “Si usted aplica la teoría de Corfo, y la aplica al período completo, hemos pagado de más”, afirmó, y dijo que esa cifra llegaría a US$ 500 mil.
Sobre el royalty minero, el ejecutivo señaló que la empresa paga este tributo por todos los productos producidos en el salar, pero que no lo hacía por el litio. Esto, luego que el SII señalara que este impuesto no afectaba a productos no concesibles, postura que luego cambió indicando que debía pagar. “ Nosotros la pagamos, no estando de acuerdo, y nos reservamos el derecho de poder reclamar y que efectivamente los tribunales tributarios decidan”, complementó.
