El año cerrará con una inflación similar a la de 2014, una recesión del 1,6 por ciento y un tipo de cambio de $ 15,94, según el pronóstico de consultoras y bancos.
El informe de LatinFocus Consensus Forecast difundido ayer indica que, en promedio, se prevé que en 2017 haya un crecimiento económico del 3,1%, una inflación del 20,9% y un dólar a $ 18,30.
La inflación de este año terminaría en el 38,7%, muy parecido al 38,5% registrado en 2014 por las consultoras privadas, cuando el gobierno kirchnerista decidió una devaluación bastante menor que la del inicio de la gestión macrista.
Invecq Consulting estimó que este año la suba de precios será del 43%; Itaú BBA, del 42,8%; EIU, del 42,7%; Elypsis, del 42,2%, y FyE Consulting, 41,3%. El registro más bajo corresponde a Standard Chartered, con 30 por ciento.
Para el año próximo, el promedio es del 20,9%, pero hay registros más altos, como Oxford Economics, con el 26,6%, y LCG, la consultora fundada por el embajador en EE.UU., Martín Lousteau, con el 26,1%; y Nomura, con el 25 por ciento. Del otro lado se ubicó Analytica, con el 16,3 por ciento, según indicó la nota de Martín Kanenguiser en La Nación.
En cuanto al crecimiento, para este año se prevé una recesión del 1,6% -muy parecido al 1,5% calculado por el Gobierno-, aunque algunos se estiraron hasta el -2,4%, como Econométrica, fundada por el radical Mario Brodersohn; -2.2%, de LCG; -2,1%, de Empiria, y -2%, del Banco Supervielle y Capital Economics.
Respecto del año próximo, mientras el promedio es del 3,1%, algunos se estiraron hasta el 5,1%, como Analytica; al 5%, como el estudio Bein, y al 4%, como Santander, C&T Chartered y Supervielle. En cambio, Apoyo consultora calculó el -0,4% y Kiel Institute, un cero por ciento.
En relación con el tipo de cambio, el promedio para este año es de $ 15,94, pero Nomura se estiró a $ 16,50; LCG, a 16,25; Orlando Ferreres, a $ 16,15, y FIEL, a $ 16,12.
Para el año próximo, el promedio es de $ 18,30, pero Ferreres estimó $ 19,98; la Fundación Capital e Itaú, $ 19,50 y Ecolatina, $ 19,21, mientras que el tipo de cambio más bajo lo calculó BMI Research, en $ 14,60.
En tanto, según el IPC Congreso que elaboran legisladores opositores a partir de las estimaciones de consultoras privadas, la inflación se ubicó en el 0,8% mensual el mes pasado. Con esta cifra, la suba de los precios interanual se ubica en el 42%, mientras que el acumulado para los primeros nueve meses del año asciende al 31,8 por ciento.
Sin vehemencia, el tono que suele emplear cuando hace grandes anuncios, el ministro de Hacienda, Alfonso Prat-Gay , sentenció el final de la transición política en materia económica en el marco de la 64º Convención de la Cámara Argentina de la Construcción, que se realiza en el hotel Sheraton. "Toda la economía dejó de caer en el tercer trimestre", sostuvo ante un auditorio colmado por empresarios del rubro.
Minutos despúes, cuando el funcionario dejaba la reunión, amplió sus definiciones ante la consulta de LA NACION. "Es la conclusión a la que se llega cuando se compara el tercer trimestre con el mismo período del año anterior de manera desestacionalizada. Hay que tomarse el trabajo de analizar los números de esa manera", completó.
Según el funcionario, el cambio de tendencia en el nivel de actividad es el primer paso para dejar la transición de un modelo a otro y comenzar a transitar una situación más próspera que debería consolidarse el año próximo.
Prat-Gay se excusó de hablar sobre la industria automotriz porque no recordaba los números específicos de ese sector, pero sostuvo que la industria en general dejó de caer en el período julio-septiembre, a contramano de lo que ocurrió en la primera parte del año.
En cambio sí se explayó con respecto a otros sectores. Entre ellos, la producción de asfalto y la de cemento, ambos rubros vinculados con la construcción. "Todo indica que los números del tercer trimestre del Indec mostrarán una crecimiento de la construcción", les había dicho antes a los empresarios sobre la base de esos indicadores.
Al momento de mencionar a los responsables del cambio de tendencia, Prat-Gay nombró a dos: el propio Estado, que multiplicó el gas en obras, y el interior del país, que mostró una reacción más temprana que las ciudades debido al dinamismo del campo.
En el primer caso, el propio ministro explicó los motivos. Sucede que la inversión pública en obras casi se triplicó, desde los $ 17.000 millones del primer trimestre hasta los $ 51.000 millones del tercero. Es el principal motivo por el cual crecieron los despachos de cemento y de asfalto, por caso.
