Paula Lugones
El organismo celebra el esfuerzo en corregir desequilibrios. Y reconoce los costos, aunque es optimista con el crecimiento a partir de 2017.
Para el FMI, la Argentina “ha avanzado mucho” en corregir los desequilibrios económicos heredados del gobierno anterior pero “la transición ha sido más costosa de lo previsto”. Sin embargo, cree que las perspectivas de crecimiento a mediano plazo han “mejorado considerablemente”. De una caída del PBI de -1,8% para este año, pronostica una suba hasta 2,7% en 2017. Estima que la inflación será de 30,5% en 2016 y 20,5% el año próximo.
Según el informe sobre “perspectivas económicas sobre las Américas”, divulgado esta mañana por el organismo en el marco de la Asamblea del FMI y el Banco Mundial aquí e Washington, “en Argentina siguen en marcha las reformas orientadas a corregir los persistentes desequilibrios macroeconómicos y las distorsiones microeconómicas que se heredaron del gobierno anterior".
El informe señala también que "Se ha avanzado mucho desde que el nuevo gobierno entró en funciones en diciembre del año pasado, por ejemplo en la unificación del tipo de cambio, la normalización de las relaciones con los acreedores, la realineación de los precios de los servicios públicos a un nivel más cercano al costo marginal, la eliminación de las distorsiones (incluidas las relacionadas con los impuestos sobre las exportaciones y los controles de capital), y la mejora de la transparencia y la gobernanza (incluido el Instituto Nacional de Estadística).”
Continúa: “La transición ha resultado más costosa de lo previsto en 2016, pero las perspectivas de crecimiento a mediano plazo han mejorado considerablemente, y se prevé que el crecimiento repunte en 2017, gracias al fortalecimiento del consumo al reducirse la inflación y la desaceleración del ajuste fiscal con respecto a este año.
Para lograr un crecimiento fuerte, sostenible y equitativo, se requerirá reducir los desbalances fiscales y enfocar la política monetaria hacia una caída sostenida de la inflación."
También subraya que "La reconstrucción del marco institucional y la profundización de las reformas estructurales aliviarán significativamente el costo económico de la transición, creando un ambiente más receptivo para la inversión privada, al tiempo que genere dividendos de mediano plazo significativos en términos de más y mejores empleos, así como también un crecimiento sostenido de los estándares de vida de la población argentina”.
El informe se divulga poco después de que visitara la Argentina una misión del FMI, en el marco del artículo IV, para revisar los números de la economía, conversar con funcionarios del gobierno, sindicalistas, empresarios y miembros de la sociedad civil.
Esto sucede en todos los países, pero Argentina había abandonado este Artículo desde hace 10 años. El informe de la misión será elevado al directorio del FMI.
El gobierno argentino, según le dijo el ministro Alfonso Prat Gay a la directora Christine Lagarde en su encuentro ayer, será hecho público porque “no hay nada que ocultar”.
El Fondo Monetario Internacional consideró que el ajuste que enfrentó la Argentina en los últimos meses resultó "inevitable", a la vez que sostuvo que la economía "tocó fondo", por lo que experimentará "cambios en la tasa de crecimiento" que le permitirá sortear la recesión del 2016.
Así lo indicaron este viernes en Washington los técnicos del FMI, durante la conferencia de las economías del Hemisferio Occidental, que tiene lugar en el marco de la Asamblea Anual de FMI y del Banco Mundial.
El Director del Hemisferio Occidental para la región, Alejandro Werner, quien regresó a Washington desde Buenos Aires, el jueves pasado, consideró que este gobierno tiene "sensibilidad política importante, y una voluntad" para avanzar en consensos que permitan un "proyecto nacional a largo plazo".
"Estuve acompañando al equipo que concluyó la misión la semana pasada (en Buenos Aires) y en todas las interacciones que tuve a nivel informal sentí un nivel de entendimiento acerca de la necesidad de llevar adelante cambios importantes, graduales y consensuados, para llevar el crecimiento sostenible y con equidad social", expresó Werner.
El funcionario del FMI añadió que "el presidente (Mauricio) Macri se enfoca en el aspecto de moverse hacia una economía predecible", y la contrapuso con "la herencia que este gobierno tuvo que enfrentar, con distorsiones económicas excesivas".
En este sentido, consideró que la Argentina muestra un nivel de sensibilidad social y política importante, y voluntad de lograr consenso entre fuerzas políticas para avanzar en un proyecto nacional a lo largo del tiempo.
El Fondo pronosticó en su nuevo reporte un crecimiento para el 2017, luego de un año 2016 en donde la economía de Brasil y la Argentina tocaron fondo y comenzarán con un "cambio en el crecimiento de más de 3%".
Estimó, sin embargo, que será inevitable que en este período fiscal la economía argentina culmine con una recesión de 1,6%.
Respecto de la inflación, expresó que el nivel de diciembre de 2017 culminará con un aumento de 20% respecto de fines de 2016, con una inflación inflación promedio de 23%, "que resulta más alta que la interanual, dado que los precios se están desacelerando", aclaró.
Respecto de la inversión, Nigel Chalk, experto en los números de la economía argentina, estima un crecimiento de 2,7%. La conferencia tuvo lugar mientras la delegación argentina que encabeza el ministro de Economía, Alfonso Prat Gay, estuvo participando de la Asamblea Plenaria del Fondo Monetario y el secretario de Finanzas, Luis Caputo, se encuentra en reuniones con inversores internacionales a puertas cerradas.