Los precios del petróleo descendieron durante la mañana de la jornada de negociación de este miércoles en Europa, registrando su cota más alta en casi cuatro meses, pues los actores del mercado dirigen la atención hacia los datos semanales sobre las reservas de petróleo y productos refinados de Estados Unidos.
El petróleo del New York Mercantile Exchange para entrega en noviembre se apuntó un alza del 1,31% o 64 centavos y se negoció a 49,33 USD por barril a las 4:05, hora de la costa este (as 10:05 en España), tras haberse situado anteriormente en 49,45 USD, su cota más alta desde el 30 de junio.
La Administración de Información Energética de Estados Unidos publicará su propio {{ecl-75||informe semanal sobre reservas de petróleo a las 10:30, hora de la costa este (las 16:30 en España). ante las expectativas que apuntan a un aumento de 2,56 millones de barriles.
Todo apunta a que las reservas de gasolina habrán aumentado en 702.000 barriles, mientras que las reservas de productos destilados, que incluyen elcarburante para calefacción y el diésel, habrán descendido en 700.000 barriles según los analistas.
Tras el cierre de los mercados este martes, el Instituto Americano del Petróleo anunció un inesperado descenso de 7,6 millones de barriles de las reservas de crudo durante la semana que concluía el pasado 30 de septiembre. El informe indicaba también un aumento de 2,9 millones de barriles de las reservas de gasolina, mientras que los destilados han descendido en 1,3 millones de barriles en términos semanales.
Mientras, en el ICE Futures Exchange de Londres, el petróleo Brent para entrega en diciembre se negoció a 51,58 USD por barril, con un avance del 1,4% o 71 centavos. El contrato había ascendido hasta 51,69 USD, su cota más alta desde el 10 de junio.
La confianza seguía respaldada después de que los miembros de la OPEP acordaran la semana pasada recortes de producción por primera vez en ocho años, a pesar de cierto escepticismo entre los analistas acerca de la puesta en marcha de tal acuerdo.
El cártel petrolero llevó a un acuerdo para limitar la producción hasta un rango de entre 32,5 y 33,0 millones de barriles al día, lo que supone una reducción del 0,7-2,2% de su producción actual de 33,2 millones de barriles.
Sin embargo, el mercado sigue siendo escéptico en cuanto a este acuerdo, y se plantea cómo sería posible implementar dicho plan. Algunos analistas han advertido de que el acuerdo ha obviado detalles cruciales sobre cuánto deberá producir cada país.
El grupo petrolero de 14 miembros ha declarado que va a esperar hasta la reunión oficial de la OPEP en Viena que se celebra el próximo 30 de noviembre para anunciar su decisión, pues la invitación a los recortes podría hacerse extensiva entonces a países no miembros de la OPEP como Rusia.