La Argentina escaló dos lugares en el Ranking de Competitividad Global que elabora el Foro Económico Mundial, también conocido como Foro de Davos, pese a lo cual sigue muy mal ubicada en el listado, en el puesto 104 sobre u total de 138 países relevados.
El listado es elaborado a partir de las encuestas a los empresarios miembros del Foro, y sus resultados fueron conocidos hoy, menos de dos semanas después de que el gobierno de Mauricio Macri realizara su propio "mini Davos" en el Centro Cultural Kirchner en busca de atraer inversiones al país.
Entre los peores aspectos de la competitivdad argentina, que determinan en gran parte el mal resultado del país en el ranking general, se ven en la efectividad del mercado de bienes (135), instituciones (130), entorno macroeconómico (130), mercado de trabajo (130) y mercado financiero (127).
Por otro lado, en algunos aspectos el país rankea mucho mejor, como en el tamaño del mercado (28), educación superior (40), o, por lo menos, en la mitad inferior de la tabla, como en salud y educación primaria (63) y tecnología (69).
Mercado de bienes
En el índice de la efectividad del mercado de bienes, debajo de Argentina sólo quedan Mauritania, Chad y, en último lugar, Venezuela. Chile lidera la región, en el puesto 44. Uruguay se hubica en el 63, y Brasil en el 128.
El mercado de bienes está diferenciado en dos subcategorías, competencia y condiciones de la demanda. Según el ranking, el mercado de bienes argentino tiene las peores condiciones para la competencia y se encuentra en el puesto 127; el ante último lugar, superando solamente a Venezuela.
Tanto por las instituciones públicas como por las privadas, Argentina figura en los últimos lugares de la tabla. En el sector público, la categoría esta compuesta por, derechos de propiedad (129), Corrupción (128), influencias indebidas (126), desempeño del sector público (134), y seguridad (105).
Por su parte, el sector privado no mejora en cuanto ética y transparencia con respecto al sector público, situándose éstos en los puestos 132 y 102, respectivamente.
Con referencia a los problemas macroeconómicos estruturales, el reporte apunta como la principal falencia al déficit fiscal, donde el país se encuentra en el puesto 121, mejor que Brasil en cuanto a la situación de balanza Estatal, pero peor en cuanto a las condiciones macroeconómicas generales.
El otro factor que marca negativamente la macroeconomía argentina es la calidad del crédito, situándose en el puesto (115). Para la Argentina, el índice con respecto a la inflación no se publica.
De los 138, solo 8 países sacan una peor nota en cuanto a la eficacia del mercado de trabajo según el índice: Mauritania, Argelia, Túnez, Irán, Egipto, Bolivia, Yemen y Venezuela.
Chile vuelve a liderar Sudamérica con el puesto 52, Perú en el 61 y Brasil en el 117.
Economías que se han caracterizado por tener regímenes laborales muy intervenidos durante gran parte del siglo XX, en los últimos años han reconfigurado su mercado laboral. Hoy China ocupa el puesto 39 y Rusia el 49.
El mercado de crédito argentino está entre los peores 12 países que integran el ranking. En una mejor situación se encuentran países como Sierra Leone, Mongolia, Madagascar y Congo.
Por el otro lado, el empresariado valora el tamaño del mercado argentino y, en cuanto a la educación superior, ésta se encuentra dentro de las mejores 40 del ranking.
Sin embargo, desglosando el ítem, vemos que la educación alcanza a gran parte de la población, y ocupa así el puesto 16, pero que en cuento a la calidad, ésta ocupa el puesto 83.
Entre las principales observaciones de este año “se encuentran una disminución de la apertura económica" y se resalta "la importancia de la competitividad para la eficacia de planes de estímulo monetario” destacó el informe.
En la región, se destaca Chile, que subió dos puestos, convirtiéndose en la 33ª economía más competitiva del mundo. Panamá es uno de los mayores escaladores entre los cincuenta primeros, subiendo ocho puestos, situándose en el 42. México subió seis puestos hasta el 51 y Brasil bajó seis puestos hasta el 81. Venezuela es la economía peor situada del índice ubicándose en el puesto 130.
Chile, Panamá y México son las economías más competitivas de Latinoamérica. Panamá y República Dominicana son los países que más subieron en el Informe Global de Competitividad 2016-2017.
El reporte se destaca que en las economías emergentes de Latinoamérica, la tecnología, la sofisticación empresarial y la innovación han ganado importancia frente a la infraestructura, la educación primaria, y condiciones básicas de eficiencia de mercados, como principales impulsores de la competitividad.
Según el informe, se nota “un declive de diez años en la apertura de las economías supone un riesgo para la innovación y el crecimiento global”.
“El declive en la apertura de la economía global está afectando la competitividad y dificultando la tarea de lograr crecimiento inclusivo y sostenible”, afirma Klaus Schwab, fundador y presidente ejecutivo del Foro Económico Mundial, en el reporte.