El gremio de los petroleros y las empresas del sector mantienen una dura negociación por los recortes salariales dispuestos con el propósito de enfrentar la crisis de la actividad. El gremio conducido por el senador Guillermo Pereyra se mostró dispuesto a recortar las “horas taxis” que abultan sustancialmente los salarios de los petroleros pero a cambio piden algún tipo de compensación para amortiguar la baja de sus mensualidades. Todavía no hay precisiones acerca de que instrumento se utilizará a este respecto.
La Mesa Petrolera, nacida por iniciativa del propio Mauricio Macri quien se puso al frente de la organización, se encuentra discutiendo por estas horas cómo se implementará el achique en una actividad industrial que cayó un 40% en la Cuenca Neuquina. Las “horas taxi” -tiempo de traslado entre los hogares y los pozos- son lo primero que las compañías quieren sacar del esquema de pagos extra.
“Esto todavía tenemos que evaluarlo, el plazo es de 30 días y no queremos apurarnos. Lo que dejamos en claro es que no vamos a aceptar cambios que signifiquen podar los sueldos de los compañeros”, dijo Pereyra. “Buscaremos compensaciones”, agregó.
Los gremios también pretenden cambiar el sistema de distribución de horas de jornadas de trabajo para lograr que un mayor número de operarios tenga empleo y se frenen los despidos anunciados por las cámaras de servicios petroleros para los próximos meses del 2016.
Sindicalistas y empresarios coinciden en que una vez que sea ratificado el nuevo valor del precio del gas en boca de pozo -US$ 5 el millón de BTU contra los US$ 2,5- el sector podría recibir nuevas inversiones que traerán alivio a la región.
Las empresas de servicio han insistido a lo largo del año que con una baja del 40% de la actividad en la Cuenca Neuquina hay alrededor de 10 mil operarios que “sobran” en la industria. Entre Neuquén, Río Negro y La Pampa suman alrededor de 1.500 los trabajadores suspendidos y se calcula que durante el 2016 se bajaron 40 equipos en los yacimientos.
Mientras tanto en Plaza Huincul, Neuquén, alrededor de 54 trabajadores del Grupo Más Energía propietario de la refinería Petrolera Argentina y la planta procesadora de biodiesel Maikop se encuentran al borde una medida de fuerza porque no les fue abonado la totalidad de sus sueldos de agosto. El presidente de la empresa, Miguel Schvartzbaum, explicó que parte de sus problemas de efectivo se deben a que desde Nación no les han habilitado el cupo 5000 m³ mensuales de fueloil.
Por otro lado, después de siete días de paro la Secretaría del Trabajo de Río Negro dictó la conciliación obligatoria entre los trabajadores de la mina de Sierra Grande y la empresa china MCC. Los operarios reclaman un aumento salarial en sus básicos del 22% establecido por el acuerdo nacional, pero los ejecutivos de la minera oriental se niegan alegando que la empresa atraviesa una grave crisis por la marcada baja del precio del hierro. Entre el 2009 y el 2014 los valores de la tonelada de hierro superaron los US$ 100 pero hoy rondan los US$ 50. En 2015 Los chinos advirtieron en la última reunión que mantuvieron con el gremio de AOMA que si no se suspendía el paro corrían el riego de no poder colocar su producto en el mercado internacional y, a consecuencia, podrían cerrar la empresa.
Rio Negro
Los sindicatos de la Cuenca Neuquina aceptan eliminar las “horas taxi”, pero piden que se aplique una “compensación”.
La mesa petrolera que nació como una iniciativa del presidente Mauricio Macri para destrabar la crisis del sector, ayer tuvo un nuevo capítulo y confirmó que se trata de un espacio donde centralmente se discutirán nuevas condiciones laborales para la actividad.
El titular de Petroleros Privados, Guillermo Pereyra, anticipó que recibieron el borrador elaborado por las empresas, si bien aún no lo analizan en profundidad ya advirtió que no dejarán pasar “un hachazo al salario de los trabajadores”. En diálogo con “Río Negro” anticipó que buscarán “compensaciones” para las modificaciones que proponen imponer las petroleras.
El petrolero no anticipó los puntos de la propuesta patronal, pero reconoció que desde el sindicato están dispuestos a eliminar las denominadas “horas taxis” porque generan “un desequilibrio con los trabajadores, por ejemplo los boca de pozo, que no las cobran”. Pero contrapuso que exigirán una devolución bajo algún concepto, aún en estudio.
“Esto todavía tenemos que evaluarlo, el plazo es de 30 días y no queremos apurarnos. Lo que si dejamos en claro es que no vamos a aceptar cambios que significan hachar los sueldos de los compañeros”, expresó.
Del encuentro participó el ministro de Energía, Juan José Aranguren, representantes de las principales operadoras y el titular de Petroleros Jerárquicos, Manuel Arévalo.
Las empresas giraron la propuesta a Aranguren y fue el ministro quien la trasladó a los sindicatos de la Cuenca Neuquina. Pereyra reconoció que el planteo “no es malo” y que trabajarán sobre ese esquema.
Aclaró que dista de la versión publicada en medios especializados días atrás –“no tiene nada que ver”, dijo– donde se menciona la implementación de un esquema de ocho horas de trabajo, seis jornadas laborales por dos de descanso (no remuneradas) y una reducción de los planteles por equipos.
Oficialmente se dice que la mesa busca incorporar las especificidad de los desarrollos no convencionales al Convenio Colectivo de Trabajo (CCT). Sin embargo no está claro que las definiciones que se tomen se impriman en un nuevo convenio. Podrían quedar como un acuerdo temporal. Antes de la contrapropuesta los sindicatos pidieron precisiones sobre nuevas inversiones y el precio del gas que, estiman, será clave para reactivar el trabajo en los yacimientos.
Las operadoras llevaron una propuesta para modificar los diagramas y planteles en el campo. Los sindicatos anticipan un rechazo a cualquier quita en los haberes.