El viceministro cubano de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente, José Fidel Santana, rubricó el acuerdo junto con Sergey Kirienko, director de la gigante energético ruso Rosatom.
En declaraciones a Efe, Santana explicó que, tras dos años de negociaciones, el acuerdo facilitará a los países un marco para desarrollar "de inmediato" proyectos bilaterales, sobre todo relacionados con "al uso médico de la energía nuclear" y con "el sector agroalimentario".
El país caribeño tiene especial interés en obtener irradiadores industriales de cobalto para la esterilización de alimentos como frutas y hortalizas, así como fármacos radiactivos para el diagnóstico y tratamiento de cáncer.
Santana destacó que los proyectos bilaterales están todavía en "una fase inicial", lo que no permite evaluar todavía el volumen económico o material de este acuerdo.
Además, el acuerdo incluye la posible formación de especialistas nucleares cubanos, investigaciones fundamentales y aplicadas, y la gestión de residuos radiactivos.
Lo que no se contempla, es trasladar instalaciones nucleares rusas a la isla, ya sea de uso médico o energético.
Las relaciones bilaterales y comerciales entre Cuba y Rusia se ha intensificado en los últimos meses con la firma de este acuerdo nuclear o el que incluye la reparación y venta de locomotoras para el transporte de mercancías en la isla en el período 2017-2021.
Rosatom es la corporación estatal nuclear de Rusia, especializada en la construcción de centrales nucleares.