Las mineras chinas han dejado de ser inmunes a la crisis financiera internacional. Por lo menos, cuatro de ellas han entrado en default o quiebra en el último año, incluyendo a un conocido de la minería peruana: Nanjinzhao, consorcio que desarrollaba el proyecto de hierro Pampa de Pongo, en Caravelí (Arequipa).
La noticia de la quiebra de Nanjinzhao fue revelada por el viceministro de minas, Guillermo Shinno, en reciente conversación con la prensa, información que no trascendió en su momento. Lo cierto es, sin embargo, que este evento tiene consecuencias no menores para la minería y todo el país.
Según el Banco Central de Reserva del Perú, Pampa de Pongo es uno de los seis proyectos más esperados por el sector minería en 2016-2018, período que registrará muy pocas inversiones mineras importantes, según informó El Comercio.
En este contexto, el proyecto de la minera china se avizoraba como el más ambicioso. Efectivamente, Nanjinzhao planeaba invertir US$1.840 millones en la construcción de una mina y puerto en Pampa de Pongo. Su objetivo era comenzar a producir hierro a inicios del 2017, pero, inexplicablemente, cesó de mostrar actividad desde febrero del 2015 (fecha de la aprobación del EIA). ¿Qué sucedió?
Mateo Moreyra, socio de Macroconsult y antiguo asesor de Nanjinzhao, refiere que la compañía china sucumbió a la crisis internacional del sector siderúrgico y al desplome del precio del hierro.
“Nanjinzhao era un grupo privado que buscaba desarrollar Pampa de Pongo para integrarse verticalmente. Ellos tenían una fundición en China que iba a recibir el mineral de hierro del proyecto para producir acero. Lamentablemente, los mercados de ambos productos cambiaron radicalmente en los últimos años: el hierro perdió dos tercios de su valor y el acero entró a una etapa de sobreoferta”, explica.
Para empeorar las cosas, Zibo Hongda (fundición de Nanjinzhao) resultó siendo víctima de la burbuja de bonos corporativos chinos. Según la Cámara de Compensación de Shanghái, Zibo entró en default en marzo de este año al no poder pagar US$65 millones de deuda, resultantes de una emisión de bonos efectuada en el 2015.
Pero, ¿cómo afecta todo esto a Pampa de Pongo?
La consecuencia inmediata, según Guillermo Shinno, es que el proyecto ha pasado a manos de un acreedor de Nanjinzhao: una entidad financiera.
“Representantes de esta empresa visitaron el ministerio para manifestar su intención de desarrollar el proyecto. Sin embargo, lo más probable es que no construirán el puerto en Lomas [para ahorrar costos]. En vez de ello, se concentrarán en la mina y sacarán el mineral por el puerto de Marcona”, anota el funcionario.
Una fuente china consultada por Día1 confirmó la veracidad de esta versión y detalló que el responsable de Pampa de Pongo es ahora Zhongrong Xinda Group (Shandong Coking), consorcio financiero-logístico-industrial, que ha adquirido Nanjinzhao.
Zhongrong acaba de firmar un acuerdo de cooperación estratégica con el consorcio minero Shandong Zhengyuan, para desarrollar Pampa de Pongo. Según su página web, empero, el interés de ambos no se limitaría a los recursos de hierro del proyecto, sino también a los de oro, cobre y cobalto (de mayor valor económico), razón por la cual se encuentran revaluando el estudio de factibilidad, actividad que definirá si la inversión sigue adelante y bajo qué nuevas condiciones.
Expertos en minería consultados por Día1 coincidieron en señalar que el bajo precio del hierro hace muy difícil el desarrollo de proyectos de hierro. Pero Pampa de Pongo tendría un problema adicional: la geología, que dificulta la extracción de mineral.
“Pampa de Pongo tiene un gran reto y es que la mineralización se encuentra enterrada bajo una cobertura [capa] de 300 o 350 m. de tierra estéril. Se trata de dunas que son arrastradas por el viento y que complican el minado a tajo abierto”, apunta el geólogo Miguel Cardozo.
En su opinión, la alternativa más idónea sería la explotación subterránea, pero el bajo precio del hierro la torna económicamente inviable.
Nanjinzhao planeaba producir un promedio de 15 millones de toneladas anuales de hierro en Pampa de Pongo. El proyecto, uno de los más grandes de su tipo en Latinoamérica, iba a dar empleo a 3.300 personas durante la fase de construcción y a 1.250 personas durante su etapa de operación.