A una semana de asumir como presidente ejecutivo de AES Gener, Luis Felipe Cerón ya tiene claro cuál será uno de los focos principales de su gestión: la construcción del proyecto Alto Maipo.

Pero la cuestionada iniciativa hidroeléctrica, que desarrollan junto al grupo Luksic, no es lo único que lo ocupa. El ejecutivo también destaca la diversificación energética que dice tener la empresa, en medio de voces que plantean que la industria debe ir a fuentes de generación menos contaminantes que las térmicas.

¿Cuáles son las metas y desafíos que se impone al asumir el cargo de presidente ejecutivo?
Gener es una de las grandes sociedades anónimas en Chile. Desde hace muchos años el presidente del directorio residía fuera de Chile, y no tenía una presencia física. Yo me mantengo a tiempo completo trabajando en Gener, con una participación muy activa en el proyecto Alto Maipo, en las directrices estratégicas de la compañía, en la relación con inversionistas, socios y autoridades. Es un poco salir del día a día y enfocarse en temas más estratégicos para la compañía.

¿El enfoque estará en Alto Maipo?
Es uno de los enfoques. Tenemos aspectos muy importantes y el principal de todos es la construcción. Pero también, asociado con eso, están los aspectos comunicacionales, la relación con las autoridades y comunidades, y el financiamiento, es decir, la relación con los bancos.

¿Cuándo esperan tener finalizadas las obras del proyecto?
La primera unidad, el año 2018; y la segunda, el 2019.

Los opositores dicen que este es un proyecto pensado para suministrar energía a las mineras. ¿Qué le parecen esas críticas?
El proyecto inyecta energía al Sistema Interconectado Central (SIC), en particular, a la ciudad de Santiago. La energía de Alto Maipo se consumirá en Santiago. Los acuerdos comerciales son algo financiero que no tienen nada que ver con dónde se entrega la energía. Se entrega en Santiago y mejora sustancialmente la calidad de servicio. Tenemos casi 4.500 personas trabajando y más de 700 son del lugar. Aporta mucho a la actividad económica, especialmente en una comuna que no tiene mucha población. El avance es alrededor de 33% a la fecha.

¿Por qué, entonces, surge esta oposición?
Las voces opositoras a veces hablan más fuerte que las que están a favor. Hay una mayoría silenciosa que apoya Alto Maipo. Este es un proyecto que tiene muchas bondades: es una iniciativa hidroeléctrica de pasada, donde el 90% de las obras son subterráneas, la línea de transmisión es de 17 kilómetros, tiene una cuenca hidroeléctrica con bastante menor volatilidad que el sistema hidroeléctrico chileno como un todo, y tiene una correlación muy baja con el sistema, por lo cual aumenta la seguridad de suministro eléctrico. Estamos en el Cajón del Maipo desde hace casi 100 años, y tenemos una muy buena relación con la comunidad.

¿Tienen algún plan b en caso que la SMA o la justicia ordenen paralizar las obras de construcción?
Nosotros vemos que eso no tiene ninguna razón para ocurrir. Este ha sido uno de los proyectos más estudiados desde el punto de vista ambiental. Pasó por autoridades ambientales de tres gobiernos distintos, por la Dirección de Aguas y por las multilaterales que financian el proyecto (...) Ahora, recursos judiciales siempre pueden haber, y es razonable que la gente tenga acceso a la justicia, pero no vemos que tengan asidero.

Algunas empresas han anunciado que disminuirán su generación en base a carbón. ¿Cuál es la postura de Gener frente a eso?
Hemos crecido en los últimos años con generación térmica, una parte ha sido con generación a carbón, que es importante. Pero, como creemos en la diversificación, nuestro interés es diversificarnos a otras fuentes.

¿Mantendrán en el largo plazo los proyectos a carbón?
En este momento está en construcción la segunda unidad de la central Cochrane. Ese es el único proyecto térmico que tenemos en construcción.

¿Es importante el carbón para la matriz energética?
La generación térmica es muy importante, y la generación a carbón es parte de la generación térmica. Su ventaja es que es la generación más segura que hay. Cuando falla la hidrología, cuando falta la generación solar, cuando falla la eólica, está la generación térmica. En particular, el carbón es el combustible fósil más abundante que hay en el mundo.

¿Cómo ven a Argentina tras la llegada al poder de Macri?
Esperamos que en Argentina mejoren las condiciones. Siempre hemos sido operadores muy eficientes. Esperamos que mejore en oportunidades, no solamente con la capacidad de generación que tenemos allá, sino que también con el intercambio de energía.

¿Y el caso de Colombia?
Hoy (ayer) iniciamos la comercialización de Tunjita, una central hidroeléctrica de 20MW. Es un mercado muy interesante, y encontramos muy auspiciosos los acuerdos de paz a los que está llegando el país.