La salida del Reino Unido de la Unión Europea, el denominado Brexit, ha generado gran conmoción en las economías mundiales y la Región de Coquimbo no está exenta de estos efectos. Ya el día de ayer se pudo observar, por ejemplo, una baja en el precio del cobre, lo que implicaría un impacto en la principal actividad económica local, la minería, que ya ha visto mermados sus ingresos por exportaciones, llegando al 37,5% sólo en el mes de abril.
Pero existirían además repercusiones en otros aspectos, por lo cual El Día consultó a economistas y expertos de la región para ver en qué otras áreas podrían producirse similares consecuencias.
La directora regional de ProChile, Paola Vásquez, señala que al 2015 los productos de exportación de la zona que tienen envíos al Reino Unido son el sulfato de cobre, la uva de mesa y principalmente el vino en todas sus variedades, “que en este caso sería por lejos el principal producto exportador a ese mercado”.
No obstante, dice, existirá un periodo de dos años en los cuáles se deberán hacer los ajustes necesarios para ver qué cambios podrían producirse en las condiciones para los envíos locales. “Hay que esperar a ver si se va a dar ahora un acuerdo bilateral con Reino Unido y si se hará en similares condiciones a lo que ya existía”.
Cristian Morales, director de la Escuela de Ciencias Empresariales de la Universidad Católica del Norte, señala que en el caso de la región, lo que se puede ver afectado son las exportaciones “porque se pueden caer los precios internacionales de los productos y el tipo de cambio”. También repercutiría en la minería “pues el cobre se vende internacionalmente como un activo y su precio puede bajar dependiendo del comportamiento de las economías mundiales”.
Pero para el economista, el principal impacto que tendrán los habitantes de la zona estará dado por los fondos de pensiones. “Alguien que tiene su plata en la AFP, sobre todo en los fondos A, B y C, puede ver mermados sus ahorros. Para la gente que se va a pensionar y está en los fondos más riesgosos, podría haber un impacto fuerte y eso va a afectar a todo el resto de la economía”, puntualiza.
Por su parte, Carolina Riquelme, directora del centro de desarrollo de negocios de Sercotec, prevé que podrían verse afectados principalmente los productos alimenticios que llegan al mercado inglés, tanto por la incertidumbre del mercado como por el hecho de que ahora cambiarían las reglas de ingreso. “Reino Unido tenía varios acuerdos comerciales por ser parte de la Unión Europea. Al salir, tiene que ver qué pasa con esos acuerdos, si van a poder seguir aplicando franquicias, beneficios o desempeñar ciertas obligaciones. Por lo tanto, viene todo un periodo de ajuste. Creo que el impacto acá no va a ser muy importante por el volumen de productos que enviamos a esos mercados, pero hay que estar igualmente atentos para tomar las mejores decisiones”, plantea.
El economista y académico de la Universidad Católica del Norte, Sergio Zúñiga, señala que si bien con el anuncio de ayer se ha visto una caída en la mayoría de los commodities, como el precio del cobre y el petróleo “es una baja claramente temporal, no se trata de un cambio de tendencias o algo que nos haga pensar en que se nos viene una crisis importante”.
Respecto al temor que existe en el caso de los fondos de pensiones, también señala que la situación se estabilizará en un tiempo corto y que “en dos o tres días eso se va a recuperar en la medida de cómo se vayan decantando los acontecimientos, pero no hay ningún antecedente que haga pensar que esta es una crisis estructural o que se nos venga una sucesión de malas noticias encima”.
Lo que sí, indica, hay que ver cómo va a reaccionar el resto de Europa, si habrá otro país que va a empezar a pensar en salir de la zona euro, “ahí se abren una serie de interrogantes”.
De hecho, indica, en el mediano y largo plazo la decisión que tomó Reino Unido desde el punto de vista económico para nuestro país es positiva. “Al salir Reino Unido, es una importante señal a los países miembros de la UE para que ordenen sus economías, para que alineen sus gastos con sus ingresos. Surgen amenazas de que otros países salgan y eso obliga a hacer una reingeniería de la comunidad europea, que en realidad estuvo muy mal pensada en sus orígenes”.
En el caso del cobre, sostiene que también se espera que su baja sea temporal. “Estuve mirando los gráficos y la caída nos puede hacer regresar al promedio de hace una semana y la tendencia parece ser alcista, de tal manera que yo no hablaría de una crisis permanente, sino que una reacción natural a una noticia importante que genera incertidumbre”, dice.