Diego Chirinos afirmó en Semana Económica que Odebrecht inició su camino hacia adoptar un perfil más bajo. La empresa ha acordado la venta del 57% de la operación de la concesión vial Rutas de Lima —que tiene a su cargo la mejora y conservación de tramos de la Panamericana Sur, la Panamericana Norte y la autopista Ramiro Prialé— con el fondo canadiense Brookfield Asset Management. Odebrecht Latinvest se quedará con 25% de la operación y Sigma SAFI lo hará con el 18% restante.
Así lo pudo conocer en exclusiva SEMANAeconómica, a través de fuentes relacionadas a la transacción que, por haber firmado acuerdos de confidencialidad, prefirieron mantener su identidad en reserva. Al ser consultadas, fuentes de Odebrecht confirmaron la operación al cierre de este artículo y decidieron hacer público el acuerdo a través de una nota de prensa.
Como ya adelantó esta revista, Brookfield también es uno de losprincipales postores para hacerse del 55% de la operación delGasoducto Sur Peruano que Odebrecht ha puesto en venta.
Si bien el proceso de venta de Rutas de Lima se inició hace poco más de dos meses, cuando Odebrecht anunció que vendería US$3,400 millones en activos, hace tres semanas el grupo brasileño eligió a Brookfield para negociar de forma exclusiva. “La extensión de las negociaciones se debe no sólo a la cifra final, sino también al deseo de Odebrecht por quedarse con lo que resta por construir en el proyecto“, revela el directivo de unos de los bancos que estructura la venta. Entre las obras pendientes, la más representativa es la ampliación de 19 km de la autopista Ramiro Prialé.
Si bien el monto pactado aún se desconoce, éste superará lo ya invertido por Odebrecht en el proyecto —más de S/.2,020 millones según la empresa—, aseguran todas las fuentes consultadas. Ello debido al gran interés que éste generó tanto en empresas como en fondos de inversión, entre ellos Ferrovial y Macquarie Infrastructure Corporation. “El grupo de interesados en Rutas de Lima ha sido muy similar al de interesados en el Gasoducto Sur Peruano“, afirma una fuente relacionada al proceso de venta. La inversión total estimada del proyecto supera los US$2,000 millones.
Sin embargo, el que Rutas de Lima sea una concesión ya operativa permite avizorar que la toma de posesión por parte de Brookfield no será tan rápida. Esto debido a que primero la Municipalidad de Limadeberá aprobar el cambio de concesionario y ver si se realiza una modificación, por ejemplo, en el monto que se cobra por peajes.
Además, al haber emitido bonos por S/.1,459 millones hace dos años, los bonistas y bancos que financian el proyecto deberán expresar su consentimiento a la transacción. “Desde la firma del contrato hasta que Brookfield tome posesión de la concesionaria pasarán, en promedio, 90 días“, señala una de las fuentes consultadas.
Con esta compra y el firme interés en otros proyectos de Odebrecht,Brookfield alista su fuerte ingreso al sector de infraestructura peruano. Sector en el que ya había intentado hacerse de otros proyectos como, por ejemplo, Línea Amarilla —antes llamado Vía Parque Rímac— de la brasileña OAS.
SEMANAeconómica intentó contactarse en reiteradas ocasiones con ejecutivos de Brookfield en el Perú, pero éstos prefirieron no responder.
El Comité Central de Lucha por el Desarrollo de la Provincia de La Convención rechazó la posibilidad de que la empresa Techint participe en el proceso de construcción del Gasoducto Sur Peruano (GSP).
Se resaltó que dicha compañía tiene una deuda por daños ocasionados en el tendido de ductos que realizó hace algunos años en la provincia cusqueña.
En pronunciamiento público, las organizaciones sociales de La Convención recordaron que Techint “cometió una serie de abusos e impactos sociales” durante la fase de construcción de los ductos del Lote 88 a la costa.
La deuda por los daños causados asciende a US$ 20 millones, según la Comisión Evaluadora compuesta por miembros de la sociedad civil, Gobierno y la empresa.
Se remarca que la deuda “nunca fue cancelada a favor de los pueblos afectados”.
Ante la voluntad de Techint de retomar los trabajos del GSP, el Comité Central de Lucha por el Desarrollo de la Provincia de La Convención aseguró que “no pertimiremos semejante afrenta”.
Las organizaciones de la sociedad civil de La Convención expresaron que no se opondrían si fuera otra la empresa interesada en adquirir las acciones de Odebrecht en el GSP.
Finalmente, se hace un llamado al Gobierno Central a “no permitir que empresas como Techint pongan en riesgo la construcción del GSP”.