El metal precioso registró una nueva marca este lunes, escalando a los 1,300 dólares por onza por primera vez desde enero de 2015. El oro ha subido un 22% este año, aplastando a las acciones, los bonos y otros tipos de importantes activos.

La reciente fuerza del oro muestra que la carrera de 2016 ha estado impulsada por dos escenarios diferentes. El primero fue un viaje hacia terreno seguro mientras un torbellino irrumpió Wall Street y todo el mundo, enfatizado por el peor inicio del mercado estadounidense en la historia.

Los precios del oro se han relajado un poco en tanto las acciones de Estados Unidos lograron un masivo regreso y se volvieron positivas en el año. Pero el oro está de nuevo en la cima, aumentando el fideicomiso SPDR Gold Trust ETF cerca de 6% en abril. El índice S&P 500 virtualmente no ha cambiado desde entonces.

Entonces, ¿qué está impulsando esta alza? En esta ocasión es el dólar. Un dólar débil es una buena noticia para el oro porque hace que el metal sea menos costoso para los compradores extranjeros y refuerza el papel del oro en el largo plazo.

El dólar ha caído un 2% contra una canasta de monedas durante la semana pasada. Este declive ayudó a aumentar el oro a más de 4%. Tras años de fuerza, el dólar ha sido golpeado recientemente por la decisión de la Reserva Federal de Estados Unidos de contener su plan para aumentar las tasas de interés y un crecimiento económico de casi cero en Estados Unidos.

“Habíamos experimentando los extremos en cuanto a la fortaleza del dólar. Ya era tiempo de que el dólar bajara” dijo Axel Merk, fundador de Merk Investments.

El dólar fue golpeado por el yen japonés apenas la semana pasada luego de que el Banco de Japón sorprendiera a los inversionistas al negarse a lanzar nuevos estímulos.

El oro también ha sido ayudado un poco por una turbulencia renovada en el mercado de acciones. La semana pasada el Dow Jones sufrió su peor semana desde febrero y el Nasdaq está en vías de tener una racha de siete días con pérdidas.

Todd Salamone, vicepresidente senior de investigación en Schaeffer's Investment Research, dijo en un blog reciente que “ahora podría ser tiempo” de vender las ganancias en el mercado de acciones e incrementar la exposición en oro.

Sin importar la causa, el alza del oro ha sido un revulsivo para las acciones de las mineras del metal, como Newmont Mining. Acciones de Newmont se han disparado un 90% este año.

Pero, ¿acaso será muy tarde para invertir en oro, dado su reciente incremento?

Incluso los optimistas por el futuro del oro en Capital Economics conceden que están “un poco cautelosos de la fuerza” del alza del metal, y advirtieron que se podría presentar una caída. Apuntaron a la posibilidad de que la Reserva Federal de EU resumirá su plan de elevar las tasas y una fortaleza del dólar.

Sin embargo, Capital Economics aún piensa que el oro puede terminar el año con alrededor de 1,350 dólares por onza, antes de elevarse a 1,400 dólares la onza para finales de 2017.

Merk también tiene un panorama positivo respecto al oro, en parte porque cree que el mercado de acciones de EU está en vías de tener un mercado del oso (representa un mercado a la baja, cuando los precios están cayendo; una caída del 20% en valor indica este mercado).

“Si estoy en lo correcto y llegamos a tener una caída del S&P 500, al oro podría irle muy, muy bien”, dijo.

Los inversores más expertos saben que invertir en oro es una apuesta segura porque su valor nunca se devalúa. Además, a la hora de invertir existen muchas formas de hacerlo, por lo que cualquier tipo de inversor encuentra la fórmula que más le conviene.

Por ejemplo, las instituciones financieras, los gobiernos y los inversores con bastante dinero suelen preferir comprar oro físico, ya sean lingotes o monedas. Eso sí, tienen que asegurarse de que no lo pierden. Otro modo menos arriesgado, porque no es necesario guardarlo físicamente, es a través de los certificados de depósitos. Con ellos, el inversor adquiere la propiedad del oro por el que ha pagado.

Otros prefieren invertir en acciones de empresas mineras relacionadas con la extracción de oro y también hay quienes se decantan por tener fondos de inversión en este tipo de empresas. Otra fórmula más compleja son los llamados futuros de oro, donde tanto el comprador como el vendedor están pendientes de una fecha de vencimiento. También existen los fondos cotizados (ETF por sus siglas en inglés), que cotizan en bolsa al igual que una acción. Y para los más modernos existe el E-Gold, una forma relativamente nueva de poseer este metal, que se almacena en una cuenta y que puede utilizarse como medio de pago y para hacer transferencias. La principal ventaja del oro digital es que se puede cambiar por oro físico.

Si está pensando en invertir en oro siempre es recomendable que siga una serie de consejos. Es cierto que este metal es un refugio para todos aquellos inversionistas que no quieren arriesgar su capital cuando la economía presenta periodos de incertidumbre, pero es necesario conocer ciertas pautas para no perder dinero ni ser estafado. Y tenga en cuenta, además, que los metales preciosos deben ser acumulados por suvalor. Es decir, no son la mejor opción de inversión si lo que busca es especular con el precio. Es una inversión más beneficiosa a largo plazo.

En primer lugar, las transacciones las debe hacer con una institución financiera oficial o con empresas legalmente establecidas. Losexpertos no recomiendan fiarse de plataformas de supuesta inversión en las que el oro nunca se ve porque podrían ser una estafa.

Respecto a qué cantidad conviene invertir, factores como la edad, la capacidad de ahorro o el patrimonio total deberían determinar cuánto de su capital puede destinar a la inversión en metales. Normalmente, los especialistas recomiendan destinar a esta opción un 10 por ciento del capital total.

El siguiente paso tras comprar el oro, si decide hacerlo físicamente, esencontrar un lugar donde guardarlo, ya sea en casa o contactando con alguna empresa que se encargue de su almacenamiento por un precio accesible.

Y una vez realizada la inversión, se recomienda seguir los mismos pasos que el resto de inversores. Es decir, debe marcarse una meta, una estrategia para que no olvide el objetivo de su inversión. No invierta si no está seguro o no entiende en qué está gastando el dinero. Y estudie el mercado para no fracasar en el primer intento. Eso sí, sea consciente de que toda inversión conlleva un riesgo y que los bancos no son la única opción de inversión. Recuerde que para obtener mayores rendimientos se necesita más tiempo. Por eso, tómese la inversión con calma; las soluciones mágicas no existen y las decisiones apresuradas suelen ser erróneas.

El oro, especialmente el oro físico, es dinero real. Por eso, invertir en oro es invertir en un activo monetario sin riesgo. Es un seguro financiero contra la crisis que todos deberíamos considerar.