En el marco de Expomin 2016, el seminario “Uso de agua de mar en minería” abordó diferentes representantes de la minería mostraron los beneficios de la explotación de este recurso.
Camila Montes, analista de Estudios de Cochilco, destacó que entre los diversos desafíos del sector se encuentra el acceso y la gestión del recurso hídrico, y cómo esto condicionará la concreción de la carpeta de proyectos mineros.
La especialista caracterizó el recurso hídrico utilizado por el sector minero, detallando que un 39% proviene de aguas superficiales, un 40% corresponde a agua subterránea, un 5% proveniente de terceros, y un 16% del mar.
En 2014 la minería utilizaba 12,7 metros cúbicos por segundo de agua fresca, de la cual un 70% se relaciona con los concentrados. Como meta al 2026 se proyectó que la minería utilice metros cúbicos por segundo de agua fresca
Por el lado del agua de mar se espera que se utilice 10,7 metros cúbicos por segundos dependiendo de la cantidad de proyectos mineros que logren concretarse así pasará a representar un 50% del recurso hídrico utilizado por la industria.
Denis Concha, subgerente de Operaciones de Aguas Cap, expuso sobre la planta desaladora que desarrolló la compañía para su operación Cerro Negro Norte.
El ejecutivo destacó que la planta que puede llegar a producir 600 litros por segundo ,aunque como compañía solo necesitaban 200 litros. En ese contexto, explicó que la decisión fue debido a los beneficios de la economía de escala y la factibilidad de comercializar el recurso no utilizado.
Finalizó resaltando los beneficios del agua desalada en otras áreas, para consumo industrial, potabilización y agricultura.
El gerente de Medio Ambiente y Permisos de BHP Minerals Americas, Rodolfo Camacho, comenzó repasando los proyectos y plantas desaladoras de BHP, destacando que en Minera Escondida hay una desalinizadora que se inauguró en 2006, de 500 lt/s y con 40 MW de energía.
“Chile no tienen problemas de abastecimiento de agua, sino de energía”, señaló.
Durante su exposición enfatizó acerca de los proyectos que BHP está realizando en sus minas. Escondida está proyectando el desarrollo de una nueva planta de dessalación que comenzará a operar en julio de 2017 e implicará una inversión de US$ 3.433 M
Al mismo tiempo se proyecta para Spence una planta con agua del altiplano con derechos de agua de 800 lt/s, 50 MW de energía y una inversión de US$ 800 M
“Hace unos siete años no considerábamos, me incluyo, poner plantas desaladoras, era una pésima opción. Nadie vio el sunami de desaladoras que venía detrás. En un poco rato en este seminario hemos escuchado de siete plantas desaladoras, que en realidad son de bombeo de agua de mar”, reflexionó Camacho.
Resalto que estas plantas no afectan acuiferos, en respuestas a las cuestionamientos de otros países sobre la construcción o no de desaladoras, lo que si presentan es una influencia sobre el cambio climático
Finalizó diciendo que “un tercio de la energía del país la consume el sector minero. Esto se maneja por el lado de la energía, no del agua; de la conexión norte sur, de hidroeléctricas, de energias limpias, entre otros”.
Dentro del mismo escenario Cristhian Pollard, superintendente de Muelle y Sistema de Impulsión de Agua de Mar (Siam), de Minera Centinela, se refirió a los desafíos que conlleva el uso de agua de mar y su impulsión hasta la operación.