Argentina tiene el precio del crudo divorciado de las referencias internacionales. Se paga a 67 dólares el barril, el del tipo medanito, utilizado por las refinerías para procesar combustibles, por una política que comenzó en la gestión anterior pero continuó el Ministerio de Energía y Minería que dirige Juan José Aranguren en contra de su voluntad para sostener el nivel de actividad y empleo.

A pesar de esta decisión del Gobierno que busca mantener la producción, YPF anunció un fuerte ajuste de al menos 2.000 trabajadores en su planta de personal, lo que significa un recorte de entre el 10 y el 15 por ciento de sus empleados directos en los próximos meses.

En este marco, Cristian Folgar, ex Subsecretario de Combustibles durante la gestión de Néstor Kirchner,  señala que “paradójicamente YPF está haciendo exactamente lo contrario de lo que pidió el presidente a los privados; les planteó que cuiden el empleo y se está hablando de despidos adicionales a los que ya hubo el año pasado”.

Lo más preocupante, indica el especialista, es que las decisiones que toma la petrolera con el 51 por ciento de las acciones en poder del Estado Nacional “genera un efecto contagio”.

De hecho, las empresas proveedores de servicios vienen advirtiendo con la posibilidad de que se despidan 5.000 personas, por las malas expectativas que hay para el rubro principalmente en Santa Cruz y Chubut.  La Cámara de Empresas de Operaciones Petroleras Especiales (CEOPE) solicitó al Ministerio de Trabajo que inicie una segunda etapa del Procedimiento Preventivo de Crisis (PPC) iniciado en enero.

Para Folgar no se justifica tal medida por parte de la empresa, sobre todo luego de las actualizaciones del gas en boca de pozo y con el petróleo a 67 dólares. Si bien las zonas más afectadas son aquellas abocadas a la exportación, que se guían por los valores internacionales, la escalada se está dando en toda la industria y no parece encontrar un techo. Se siguen dando de baja equipos de perforación.

¿Qué pasará el 29 de abril? Es la fecha en que se desarrollará la asamblea de accionistas que estudiará el reemplazo de Miguel Galuccio, actual de CEO de YPF. Recién una vez que asuma el nuevo CEO, se conocerá el rumbo que tomará la empresa. Aranguren ya lo dijo: quiere precios de mercado en línea con Nueva York y Londres. Hasta ahora, lo frenaron los gobernadores patagónicos, que piden a gritos políticas para sostener un sector motor de la economía regional.