El petróleo cerró este miércoles con fuerte alza luego de que Estados Unidos anunció por segunda semana consecutiva una nueva caída de su producción.
El barril de "light sweet crude" (WTI) para mayo subió un 3,8% (1,55 dólares) a u$s 42,63; su valor más alto desde noviembre.
En el mercado de Londres, el barril de Brent para junio aumentó 1,77 dólares a 45,80 y también quedó en su mejor cotización desde noviembre, señaló Ambito.
El mercado abrió en baja al anunciarse el fin de una huelga petrolera en Kuwait pero luego se orientó al alza cuando Estados Unidos volvió a dar cuenta de una baja de su producción.
"El mercado parece mirar al futuro y cree que se reequilibrará en base a la merma de la producción estadounidense y a la idea de que la demanda mundial aumentará, al mitigarse al temor por el lento crecimiento de China y Europa", dijo Gene McGillian, de la consultora Tradition Energy.
Los datos estadounidenses mostraron que si bien otros productores de crudo no frenan su producción, sí lo hacen los de Estados Unidos.
El departamento de Energía prevé que este año la producción estadounidense caerá sostenidamente a un promedio de 8,6 millones de barriles diarios y a 8 millones el año que viene.
A pesar de la menor producción, las reservas de crudo subieron 2,12 millones de barriles a 538,6 millones y se mantienen a niveles a niveles casi récord.
"Globalmente no es un informe muy bueno pero es suficiente para desalentar a los inversores que apuestan a la baja de precios",comentó Fawad Razaqzada, analista de City Index.
McGillian se declaró "al perplejo por la fuerza del alza" de los precios y la atribuye a un efecto de arrastre.
Concentrado desde hace meses en la búsqueda del reequilibrio entre oferta y demanda, "el mercado ignora que el panorama actual sigue mostrando masivos excedentes".