Mientras la "comisión de expertos" convocada por ajetreado juez porteño Sebastián Casanello se apresta a subir este viernes a Veladero de la mano de Delitos Ambientales de la Policía Federal, un dato que eriza la piel a los mineros de San Juan, el comentario de ayer en la capital cuyana era la presencia de 30 chinos en el distrito minero Frontera de Barrick.
"Son los empresarios de Zijin que vienen a comprar Pascua Lama", era una de las versiones "vienen a ver Veladero", otra, "pondrán dinero, pero la operación seguirá en manos de los canadienses", otra más.
Nada de confidencial tiene esta visita, entre otras cosas porque una treintena de amarillos, si es que son tantos o tan pocos no se sabe, son difíciles de ocultar en tierra sanjuanina.
La primera vez que se habló de Zijin en la prensa argentina fue cuando llegó John Thornton al trono de Barrick, en pleno declive biológico de Peter Munk, con su bagaje de relaciones asiáticas. La última fue hace pocos días, cuando las mineras auríferas del dragón reconocieron que irán a comprar activos en Sudamérica.
En el medio estuvo el anuncio grandilocuente de Jorge Mayoral, quien volvió de uno de sus numerosos viajes a Beijing prometiendo que Zijin "se hará cargo de Pascua Lama", una versión que abonó a su vez otro hoy ex funcionario, el ministro sanjuanino Felipe Saavedra. Como los puentes con aquella autoridad minera nacional estaban rotos, la CMSJ, GEMERA y CASEMI San Juan poco menos que se rieron de la promesa.
En el camino, Zijin y Barrick Gold sellaron, el año pasado, una alianza que le significó entrar a la china en minas de la canadiense y a ésta última achicar su voluminosa deuda.
Mientras todo esto ocurre, y vuelve la tentación de titular "se vienen los chinos", la prensa chilena insinúa hoy que el proyecto binacional de cobre, oro y plata Pascua Lama, que se encuentra suspendido temporalmente, sería el objetivo de la canadiense Barrick Gold, propietaria de la iniciativa. La empresa ya ha invertido unos US$ 5 mil millones, de un total de US$ 8.500 millones.
"Fuentes ligadas a la empresa comentan que durante este año esperan tener listo el plan que busca hacer eficiente el proyecto por medio de un nuevo diseño, y admiten que entre las múltiples posibilidades se estaría evaluando desarrollar la iniciativa solo en Chile, de manera que ésta no sea de carácter binacional, como lo es ahora. Esto último facilitaría algunos procesos", dice hoy Economía y Negocios con fuente en El Mercurio.
El diario El Mercurio cita a "conocedores" aseguran, incluso, que la minera no estaría conforme con su operación en Chile, y, por lo tanto, no descartan que la firma se salga del proyecto en el mediano o largo plazo.
"Entre otras cosas, los controladores estarían convencidos de que será sumamente difícil desarrollar la iniciativa con ellos como dueños. Además de Pascua Lama, Barrick tiene detenido el proyecto Cerro Casale -que también está en optimización-, y vendió el año pasado el 50% de Minera Zaldívar a Antofagasta Minerals. A su vez, realiza trabajos de exploración con una inversión cercana a US$ 70 millones en la cordillera a la altura del Elqui".
Pascua Lama está paralizado desde 2013, cuando se encontraba en plena construcción, y desde entonces la firma ha gastado cerca de US$ 200 millones anuales en mantener las instalaciones construidas y cumplir con las exigencias de la Resolución de Calificación Ambiental (RCA). Con el fin de reducir costos, Barrick presentó en septiembre de 2015 un plan de suspensión temporal que dura dos años, y es prorrogable por otros tres. Con este plan, la minera hoy gasta alrededor de US$ 90 millones anuales en la iniciativa. No obstante, cercanos a la minera comentan que es probable que se demoren en la reformulación total del proyecto, los permisos correspondientes y las obras, por lo que hay bajas probabilidades de que la iniciativa sea presentada a las autoridades en el corto plazo.
Fuentes ligadas a Barrick señalan que hoy trabajan unas 120 personas en la iniciativa, versus las 350 que mantenían antes del plan de suspensión.