Varias comunidades de la provincia apurimeña de Cotabambas reiniciaron con relativa contundencia el paro indefinido en contra de la minera MMG, dueña de Las Bambas, y del Ejecutivo nacional por incumplir sus compromisos para resolver las demandas de esa población.
Jacinto Lima, presidente de la comunidad de Tambulla, refirió que la población se ha movilizado por Chalhuahuacho y otras zonas y han bloqueado las vías de acceso a Cotabambas. “No hay acceso y así seguirá hasta que no resuelvan nuestras demandas”, anotó.
Según dijo, está pendiente la ejecución de obras de saneamiento, resarcimiento a las “víctimas de la represión policial” en la protesta de octubre del año pasado, así como la revisión del Estudio de Impacto Ambiental (EIA) que fue modificado por la empresa "sin consultar a las comunidades campesinas".
Lima refirió que los dirigentes comunales, distritales y provinciales de Cotabambas están cansados de esperar la buena voluntad del gobierno y la minera para cumplir sus promesas.
El dirigente dijo que la única forma de que la medida de protesta sea suspendida es que tanto MMG como el Ejecutivo empiecen a ejecutar los compromisos contenidos en las actas de la mesa de diálogo, iniciada en octubre de 2015.
"Nosotros ya no queremos visitas de comisiones de alto nivel ni mesas de diálogo, sino acciones concretas para resolver nuestras demandas", señaló, enfático, el dirigente campesino.
Esta protesta es el reinicio de las violentas jornadas de octubre del año pasado, cuando murieron tres campesinos.