DANIEL BOSQUE
Sin la presencia agobiante de Tupac Amaru y Milagro Sala, y con el telón de fondo de los Panama Papers y las detenciones de Lázaro Báez y Ricardo Jaime, temas que atrapan todos los comentarios, la minería argentina celebra hoy a su modo el Día Mundial de la Actividad Física , poniéndole el cuerpo a una serie de eventos en Jujuy.
Coincidiendo con el seminario de litio que realiza una revista amiga en la ciudad norteña, que es también Capital Nacional de la Minería por el decanato de Mina Aguilar, la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM) y las diversas cámaras de proveedores del país, en sus diversas CASEMI y el Grupo de Empresas Mineras Exploradoras de la República Argentina (GEMERA) se entregarán a dos días de deliberaciones.
El primer módulo arranca hoy con el encuentro de los proveedores mineros, que aspira a ser la continuidad de la reunión auspiciada por CAEM en el Hotel Amerian de Buenos Aires el pasado febrero.
La convocatoria tiene por fin coordinar políticas y regionalizar estructuras de los contratistas de la actividad, que hoy persiguen la conformación de estructuras zonales a partir de sus cámaras por provincias: Norte, San Juan, Patagonia y Buenos Aires, una fórmula alentada por el salteño Diego Pestaña, el sanjuanino Alejandro Donna, el mendocino Carlos Ferrer y otros dirigentes de la Organización Federal de Cámaras de Servicios Mineros (OFECASEMI). La cuestión es qué hacer y dónde poner a la CASEMI de Buenos Aires, autodenominada CASEMI Argentina, que tuvo un rol protagónico durante el reinado de Jorge Mayoral.
Su líder, Rafael Dahl, fue quien más habló durante el encuentro mencionado, pero días después en la PDAC de Toronto sus contendores de las provincias le recordaron face to face con crudeza la discrecionalidad de su gestión en la hoy desarmada Mesa de Homologaciones Mineras que manejaba en solitario la CASEMI metropolitana con una notoria patente de corso para partir y repartir como condición para que avanzaran favores y no castigos en la Secretaría de Minería de la Nación. Sobre esta cuestión y otras reñidas con la ética y las buenas prácticas públicas comerciales, un descrédito para una actividad que declama transparencia.
El dilema de la renovación que propugna CAEM con respecto el capítulo proveedores es qué hacer con el pasado. O mejor dicho si el pasado ya fue o es también presente y futuro
El rojo punzó es la divisa de los salteños gauchos de Güemes, pero por encima de las rivalidades del NOA, la idea de los empresarios mineros es que desde Jujuy salga la conformación del Consejo Minero Industrial Federal (COMIF).
Este órgano, según los textos circulados para su discusión previa, tendrá como "objeto principal integrar las Cámaras Mineras del Interior para que tengan participación activa en la toma de decisión de CAEM".
Aunque hasta ahora no se expresó claramente, la intención de Marcelo Álvarez y su dirigencia es ir hacia una representatividad de una suerte de Federación de Cámaras, en la cual el peso de Buenos Aires este compensado por más protagonismo y participación de la dirigencia empresarial del interior. Después de circular los borradores, Las opiniones se dividen entre quienes dicen que esta es una oportunidad única para integrar al país minero y los que han puesto reparos en un sistema que terminará equivaliendo a “una cámara igual un voto”, aquello que siempre denostaron los críticos federales. El debate jujeño, si se libera y se le asigna el tiempo necesario, promete ser jugoso.
Todo este estado deliberativo se da en el marco de las complicaciones que inquietan a la industria minera en Argentina. Un gremio económico que obtuvo del gobierno nacional buena parte de sus reivindicaciones fiscales, tributarias y regulatorias el los mentados 100 días del macrismo. Pero que enfrenta problemas palpables de legitimidad política y social, lo cual en alguna medida tiene que ver con los propios yerros.
El escenario más crudo es hoy el de San Juan donde, al igual que pretendían las ONG antiminería de Catamarca y Tucumán, con el fiscal militante de la causa Juan Gómez como ariete , con respecto a Alumbrera, el juez Sebastián Casanello ha indignado a la minería con su comisión de expertos, algunos poco científicos y muy contrarios a todo lo que huela a minería. Además de otros visitantes con chapa de auditores, como el conocido dirigente activista global Robert Moran, quién hoy inspeccionará la mina de Barrick por orden del magistrado.
Como sucedió en Tinogasta, que intentó cerrar Alumbrera, en los días previos al Pacto Federal Minero que dio origen a la creación de OFEMI, el activismo político y social antiminería está organizado y envalentonado y ha declarado que aspira al cierre de la mina de Barrick.
Después del encuentro jujeño, las noticias mineras de los próximos días serán las movidad las movidas mineras en la provincia cuyana, bajo la consigna #VeladeroNoSeToca.
Desde el prisma de la comunicación, las relaciones con la comunidad y la política, lo ocurrido en San Juan es todo un leading case: en la tierra de Sarmiento el desarrollo minero gozaba de un alto consenso a partir de la revolución económica que generó el advenimiento de las grandes faenas. Los analistas dan vueltas y vueltas alrededor de la chapuza de La Ciénaga y el pobre manejo de la crisis del cianuro, que inflaron al estrellato a Jáchal no se toca.
“Basta de victimizarnos Como dice el Código Civil, nadie puede invocar en su favor la propia torpeza”, dijo a este diario un empresario que estará hoy en Jujuy. Con un hemisferio cerebral en el intenso debate y otro en el whatsapp y los mails, como todo el mundo en los tiempos que corren.
