Además, los legisladores del Frente para la Victoria, en conjunto con sus colegas del peronismo federal, buscarán también dar dictamen a una iniciativa que busca modificar la Ley de Administración Financiera, de manera que en el futuro toda salida al mercado prevista por el Estado nacional cuente con el aval previo del Congreso.
Martín Redrado, otro de los ex presidentes del Central durante los gobiernos de Cristina Fernández de Kirchner y de Néstor Kirchner, rechazó que arreglar fondos buitre “termine con los problemas de financiamiento”.
En ese aspecto, aunque recomendó “tomar deuda a menos años para pagar menos intereses”, reconoció que “los costos de no cerrar con los holdouts son más altos que hacerlo”.
A su turno, la ex ministra de Economía de la provincia de Buenos Aires Silvina Batakis, afirmó que “es necesario que la Argentina cierre este capítulo” y que “se abre un camino para que el país pueda usar el dinero que le presten para el desarrollo”.
“Esto debería permitirle a la Argentina ingresar al mercado de capitales”, opinó Batakis.
Mario Blejer, ex director del Banco Central y ex funcionario del Fondo Monetario Internacional, aseguró que “en la práctica no se está incrementando la deuda” y que, por el contrario, “disminuye el endeudamiento”.
“Se trata de tomar una deuda más barata que la que estamos cancelando. Es óptimo financiar la inversión con crédito y endeudamiento”, dijo Blejer.
Otra ex presidenta del Banco Nación y del Banco Central, Mercedes Marcó del Pont recomendó a los senadores que se tomen más tiempo para decidir sobre el proyecto que ya tiene sanción de la Cámara de Diputados.
“No hay razones para el apuro. Hay que darle una vuelta de página a una deuda que se inició en 2001, pero con una salida sustentable”, enfatizó.
La reunión de comisión -la última de una serie consecutiva que comenzó el miércoles pasado con la presencia del ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay- se llevará a cabo este martes desde las 10, en el Salón Azul del Palacio Legislativo.
La intención del Senado es debatir el proyecto que también deroga las leyes Cerrojo y de Pago Soberano y autoriza la emisión de deuda por 12.500 millones de dólares para cerrar el litigio con los fondos buitre, en el recinto de sesiones el miércoles 30 de marzo.
En ese marco, la oposición también buscará tratar la iniciativa presentada hoy por el peronismo para eliminar las facultades delegadas que le permitían al Ejecutivo tomar deuda sin consultar de manera previa al Congreso.
La jornada de este lunes fue la última convocada para debatir el tema y participaron de ella especialistas en materia económica, entre los que se destacaron ex presidentes del Banco Central y del Banco Nación.
“No creo que haya mucha gente en la Argentina que esté entusiasmada con este acuerdo. Tampoco lo estuvo cuando resolvimos la deuda con el Club de París o con Repsol. Pero tengo claro que es necesario resolver el frente externo”, dijo Juan Carlos Fábrega, uno de los ex presidentes del Nación y del Banco Central que asistieron a la jornada.
Fábrega, ex funcionario de la administración kirchnerista, agregó que “no acordar, claramente, es más costoso y con posibilidad de menos quita en una negociación a futuro, y con más punitorios”.
El economista Miguel Kiguel dijo que el acuerdo cerrado por el gobierno con los holdouts está "lejos de lo que uno quisiera”, para luego advertir que “esperar no tiene ventajas y, al contrario, tiene riesgos importantes”, por lo que se pronunció a favor de su sanción por parte del cuerpo.
Durante la jornada de hoy también estuvo presente quien fue procurador del Tesoro hasta 2010 Osvaldo Guglielmino, quien advirtió que “no se puede impedir que haya más demandas en el futuro” y cuestionó que “pactar del modo en que se está haciendo, es ceder a una extorsión”.
El ex ministro de Economía durante la administración de la Alianza José Luis Machinea, advirtió sobre las consecuencias que tendrá no llegar a un acuerdo al señalar que habrá "mayor litigiosidad" porque Argentina estará "en una situación de default generalizado".
Sostuvo también que si no se alcanza el entendimiento que promueve el gobierno habrá "cada vez más acreedores a los cuales no vamos a poder pagarles y por lo tanto habrá cada vez más juicios" y añadió que se producirá "un aumento de las tasas de interés, huida de capitales y caída de las reservas".
El Senado avanzó este lunes en el tratamiento de la ley que habilita el pago a los fondos buitre, con una ronda de entrevistas a economistas y juristas en las comisiones de Presupuesto y Economía, tras lo cual tiene previsto este martes emitir dictamen sobre el proyecto.
Una vez que ambas comisiones emitan dictamen este martes, la iniciativa, que deroga las leyes Cerrojo y de Pago Soberano y ya tiene media sanción de la Cámara baja, será debatida en sesión el miércoles de la semana que viene.
En un plenario de comisiones realizado en el Salón Azul de la Cámara alta, que duró nueve horas, los senadores recibieron la visita de distintos expertos, que opinaron sobre el proyecto que incluye los acuerdos con los holdouts y autoriza al Ejecutivo a un endeudamiento por 12.500 millones de dólares.
El primero de la larga lista de invitados en hablar fue el primer ministro de Economía del gobierno de la Alianza, José Luis Machinea, quien al sostener una postura favorable a la iniciativa gubernamental, advirtió que "no tener acceso al crédito internacional a largo plazo es un problema para el desarrollo".
En cambio, Pablo López, secretario de Finanzas durante parte de la última presidencia de Cristina Kirchner, afirmó que "los beneficios de arribar a este acuerdo son etéreos" y que el proyecto de ley "no da garantías de que esto resulte una solución definitiva a este conflicto".
La ronda de entrevistas a economistas y expertos se realizó luego de que la semana pasada los senadores recibieran a los gobernadores, de quienes también escucharon sus opiniones sobre la iniciativa gubernamental, así como a dirigentes sindicales y directivos de cámaras empresarias.
Una de las expositoras invitadas, la expresidenta del Banco Central Mercedes Marcó del Pont, subrayó que "ha habido por parte de este nuevo gobierno la decisión estratégica de plantear un esquema de crecimiento altamente sustentado en el endeudamiento externo, no en infraestructura, sino para financiar el desequilibrio fiscal".
"No hay antecedentes en el mundo de países que hayan crecido a partir del endeudamiento externo. El endeudamiento siempre ha sido instrumento de desindustrialización y pauperización", sostuvo.
En cambio, el economista Mario Blejer, también expresidente del Central, señaló que "hay compatriotas que creen que no hay forma de utilizar el crédito externo para financiar proyectos de infraestructura, lo que significa que nos considerarnos a nosotros mismos como alguien que no sabe controlar sus finanzas".
"Es como decir no hagamos una ruta para que no haya accidentes . Debemos olvidarnos de ese tipo de argumentos", aseveró tajante.
También cuestionó a quienes reivindican los canjes de 2005 y 2010, así como el pago al FMI y los acuerdos con Repsol-YPF, el Ciadi y el Club de París, al señalar que "si usted tiene construido un 75 por ciento del puente eso no es nada", porque "lo que se necesita es construir el otro 25 por ciento".
"Esta transacción no incrementa la deuda y en la práctica disminuye el endeudamiento", sostuvo también Blejer y agregó que "muchos dicen que se está tomando nueva deuda y se la está incrementando, pero eso es porque consideran que la deuda con los buitres no existe, lo cual es un error".
A su turno, la exministra de Economía bonaerense Silvina Batakis señaló que "es necesario es que la Argentina cierre el capítulo", porque "cada vez va siendo más difícil acordar con los que quedaron afuera de los canjes", y resaltó que "con estos acuerdo se resolvería el 91% de los casos que están afuera", es decir el 7% de acreedores no reestructurados en 2005 y 2010.
"Esta es deuda para pagar deuda, pero abre un capítulo para que la Argentina consiga financiamiento en el exterior, y hay que ver en el futuro si la Argentina lo usará bien, para construir la Argentina con desarrollo sostenible", planteó Batakis.
La exfuncionaria de Daniel Scioli resaltó que se debe "poner especial énfasis sobre a qué tasas" el país obtendrá financiamiento a partir de este acuerdo.
Sobre este punto, Martín Redrado, expresidente del Banco Central e integrante del equipo de asesores económicos del Frente Renovador, sostuvo que "países como Chile y Colombia han tomado créditos en el primer trimestre de este año al 2, 3 y 4 por ciento anual, y Brasil, con todos sus problemas, al 6,25, en títulos a 10 años", pero señaló que "resolviendo el problema de los fondos buitres, probablemente la Argentina se ubique al nivel de países como Jamaica o Egipto, que tienen intereses de 7,5%".
"Esto no es satisfactorio. La Argentina debería ir a tasas más cercanas a los de la región", planteó y señaló que el interés está determinado por la emisión de "12.500 millones de dólares" autorizada en el proyecto, monto que a su criterio "no alcanza para este año".
"Si salimos a tomar tanta plata es muy difícil que los costos de financiamiento bajen", aseveró Redrado y sostuvo que este "es un acuerdo complejo, con costos implícitos que señalan algún tipo de preocupación".
"No obstante yo creo que no cerrar significa que los costos serían más altos que los beneficios. Pero hacia adelante hay que preguntarse el por qué y el para qué de este financiamiento", planteó el economista y advirtió que "no es automático que elo hecho de resolver el tema de los fondos buitres permita bajar el costo del financiamiento".
Entre los expositores también estuvieron los expresidentes del Central Juan Carlos Fábrega y Javier González Fraga; el abogado constitucionalista y exconvencional constituyente Alberto García Lema y el exprocurador general del Tesoro durante la presidencia de Néstor Kirchner, Osvaldo Guglielmino.
También, el abogado e historiador Roberto Cortes Conde; el economista Daniel Heymann, y el abogado Beinusz Smukler, entre otros.