Continuas e intensas, así son las negociaciones entre el Gobierno y Electroingeniería para reactivar la obra de las represas sobre el río Santa Cruz parada desde diciembre. Con una importante readecuación, se analiza la oferta oficial que reducirá la energía que generará el complejo hidroeléctrico. En Santa Cruz aseguran que no se les informó de ninguna modificación.
“No es un tema sencillo de resolver”, reiteran en la Casa Rosada, donde continúan analizando y revisando la millonaria obra. Es un trabajo conjunto entre el ministerio del Interior, el de Energía y el de Medio Ambiente y desde la administración de Mauricio Macri aseguraron aClarín que “todo está bajo revisión”.
En diciembre, Macri recibió a Cristine Mc Divitt, viuda del filántropo ecologista Douglas Tompkins, quien le advirtió sobre los daños ecológicos que podrían causar las represas “Néstor Kirchner” y “Jorge Cepernic”, que podrían afectar incluso al Glaciar Perito Moreno. Como contó Clarín, Macri le prometió intentar parar su construcción.
Pero finalmente el Gobierno encontró un camino intermedio: ajustar la obra para su realización.
Esto implica, en principio, que la potencia proyectada para que generen las represas se reduzca. De los 1.760 MW, generaría 1.350 MW, según informó La Nación. Para que esto ocurra la represa Kirchner tendrá una turbina menos que en el proyecto original, y la Cepernic, dos menos, quedando en el nuevo plan, con tres turbinas.
En esta readecuación del proyecto original, se analiza construir una línea de alta para permitir la generación constante de energía. La información está siendo evaluada por el consorcio adjudicatario.
De realizar este cambio, deberá mantenerse el monto total de la obra, que supera los $ 43.000 millones. “Reducís un ítem de las obras, las turbinas, y hacés crecer otro, porque la obra contempla un tendido eléctrico, pero no se puede aumentar el valor de la obra”, explicaron fuentes oficiales.
En Santa Cruz, sin embargo, fuentes del gobierno señalaron que no se les acercó ninguna propuesta de modificación de la obra. “Es muy complejo, primero porque tenés un fideicomiso constituido con fines específicos del dinero, segundo que cualquier cambio tiene que ser aprobado por China (que aporta los fondos)”, indicaron en el entorno de Alicia Kirchner.
En la provincia consideran que de reducir la energía que cada represa puede generar “se desaprovecha el recurso hídrico, incluso de tener un complejo que podés llevar a su pico máximo de potencia cuando hay más consumo durante el día, cambiás su filosofía y la convertís en una obra que trabaja en un régimen igual todo el día”.
Las negociaciones siguen con el consorcio y Santa Cruz espera ser convocada. “Somos dueños del recurso natural”, resaltó un alto funcionario provincial. A la fecha, la obra que está pautada para los próximos tres años en $ 43.413 millones, según el presupuesto oficial que dejó el kirchnerismo, solo avanzó en la apertura de caminos, la creación de los obradores principales y la construcción de las instalaciones para los trabajadores.
Estas obras iniciales entraron en un compás de espera en diciembre. "De la obra principal no se pudo iniciar nada aún", reconocieron desde la UOCRA a Clarín. La UTE debía contratar en esta etapa 1.800 trabajadores, pero solo mantienen los 949 operarios que se encuentran trabajando en las villas. La gran obra energética del kirchnerismo, continúa rodeada de incertidumbre.
Las represas sobre el río Santa Cruz, siguen un derrotero incierto. Hay problemas en la UTE y en todos los casos, el centro de la disputa es Electroingeniería, quien está pésimamente calificada por los mismos chinos del grupo asociado de empresas. La empresa a la cual se la vincula con el kirchnerismo, ha comunicado su imposibilidad de pagar los adeudado y esto crea una gran incertidumbre en los trabajadores y en las empresas de servicios.
Fuentes consultadas del grupo de empresas de servicio que están vinculadas a la UTE encargada de construir las represas sobre el río Santa Cruz, confirmaron que Electroingeniería ha comunicado al personal que no puede pagar lo adeudado y que los sueldos del corriente mes no serán abonados, por falta de fondos. Además, hay una decisión tomada desde la UTE de cerrar el comedor para los trabajadores, lo cual complica aún más la situación del personal.
A las empresas de servicio subcontratadas les han manifestado que “ni siquiera vayan a cobrar” y en este momento a través de la Federación Económica de Santa Cruz están analizando los pasos a seguir para lograr el pago de los servicios adeudados a los empresarios asociados, que están relacionados a la obra con traslado de personal, acarreos, insumos, etc.
La UTE Represas Patagonia está formada por Electroingeniería, China Gezhouba Group Corporation e Hidrocuyo, en conjunto, son las encargadas de la construcción de las represas y extraoficialmente se conoce que existe un profundo malestar de las empresas chinas con la argentina, por los desmanejos desprolijos que hace de la obra y las consecuencias que acarrea al proyecto.
“No creo que haya posibilidades de que Electroingenieria pueda ser excluida de la UTE porque el proceso licitatorio y los contratos no se pueden deshacer tan fácilmente, pero existe intención del gobierno nacional de correrla del proyecto y para ello habría una tarea de compensación que se había iniciado con la adjudicación de la obra del gasoducto troncal en Córdoba, donde la empresa de Gerardo Ferreira y Osvaldo Acosta en UTE con la china Petroleum Pipeline Boreau (CPP) se adjudicaron dos de los diez tramos con un total de 2.333 kms, que para la UTE representan 2.475 millones de pesos”, indicó nuestra fuente.
Electroingeniería tiene en Santa Cruz un mal antecedente, que dejó su peor huella en el tendido del interconectado, donde quedaron deudas muy importantes y aún así fue favorecida por la licitación de las represas.
“La costumbre de Electroingeniería es tapar las deudas que deja en una obra, con la siguiente– consignó nuestra fuente – de hecho ellos mismos lo dijeron cuando se hizo la reunión en la UTN; allí manifestaron que cuando cobraran lo de las represas, pagarían a las empresas del Interconectado que habían quedado colgadas”, señaló.
Desde la Federación se quejan porque la UTE Represas Patagonia ni siquiera permite mantener una conversación oficial con las empresas a las que les deben millones de pesos. “Solo hay contactos extraoficiales, por vía telefónica o mensajes de textos, pero no quieren realizar un acuerdo serio o sentarse a hablar. Es una vergüenza, además – insistió la fuente – que el gobierno de la provincia no tome cartas en el asunto y al menos haga de intermediario o reconozca públicamente que en la obra hay un serio problema y ese problema proviene de la falta de responsabilidad de Electroingeniería que le debe a medio mundo y complica la actuación de todos los actores, desde los obreros hasta las empresas que subcontrata y por consiguiente todo impacta negativamente en Santa Cruz, pero esto que debería ser reconocido y tratado por el gobierno provincial, no lo hace; por el contrario siguen reclamándole a Macri y no ven el desastre que está haciendo la empresa que ellos defienden”, consignó.
Consultadas fuentes de la Federación, nos ratificaron que la UTE Represas Patagonia, está sustituyendo a los proveedores locales por empresas que contratan en la provincia de Córdoba