María José Pérez
La crisis del precio del crudo sigue adelante y con ella se han producido cambios en los altos cargos de las petroleras latinoamericanas. La última compañía en anunciar nuevas salidas y nombramientos ha sido la argentina Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF).
El presidente y CEO de la empresa estatal, Miguel Galuccio , deberá abandonar (por petición del Gobierno de Mauricio Macri) ambos cargos el próximo mes de abril. La salida de Galuccio se hará efectiva esta fecha puesto que coincide con la Junta de accionistas que, junto al directorio, debe validarla.
Durante un tiempo el Gobierno ha estado dividido sobre la salida de Galuccio de la estatal. Pero finalmente se ha impuesto el ala que defendía el ministro de Energía y Minería, Juan José Aranguen, que lleva un tiempo insistiendo en la necesidad de que el líder de YPF abandone su cargo.
El Gobierno ya ha propuesto a un nuevo presidente para YPF. Se trata del Miguel Ángel Gutiérrez, ex CEO de Telefónica Argentina, según señala La Nación. El Ejecutivo argentino ha decidido desdoblar el cargo que anteriormente ocupara Galuccio en dos, de manera que Gutiérrez se quedará con la presidencia y habrá que buscar a otra persona para ser el gerente general.
Aunque Argentina no ha sido el único país de América Latina en el que el Gobierno ha decidido cambiar algunas sillas en las petroleras estatales. Hace poco más de un mes el presidente de México, Enrique Peña Nieto, destituyó al hasta entonces presidente de la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya.
Como sustituto, el mandatario del país azteca eligió a José Antonio González Anaya , que había sido hasta ese momento líder delInstituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y al que sustituyóMikel Arriola, que fue comisionado federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).
Tanto Lozoya como Galuccio se unen a otros que tuvieron que dejar su puesto al frente de las petroleras estatales. Tal fue el caso deMaria das Graças Silva Foster, aunque ella optó por hacerlo por voluntad propia debido al escándalo de corrupción al que se enfrentaba (y aún se enfrenta) Petróleos Brasileños (Petrobras). A ella la sustituyó Aldemir Bendine.
A los nuevos líderes de estas empresas les esperan grandes desafíos, pues son muchos los que aseguran que la crisis del petróleo aún tiene mucha cuerda. Uno de las últimas y funestas predicciones la ha realizado la financiera noruega DNB Markets que avisa, como recoge América Economía que el barril podría tocar los diez dólares si los países de dentro y fuera de la Organización de Países Productores de Petróleo (OPEP) no se ponen de acuerdo en un plan para congelar la producción.
Los países latinoamericanos ya han tomado cartas en el asunto y este viernes se reunirán en Quito representantes de Ecuador, Venezuela (miembros del organismo petrolero), Colombia y Méxicopara tomar sus propias medidas para salir de la complicada situación en la que se encuentra el sector del petróleo.