El ministro de Energía, Juan José Aranguren, dio un fuerte paso en contra de la continuidad de Miguel Galuccio al frente de YPF, lo cual se definirá en la asamblea de accionistas del mes próximo.
El ex presidente de Shell Argentina criticó el nivel de endeudamiento de la petrolera nacional durante una reunión en el Senado, convocada para hablar de los futuros aumentos de las tarifas de gas que ya están definidos técnicamente
YPF respondió que tiene un ratio de deuda más bajo que las petroleras más importantes de América
En el encuentro con el interbloque de Cambiemos en la Cámara de Senadores, Aranguren dedicó varios minutos de su exposición a cuestionar la situación financiera de YPF.
Así lo dio a conocer Federico Pinedo, referente del PRO, en su cuenta de Twitter. "En reunión con senadores de Cambiemos con el ministro Aranguren: YPF tiene un endeudamiento que duplica su margen operativo", publicó.
Los dichos de Aranguren son inexactos, según replicó ayer YPF en el último párrafo de un comunicado donde difundió los resultados de 2015. "En relación al financiamiento, la compañía mantuvo durante el año pasado una estrategia sólida, con un ratio de deuda neta en dólares sobre el Ebitda de 1.35x, que se ubica por debajo de los estándares internacionales para esta industria. En comparación, las principales empresas de América Latina y las independientes de Estados Unidos muestran un ratio que supera en promedio los 2.75x. Además, la compañía logró extender el promedio de plazo de su deuda a 5 años", indicó la petrolera.
La relación entre Aranguren y Galuccio es mala, y parece que el ministro busca esmerilar la figura del titular de YPF, cuya gestión está siendo auditada por una comisión. El presidente Mauricio Macri siempre dejó la puerta entreabierta a una posible continuidad del ingeniero entrerriano.
Ayer YPF informó que sus ganancias cayeron 49% en 2015, hasta $4579 millones, arrastradas por la caída del precio del petróleo. Aunque destacó que en un contexto crítico para la industria a nivel mundial, logró aumentar 2,1% en la producción de petróleo y 4,1% la de gas, y que incrementó sus reservas y las inversiones.
CIFRA
250 pozos no convencionales realizó la empresa estatal.
Durante 2015, YPF hizo 934 pozos, de los cuales 250 fueron no convencionales. La producción de tight gas creció 22%.
NEUQUÉN
El secretario general del Sindicato del Gas y Petróleo de Río Negro, Neuquén y La Pampa, Guillermo Pereyra, aseguró que YPF paralizará ocho equipos petroleros y dará de baja a unos 2000 trabajadores en Neuquén. El senador consideró que la administración de la empresa "es un desastre" y que incumplió los acuerdos que tenían.
"La idea es dar una baja de 2000 trabajadores. Esto se ha tornado muy feo y muy delicado. Si YPF no revierte esta situación, vamos a dar intervención al Ministerio de Energía y al de Trabajo", declaró el senador a LU5.
Desde la petrolera nacional desmintieron la versión. Señalaron que no hay despidos y que la empresa está cumpliendo con el acuerdo de preventivo de crisis que establece suspensiones rotativas de unos 1700 trabajadores. Precisamente se llegó a ese acuerdo con las grandes empresas de servicios especiales para evitar un desempleo masivo.
Sin embargo, Pereyra comentó que ayer se reunió con senadores y diputados de otras provincias para analizar la situación por la caída de la actividad y criticó duramente al CEO de YPF, Miguel Galuccio.
El ministro de Energía, Juan José Aranguren, destrozó al CEO de YPF, Miguel Galuccio, en la reunión con los senadores nacionales de Cambiemos, y preparó el terreno para echarlo de la petrolera en abril, como había adelantado LPO.
La reunión entre Aranguren y los senadores, en las oficinas del bloque radical, tenía como objetivo central conseguir respaldo político para el tarifazo a la luz y el gas, pero el ministro aprovechó la oportunidad para cuestionar duramente la situación financiera de YPF, según detalló el portal El Inversor Online.
La jugada de Aranguren contra Galuccio se completó con un par de tuits del presidente provisional del Senado, Federico Pinedo, para dar a conocer las críticas sobre la situación de YPF, que no habían sido parte de la información que se dio sobre la reunión.
“En reunión con senadores de Cambiemos con el ministro Aranguren: YPF tiene un endeudamiento que duplica su margen operativo”, escribió Pinedo, aportando un dato que, de ser real, sería muy peligroso para el funcionamiento de la petrolera
“A Bolivia no se le pagaba el gas desde mediados del año pasado: deuda inesperada de casi 400 millones de dólares”, continuó Pinedo, en referencia a una operación que era compartida por YPF y Enarsa
La salida de Galuccio de YPF era una fija con la llegada de Mauricio Macri al gobierno, pese al acercamiento que había intentado el ejecutivo el año pasado. A diferencia de otras aéreas, el oficialismo le dio un poco más de tiempo al CEO de YPF, aunque todo indica que ese tiempo finalizará en abril, cuando se realice la asamblea anual extraordinaria del directorio
La principal razón para esa salida es la mala relación de Galuccio y Aranguren, ex CEO de la petrolera Shell. El ministro de Energía hasta ahora aceptó compartir con el ejecutivo designado por Cristina Kirchner, pero lo rodeó en el directorio con especialistas críticos de su gestión, como el ex secretario de Energía Emilio Apud, nombrado en diciembre en el cargo de director que ocupaba Axel Kicillof.
Aranguren también metió como director al ex secretario de Energía y ex presidente de YPF Daniel Montamat, otro feroz crítico de la gestión Galuccio. Además, ingresaron Carlos Felices, ex presidente de Telecom Argentina, y Miguel Gutiérrez, ex titular de Telefónica Argentina y candidato a ocupar el lugar de Galuccio
Las críticas de Aranguren en el Senado podrían completarse con el informe de un comité de auditoría conformado en diciembre para revisar los números de la gestión kirchnerista. Ese comité está integrado por Felices, Montamat y Gutiérrez.
Ni el barril criollo salvó a YPF. Las ganancias netas de la petrolera estatal en el 2015 se derrumbaron casi un 50%, de la mano de mayores costos y los menores precios de venta de los combustibles medidos en dólares.
La compañía presentó ayer su último balance del ejercicio, donde destaca varios indicadores positivos, aunque acusa el golpe de la crisis por la baja de precios que vive el sector.
Por un lado, da cuenta de una suba del 2,1% en la producción de petróleo y 4,1% en gas. También destaca un incremento en lo que se denomina tasa de recuperación de reservas del 107%. Esto quiere decir que por cada barril que sacaron del subsuelo, lograron incorporar algo más de uno para extraer a futuro.
Incluso las inversiones de YPF fueron un 3,8% mayores en 2015 en relación al año anterior, al alcanzar los 61.000 millones de pesos.
Esta mejor performance, empujada por precios internos mejores a los que se pagan en el mundo, logró evitar la catástrofe, pero no sostener los muy buenos números con los que cerró 2014.
Las ganancias netas de la compañía pasaron de 9.000 millones de pesos a casi 4.600, un 49% menos.
Deuda
Como pocas veces, había expectativas sobre los niveles de endeudamiento de la compañía. Para marcar la cancha, el senador macrista Federico Pinedo señaló el miércoles en un tuit su preocupación por tema tras una conversación con el ministro de Energía, Juan José Aranguren.
"YPF tiene un endeudamiento q duplica su margen operativo", indicó el presidente de la bancada del Pro en la Cámara Alta.
Sin embargo, según el Balance que la empresa presentó ayer en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, la relación entre la deuda total neta y el Ebitda (un indicador muy utilizado por las compañías que computa ingresos sin tener en cuenta impuestos e intereses entre otros conceptos), es de 1,35, un valor por debajo del promedio de empresas del sector.
Silvia Peco
YPF tiene el objetivo de dar de baja a 2.000 trabajadores, según advirtió ayer el titular del sindicato de petroleros de Neuquén y Río Negro, Guillermo Pereya. El número está casi en línea con una caracterización del Gobierno nacional según la cual en la petrolera hay un excedente de 2.500 puestos de trabajo.
Estos números empiezan a circular en el contexto dado por el deficiente balance de YPF durante 2015 y el último trimestre de ese año, conocido ayer, y una fricción creciente entre el ministro de Energía, Juan José Aranguren, y el titular de la petrolera, Miguel Galuccio, a quien en medios oficiales se da por desplazado desde la próxima asamblea de accionistas en abril.
Esa enemistad que podría considerarse de carácter casi personal no puede ocultar, sin embargo, que la caída en el precio internacional del petróleo y el cambio en el Gobierno nacional están poniendo término al proyecto de desarrollar los recursos no convencionales de Vaca Muerta.
El Gobierno ya decidió que YPF no tendrá más financiamiento de la ANSES. Según la empresa, además, el Estado le debía al 31 de diciembre alrededor de $ 12.000 millones por los estímulos a la producción de petróleo y gas que no está claro en qué plazo va a cubrir.
En esas circunstancias, para seguir desarrollando Vaca Muerta a YPF sólo le quedaría salir a buscar deuda en el exterior, pero no podría conseguir buenas condiciones financieras por tratarse de un proyecto con fuerte necesidad de capital y rentabilidad muy acotada con los actuales precios internacionales. Además, salir a buscar fondos en el mercado internacional no podría fundamentarse en los precios internos del petróleo y el gas, porque éstos dependen de una decisión política local que además no forma parte de los fundamentos políticos del actual Gobierno.
Estas desavenencias entre la administración de Mauricio Macri y la conducción de YPF quedó patente ayer cuando se conoció un tuit de Federico Pinedo tras una reunión de Aranguren con el bloque de senadores de Cambiemos. Pinedo dijo, citando al ministro, que "YPF tiene un endeudamiento que duplica su margen operativo".
Fuentes de la compañía salieron de inmediato a afirmar que la relación entre la deuda y el EBITDA ( ganancia antes de intereses, impuestos, depreciación y amortizaciones) es de 1,35 veces y que esto es uno de los valores más bajos en relación con las petroleras de otros países, y también que no se puede comparar pasivos con margen operativo.
Según el balance, la deuda neta de YPF al 31 de diciembre era de u$s 7000 millones, mientras que la utilidad operativa fue de $ 16.588 millones, con una relación peor aún a la mencionada por Pinedo aun si pudiera contabilizarse a favor de la empresa la deuda del Tesoro por $12 mil millones.
Además del derrumbe de la cotización internacional que implicó una desvalorización de los activos, el balance de YPF está afectado porque en 2015 hubo una reducción de los precios en dólares de los combustibles al público y por la inversión que le demandaron las áreas de Vaca Muerta.
En ese escenario, el sindicalista Pereya que también es senador por el Movimiento Popular Neuquino y cercano al PRO, aseguró que YPF está en quiebra y que la administración actual "es un desastre", indicando que en adelante sólo hablará con los ministros de Energía y Trabajo. Esta toma de posición de Pereyra no puede disimular que más allá de Galuccio cambió la óptica oficial sobre YPF y que el Gobierno no ve rentable Vaca Muerta con los actuales precios internacionales.