Después que la semana pasada, la polaca KGHM reconociera un deterioro contable de su participación de 55% en minera Sierra Gorda, en la Región de Antofagasta, ayer la compañía informó que se reunió con Sumitomo -dueño del restante 45%- para abordar el complejo momento que atraviesa la faena, producto de la baja del cobre y el deterioro de los mercados.
En un comunicado, la polaca informó el presidente y el vicepresidente del consejo de administración de KGHM mantuvo un encuentro con sus pares japoneses, donde discutieron el funcionamiento actual de la faena y los desafíos que enfrenta.
En una declaración, señalaron que ambos estaban de acuerdo en hacer todos los esfuerzos para superar las dificultades que tuvieron para lograr la capacidad de diseño e independencia financiera. De hecho, sin dar mayores detalles, informaron que se pusieron de acuerdo en qué medidas tomar para manejar de forma efectiva la empresa, debido al bajo precio del cobre y del molibdeno.
De hecho, agregaron que superar los retos actuales es la base para tomar nuevas decisiones estratégicas relacionadas con la mina, por lo que querían mantener la relación estratégica con Sumitomo.
Sierra Gordafue uno de los últimos grandes proyectos mineros de cobre en entrar en operación, impulsado durante el súper ciclo del metal rojo.
La semana pasada, la polaca dio a conocer un test de deterioro de sus operaciones ante la nueva realidad del mercado, donde Sierra Gorda fue una de las que tuvo mayor castigo, en US$ 510 millones, según consignó la agencia internacional Reuters.