El Perú firmó hoy en la ciudad de Auckland, Nueva Zelanda, el Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP, por sus siglas en inglés), un convenio conjunto con otros once países que conformarán un bloque comercial que representa el 40% de la producción mundial.
La rúbrica fue efectuada por la titular del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur), Magali Silva, junto con los ministros representantes de las naciones que conforman el bloque: Australia, Brunéi, Canadá, Chile, Estados Unidos, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Singapur y Vietnam.
En la ceremonia de firma del TPP también estuvo presente el viceministro de Comercio Exterior, Edgar Vásquez, y el jefe del Equipo Negociador del Perú, José Luis Castillo.
Como se recuerda, las negociaciones para lograr este acuerdo se cerraron el pasado 5 de octubre del año pasado, luego de una serie de discusiones entre los países negociantes.
Según los especialistas, el TPP atraerá inversión del Asia-Pacífico para crear empresas en el Perú y posteriormente exportar bienes y servicios a terceros países.
En anteriores declaraciones, la titular del Mincetur precisó que este acuerdo contribuirá “decisivamente a la consolidación del sector exportador peruano”, principalmente el no tradicional.
PYMES
“De esta manera, contribuirá a generar nuevos motores de crecimiento a la economía peruana y a darle sostenibilidad en el largo plazo a través de la internacionalización de las pequeñas y medianas empresas (pymes) y su incorporación a las cadenas globales de valor”, indicó en su oportunidad.
De esta manera, agregó, las pymes peruanas se insertarán a las cadenas globales de valor y accederán a un mayor nivel de especialización, así como a una importante transferencia de tecnología.
“Se mejorará la competitividad del país y los estándares nacionales, además de consolidar la presencia del Perú en el Asia-Pacífico”, sostuvo.
Cabe señalar que por iniciativa del Gobierno peruano se acordó incluir por primera vez en un tratado comercial de esta magnitud, un capítulo de pymes, con la finalidad de insertar a este sector a la cadena productiva en el comercio mundial.
Nuevos mercados
Así como el Perú refuerza con este acuerdo sus Tratados de Libre Comercio (TLC) con países como Canadá y Japón, se abrirán cinco nuevos mercados (Nueva Zelanda, Malasia, Vietnam, Brunéi y Australia), inmediatamente después de la entrada en vigencia del TPP.
Asimismo, se podrán aumentar las exportaciones hasta en 2,250 millones de dólares en frutas y hortalizas, granos andinos, productos pesqueros y productos textiles de algodón y alpaca.
Hoy nuestras exportaciones combinadas de productos no tradicionales a esos mercados no llegan a 36 millones de dólares. No obstante esos cinco mercados importan estos productos por un monto superior a los 4,000 millones de dólares.
Doce países firmaron en Nueva Zelanda el Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP, en inglés), que creará el mayor área de libre comercio del mundo, en medio de protestas callejeras y un mensaje conciliador hacia China.
El TPP, que representa un 40 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) mundial, fue firmado por los ministros y representantes de Estados Unidos, Japón, Australia, Brunéi, Canadá, Chile, Perú, Malasia, México, Nueva Zelanda, Singapur y Vietnam.
El primer ministro neozelandés y anfitrión, el liberal John Key, destacó durante la ceremonia celebrada en Auckland que el acuerdo refleja la confianza de los firmantes "en que la apertura y la integración de los mercados e inversiones propiciará la prosperidad de nuestros pueblos".
La firma del TPP abre un proceso de dos años para que cada miembro lo ratifique individualmente y se necesita para que entre en vigor que lo ratifiquen al menos seis de los firmantes originales y que representen el 85 por ciento del PIB combinado del bloque.
Los gobiernos de Nueva Zelanda y Australia presentarán la semana próxima el acuerdo a sus respectivos parlamentos, y en los próximos meses esperan hacerlo México, Perú y Chile.
Las autoridades de Malasia y Brunéi no necesitan pasar por el Legislativo para la ratificación, mientras que el nuevo Gobierno de Canadá tiene previsto, en cumplimiento de una promesa electoral, someter el tratado a un plebiscito antes de acudir al Parlamento.
El representante de Comercio Exterior de EEUU, Michael Froman, confió en contar con el apoyo del Congreso de su país, que este año celebra elecciones, porque, según dijo, supone "grandes beneficios para la economía estadounidense, con un cálculo de 130.000 millones de dólares anuales de crecimiento del PIB".
Según Froman, "el TPP no se dirige contra un país en particular, sino hacia el establecimiento de estándares más altos para la región. Estamos vinculados a China, como todos los países de la región y es importante tener una relación económica constructiva con ellos".
El TPP, que representa a 800 millones de habitantes, es visto por algunos analistas como una medida que contribuirá a contrarrestar el poderío económico de China en el Pacífico.
El Ministerio de Comercio chino reaccionó hoy a la firma con palabras de apoyo al proceso de apertura del comercio y la inversión en la región y mostró su interés en el pacto.
"El TPP es un acuerdo exhaustivo. China lo está estudiando y realizando una evaluación" del texto, señalaron las autoridades chinas en un comunicado.
Corea del Sur, Filipinas, Indonesia, Tailandia, Colombia y Uruguay son otras naciones que han mostrado mayor o menos interés en el TPP.
La satisfacción expresada por los firmantes contrastó con las protestas que se organizaron en las calles de Auckland y que se unen a otras celebradas la víspera y otros días en diferentes ciudades de Latinoamérica.
"Si la injusticia es la ley, la rebelión es nuestro deber", decía una de las pancartas que portaban cientos de manifestantes en Nueva Zelanda y que eran vigilados de cerca por un fuerte dispositivo de antidisturbios.
El TPP ha sido criticado por el secretismo que ha rodeado las conversaciones que comenzaron hace cinco años y porque amenaza, según ONGs y centrales sindicales, los derechos laborales, el acceso a los medicamentos y el medio ambiente.
Otro de los puntos del acuerdo que consideran polémicos es el que abre el camino a que los inversores extranjeros puedan demandar al Estado por cambios que afecten a sus inversiones.
La ministra peruana de Comercio Exterior, Magali Silva, descartó en declaraciones a Efe por teléfono que este apartado vaya a ser un problema en Perú.
"El TPP no cambia de ningún modo" la legislación de protección de los derechos soberanos del Estado peruano que el país andino dispone desde "muchísimo antes que cualquier negociación de cualquier tratado internacional", afirmó Silva.