El grupo de ingeniería y renovables Abengoa presentará el miércoles a sus acreedores el plan de viabilidad con el que espera evitar la mayor quiebra de España, dijeron el martes tres fuentes con conocimiento de la situación.
Abengoa debe lograr un acuerdo sobre un plan de reestructuración antes de fines de marzo, cuando vence el preconcurso de acreedores, para evitar una suspensión de pagos de la empresa con sede en Sevilla con un pasivo global que podría rondar los 25,000 millones de euros.
“El miércoles hay una nueva reunión con bancos, bonistas, asesores y la compañía”, dijo una de las fuentes a Reuters.
El plan elaborado para Abengoa por la firma especializada en reestructuraciones Álvarez & Marsal, ya en manos del consejo de la empresa desde hace una semana, será analizado en detalle por KMPG, la consultora que intermedia entre bancos y compañía, para ofrecer una solución global que evite el concurso de acreedores.
En Abengoa no quisieron hacer comentarios al respecto.
En base al plan, una fuente dijo previamente a Reuters que la empresa reduciría su deuda corporativa a unos 3,000 millones de euros (US$ 3,300 millones), desde 9,000 millones de euros, lo que implicaría que los acreedores tendrían que aceptar una pérdida de alrededor del 70% de su inversión y un canje de deuda por acciones.
Abengoa adelantó, sin entrar en detalles, que venderá todos los activos no estratégicos, incluyendo biocombustibles, y que se concentrará en el negocio de ingeniería y construcción con tecnología propia o ajena.
También aspira a obtener ingresos en los próximos años equivalentes a las dos terceras partes de los 7,151 millones de euros facturados en el 2014.
La demora en conocer el detalle del plan está empezando a tensar las relaciones entre la empresa y la banca, que sigue siendo partidaria de desinversiones, capitalizaciones de deuda y reestructuraciones de deuda sostenible, pero reacia a asumir quitas, según una de las fuentes consultadas.
Entretanto, el reloj no se detiene y Abengoa necesita nueva liquidez para su día a día hasta el fin de marzo, entre otras cosas para seguir pagando a sus cerca de 24,000 trabajadores.
Los principales bonistas del grupo, representados por Houlihan Lokey y que cuentan con un 40% de los cerca de 5,000 millones de euros de bonos de Abengoa, están dispuestos a inyectar unos 160 millones de euros si los bancos acceden a compartir con ellos garantías.
Pero los bancos siguen esperando que Abengoa presente un mapa detallado de sus deudas antes de tomar nuevas decisiones.
Cada día que pasa se incrementan las deudas vencidas a titulares de pagarés y proveedores. De acuerdo con los últimos datos publicados por Abengoa, les debe unos 5,500 millones de euros, mientras negocia con ellos cómo aplazar los pagos.
Una fuente con conocimiento de las cifras de la compañía dijo que para finales de marzo ya estarían vencidos unos 800 millones de euros.
Atlantica Yield (antes Abengoa Yield), la compañía creada por Abengoa y en la que el grupo español controla el 40% del capital, perdió el martes en Bolsa un 7,77% de su valor (llegó a caer más de un 10,5%). La empresa, que cotiza en el Nasdaq, cerró a 15,9 dólares por acción después de que, como publicó Vozpopuli, tres filiales brasileñas hayan iniciado el proceso de entrada en concurso de acreedores.
El concurso de las empresas brasileñas de Abengoa -Abengoa Concessoes Brasil Holding, Abengoa Construção y Abengoa Greenfield Brasil Holding- puede restar parte del dividendo que Atlantica Yield tiene previsto entregar este ejercicio y del que la empresa sevillana se vería beneficiada.
La filial estadounidense de Abengoa tiene acordado con su matriz el derecho a percibir durante cinco años 18,4 millones de dólares de dividendo anualmente a través de Abengoa Concessoes Brasil Holding. Y Atlantica Yield, según una presentación de la empresa fechada el pasado mes de enero, pretende incrementar este año hasta un 34% el dividendo, 2,15 dólares por acción, lo que supondría que Abengoa recibiría via dividendo de la estadounidense unos 80 millones de euros este año.
Atlantica Yield advierte, en un comunicado enviado al regulador del mercado de Estados Unidos (SEC), que si debido a la situación concursal de Abengoa Concessoes Brasil Holding se redujera la cantidad de los 18,4 millones de dólares que tiene que recibir este año, tal y como acordó en su momento con la multinacional española, Abengoa dejaría de percibir la misma cantidad vía dividendo desde Atlantica Yield.
Las entidades financieras acreedoras de Abengoa critican que todavía no hayan tenido acceso al plan de viabilidad del grupo.
El 40% de la compañía estadounidense es el principal activo con el que cuenta en la actualidad Abengoa, que trata de evitar el que sería el mayor concurso de acreedores en la historia empresarial española. Atlantica Yield, tras la caída sufrida el martes en Bolsa, tiene un valor de mercado cercano a los 1.600 millones de dólares, y además de ser una importante fuente de ingresos para el grupo sevillano por los jugosos dividendos que reparte, acapara algunos de los mejores activos energéticos levantados por Abengoa.
En el último año Abengoa ha traspaso a Atlantica Yield plantas energéticas valoradas en 1.300 millones de euros. En el proceso de desinversión que tiene previsto acometer el grupo español para reducir deuda, la empresa estadounidense es una de las mejor posicionadas para comprar más activos durante este ejercicio.
Abengoa tiene previsto reunirse este miércoles con representantes de los bancos acreedores y de los bonistas para entregarles el plan de viabilidad elaborado por la consultora Álvarez&Marsal.
La multinacional española comunicó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores el 25 de enero que Álvarez&Marsal había presentado ese día al consejo de administración el plan de viabilidad y que en base al mismo "deberá negociar con sus acreedores una reestructuración de la deuda y los recursos necesarios para continuar su actividad y operar de forma competitiva y sostenible en el futuro".
Tanto las entidades financieras -lideradas en este proceso por Santander, Caixabank, Bankia, Sabadell, Popular, HSBC, y Credit Agricole- como los propietarios de bonos emitidos por Abengoa, que juntos suman más de 8.000 millones de deuda, tenían previsto haber recibido con anterioridad dicho informe de viabilidad, incluso haber accedido a su elaboración. Sin embargo hasta ahora no han tenido acceso al mismo, lo que ha elevado la tensión entre la compañía y sus acreedores.
"No entendemos la estrategia de Abengoa en este sentido, retrasar la entrega del plan de viabilidad no conduce a nada bueno", comentan fuentes cercanas a las entidades acreedoras. El grupo con sede en Sevilla advierte que el plan es operativo, y que no contiene una propuesta de reestructuración financiera.
Abengoa tiene hasta el 28 de marzo para firmar un convenio con bancos, bonistas, y proveedores (a los que debe más de 5.000 millones de euros) que evite la declaración de concurso de acreedores. Ese día, si la compañía no logra un acuerdo, el juzgado mercantil número dos de Sevilla declarará la mayor quiebra ocurrida en España.