La presidenta de la República, Michelle Bachelet, invitó a Bolivia y Argentina a trabajar en conjunto en el desarrollo del litio.
"Es un tema que debiéramos trabajar en conjunto. Nuestros tres países tienen las reservas más grandes del mundo y hay todo un potencial ahí de manejo con el tema de la energía renovable", dijo la mandataria en su intervención en la IV Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y el Caribe (Celac) en Quito.
En la instancia, Bachelet también destacó la serie de reformas implementadas durante su gobierno mencionando la reforma tributaria, educacional, laboral y constitucional.
"En Chile nosotros hemos entendido que tenemos desafíos grandes. Por lo tanto hemos hecho una reforma tributaria de un 3% del Producto Interno Bruto, hemos hecho reformas educacionales donde el 50% de los jóvenes vulnerables están entrando a educación de calidad y gratis y estamos haciendo reformas laborales que permitan dar simetría de negociación a los empleadores y a los trabajadores".
También destacó la reforma constitucional como una nueva carta que represente "el Chile que queremos, la sociedad que queremos los próximos 30, 40 o 50 años".
La mandataria también hizo hincapié en la agenda productividad y la diversificación de la matriz energética "más barata y más limpia".
La presidenta de la República, Michelle Bachelet, llamó a buscar "caminos sólidos" para impulsar el crecimiento regional en medio del desfavorable escenario económico mundial.
"Sabemos que la desaceleración de China, la volatilidad de los mercados financieros y la baja de los precios de los commodities determinan una baja en el ritmo de crecimiento en la mayoría de nuestros países y eso nos obliga a buscar caminos sólidos para impulsar el crecimiento regional, diversificar nuestras economías y, aumentar nuestra productividad", dijo la mandataria.
En este sentido, la mandataria llamó a las instituciones financieras internacionales a revisar sus políticas "para buscar mecanismos innovadores que nos permitan administrar de forma efectiva la deuda y acceder a nuevas fuentes de financiamiento para el desarrollo".
Asimismo, concordó con el presidente venezolano Nicolás Maduro en alinearse en torno a la agenda 2030 de las Naciones Unidas para aunar criterios en la superación de la pobreza y el desarrollo sostenible.
"Eso implica necesariamente una mayor integración, una mayor inversión y un mayor comercio intrarregional", concluyó la presidenta.
García destacó la importancia que el Gobierno boliviano le da a la explotación e industrialización del litio toda vez que Bolivia posee el 80 por ciento de las reservas mundiales de ese recurso natural.
"Bolivia es poseedora del 80 por ciento de reservas del litio del mundo. Es la Arabia Saudí del litio en el siglo XXI y ha generado un modelo orientado a la industrialización de este recurso", afirmó.
La economía boliviana se ha desarrollado tradicionalmente en torno a la minería del estaño y la actividad hidrocarburífera (exportación de gas a los mercados de Argentina y Brasil), lo que en los últimos diez años le ha permitido incrementar sus reservas internacionales a 13.000 millones de dólares y un crecimiento sostenido del 5%, de acuerdo con las cifras oficiales.
Ante la caída de los precios internacionales de las materias primas, el Gobierno boliviano busca nuevos emprendimientos que sustituyan el modelo primario exportador, para lo que desarrolla pruebas piloto de industrialización del litio del salar de Uyuni.
"El litio está mejorando sus precios de manera sistemática, hay mayor consumo, mayor demanda y las tecnologías contemporáneas de la comunicación se están comenzando a adecuar al material del siglo XXI que es el litio", dijo García Linera.
El Gobierno de Evo Morales hizo una inversión de 3,7 millones de dólares para instalar la planta piloto de industrialización del litio en 2007 y tiene previsto crear unos 2.200 empleos directos e indirectos, según las proyecciones de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol), encargada del financiamiento de este proyecto.
El presidente Evo Morales informó este jueves que Chile le manifestó su interés de hacer acuerdos energéticos y de industrialización de litio. Sin embargo no respondió públicamente si Bolivia acepta o no esa sugerencia. El Mandatario indicó a las Fuerzas Armadas que su homóloga Michelle Bachelet llamó a Bolivia y Argentina a trabajar conjuntamente en el sector, durante la IV Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y el Caribe (Celac) que se celebra en Quito del 27 al 29 de enero y a la que asistieron ambas autoridades.
"Ayer la presidenta Bachelet decía ‘hay que industrializar litio con Argentina con Bolivia’, claro, ellos también tienen pero las reservas más grandes del mundo están en Bolivia", sostuvo el Jefe de estado este jueves en un encuentro con las Fuerzas Armadas. Morales explicó que antes los otros países querían llevarse la materia prima, "pero eso se ha terminado, ahora quieren ser parte de la industrialización, saben que no vamos a vender esa materia prima", dijo Recordó que el precio del gas y los minerales está bajando, mientras el del litio sigue subiendo.
Hasta 2019, el Gobierno anunció la inversión de $us 925 millones en la industrialización del recurso. "Cuando tengamos la gran industria, Bolivia va a decidir el precio del litio para todo el mundo, porque la reservas más grandes están aquí", sostuvo.
"En esta cumbre energética que se ha realizado en Tarija, algunas autoridades chilenas indirectamente insinuaron que hagamos acuerdos energéticos para que Bolivia pueda exportar energía a Chile", expresó Morales en referencia a la cumbre de la Organización Latinoamericana de Energía (Olade) realizada en Tarija en octubre de 2015.
Además reconoció que Bolivia tiene problemas energéticos con algunos países vecinos y que la cita entre el ministro de Energía argentino, Juan José Aranguren, y el boliviano de Hidrocarburos, Luis Alberto Sánchez, que debía realizarse en Santa Cruz esta semana, se aplazó hasta mediados de febrero a pedido de aquel.
A finales de diciembre de 2015 Bolivia reconoció que Argentina tenía una deuda millonaria por venta de gas y amenazó con el cierre de válvulas si la falta de pago se extendía. Tras una reunión del presidente de YPFB, Guillermo Achá, con ejecutivos de la empresa Energía Argentina (Enarsa), fue superado el impasse y Argentina se comprometió a pagar la deuda de $us 202 millones hasta marzo.