Mauricio Macri y David Cameron sostuvieron hoy uno de los encuentros más resonantes del Foro Económico de Davos. En el exclusivo Hotel Belvedere duró media hora el meeting para relanzar la relación Argentina- Gran Bretaña,
El presidente Mauricio Macri se reunió con el premier inglés, David Cameron, en uno de los encuentros más importantes de su visita al Foro Económico de Davos.
La intención de la Casa Rosada era reactivar la relación con Gran Bretaña, además de conversar sobre la cuestión de las Islas Malvinas.
"Fue una linda reunión", le dijo Macri a la prensa en un breve contacto al finalizar el encuentro con el premier británico. "Buscamos una relación con todos los temas sobre la mesa", planteó el Presidente a LA NACION.
A través de un comunicado, el gobierno británico apuntó que ambos mandatarios hablaron sobre "reforma económica, comercio e inversión y las Falkland (Malvinas)". Macri y Cameron se mostraron de acuerdo en que "existe la posibilidad de abrir un nuevo capítulo" entre ambos países, informó Londres, según consignó la agencia AFP.
En cuanto al diferendo sobre las Islas Malvinas, dice el texto de Downing Street: "El primer ministro dejó claro que nuestra posición sigue siendo la misma y que en el reciente referéndum quedó absolutamente claro que los habitantes de las islas quieren seguir siendo británicos".
El jefe de Gabinete, Marcos Peña, aportó la visión argentina. Consultado por Télam, dijo que "la diferencia sobre Malvinas no será un impedimento para tener una buena relación" con Gran Bretaña.
Peña calificó de "muy buena reunión" y ratificó la postura argentina ante Malvinas. "Los dos [mandatarios] tienen posturas diferentes sobre Malvinas, pero eso no va a impedir que se tenga una buena relación", afirmó el jefe de Gabinete. Entre ambos países se acordó una agenda bilateral sobre lucha contra el narcotráfico y la corrupción, cambio climático, apoyo para el desarrollo financiero e infraestructura.
A su vez, la canciller Susana Malcorra anticipó que en los próximos meses llegaría al país una delegación británica para reafirmar la agenda bilateral.
Macri estuvo acompañado en la bilateral por el líder del Frente Renovador, Sergio Massa, a quien invitó especialmente a Davos para mostrar apertura política.
Mientras tanto, Rockhopper Exploration y Falkland Oil anda Gas (FOGL) completaron fusión, tras l
Las empresas con sede en Reino Unido necesitaban el okey judicial después de una votación 5 de enero de los shareholders de FOGL en favor de la fusión completa.
La aprobación de la corte llegó el viernes y la fusión se hizo oficial el lunes.
La noticia llega una semana después de la confirmación por parte de otra empresa del Reino Unido, Premier Oil, de un hallazgo de petróleo en las profundidades Isobel bien fuera de las Malvinas. FOGL y Rockhopper son compañeros de los interesados con el primer ministro de ese pozo.
Argentina ha objetado el desarrollo offshore por británicos, estadounidenses y las empresas francesas, ya que afirma que las islas y las aguas circundantes. Las islas son un territorio británico de ultramar y 03 2013 celebró un referéndum sobre su futuro en el que los isleños apoyaron abrumadoramente permaneciendo bajo soberanía británica.
CLARÍN
Los kelpers reaparecieron esta tarde en sus redes sociales mostrando satisfacción por la reunión entre Mauricio Macri y David Cameron. "Es una definitiva mejoría respecto a (Cristina) Kirchner, que intentaba hacerle un piquete de ojos a Cameron cada vez que estaban en la misma habitación", escribió @falklands_utd, uno de los tuiteros más populares de las islas.
El gobierno local no emitió oficialmente posición alguna y consejeros como Gavin Short se limitaron a transmitir el comunicado de Londres. Otros hicieron particular énfasis en la referencia del comunicado al hecho de que "El primer ministro fue claro. Nuestra posición sigue siendo la misma y el reciente referéndum fue absolutamente claro acerca de la posición de los isleños".
A decir verdad, en los días anteriores, los kelpers siguieron con mucha atención e inquietud las fuertes señales de acercamiento entre Argentina y Gran Bretaña, que podría continuar pronto con la visita de un ministro británico al país, además de legisladores y empresarios. Esta agenda estuvo paralizada por los fuertes choques de los últimos 12 años ante la extrema malvinización del vínculo bilateral. Ambos líderes se mostraron hoy dispuestos a iniciar el deshielo.
Hace unos días, ya en vísperas de la cita, el Gobierno de las Islas tuiteó desde su cuenta el mensaje de la consigna pilar a la que recurrieron junto a Londres después de la guerra de 1982: "El derecho a la autodeterminación y a tener la posibilidad de hablar sobre nuestro futuro es fundamental para la gente de las #Falklands. Cualquier decisión afecta nuestras vidas", sentenciaron. En realidad, desde el triunfo de Macri, Cameron aseguró que Londres no cambiará nunca su posición sobre las Malvinas, y el Presidente argentino como su canciller insistieron con que el reclamo también se mantendrá vivo.
Pero en las Islas, la confrontación kirchnerista terminó siéndoles tan funcional como la trágica invasión de los militares argentinos de abril de 1982. Básicamente porque les dio razones a los kelpers para victimizarse ante Londres con respecto a la Argentina. Y porque ello justificó siempre su rechazo a cualquier acercamiento al territorio continental. En las Islas hubo posiciones “duras” y no “tan duras”. La dureza de Néstor y Cristina Kirchner –que los trató de “okupas”–, los unió como en los ’80.
Esta semana, la prensa isleña contó que en el último encuentro del Consejo Ejecutivo de las islas, del 13 de enero pasado, los kelpersacordaron adoptar un "Plan de Comunicación Estratégico"para concientizar a la comunidad internacional sobre lo que señalan es su "derecho a la autodeterminación" y los niveles de "autogobierno" que han desarrollado.
En el documento señalaron también que los logros los han alcanzado "a través de una democracia efectiva". Y afirmaron que deseaban "expandir a nivel internacional el conocimiento de las oportunidades para el turismo, el comercio y la ciencia".
Macri, con Cameron, hoy. Reunión en el marco del Foro de Davos.
Algo similiar hicieron en 2013 con el referéndum en el que el 99% de la población –de menos de 3.000 personas- votaron seguir siendo británicos. El referéndum no tiene ningún alcance para la ley internacional. Los kelpers siguen siendo Territorio de Ultramar británico, y su caso se trata en el comité de descolonización de las Naciones Unidas, que cada año suele dar respaldo al llamado al diálogo por su soberanía que pide la Argentina. Pero el referéndum fue una buena arma de propaganda mundial.
El domingo pasado, las redes sociales de las islas ardieron pero por las declaraciones del líder laborista Jeremy Corbyn, quien tiene una posición más dialoguista para con Argentina sobre el tema de la soberanía. Corbyn dijo a la BBC que su país debe reacomodar el diálogo sobre este tema. Inmediatamente desató la ira isleña y ayer le contestó fuertemente el consejero Mike Summers: "El señor Corbyn está claramente confundido sobre el derecho a la autodeterminación y entiendo poco sobre las Islas Falkland".
Summers agregó en referencia a las palabras del líder laborista: "El admite que tenemos derecho a determinar nuestro propio futuro, el cual fue claramente expresado en el referéndum de 2013 por una vasta mayoría, y ahora él parece abogar alguna forma de discusiones (sobre las islas) sin agenda. El piensa que 400 millas de argentina es muy cerca”. Y remató: "Es tiempo de que el señor Corbyn tome nuestra oferta de darle una correcta información de las Falklands que lo ayude a entender de nuestra política como de nuestra geografía".
Hubo, sin dudas, momentos de extrema tensión en las Islas para con el gobierno de Gran Bretaña, contrariamente a la fluidez que se presume en ese vínculo. Quizá, la tensión mayor se remonte a fines de los '60, cuando un grupo de legisladores isleños increpó al gobierno británico, hasta por escrito y a viva vos, por los acuerdos de comunicación con la Argentina que se negociaban y que ya no tenían marcha atrás.
Los '70 serán recordados como los años en los que la Argentina proveyó hospitales, escuelas, combustibles y comunicación aérea y postal a las Malvinas, entre otros. Todo ello lo interrumpió la invasión de 1982. En cada paso que Londres da con Buenos Aires hay siempre por detrás un fuerte trabajo de presión y seducción británica a los kelpers. El Reino Unido negocia como una potencia con quien quiere, pero necesita de los isleños para seguir administrando su colonia convertida en Territorio de Ultramar.
Con rastros de agotamiento por un largo viaje, el presidente Mauricio Macri arribó ayer a Davos, donde rápidamente comenzó a desarrollar una cargada agenda de reuniones y anunció su decisión de pedir el ingreso formal de la Argentina a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), para impulsar el comercio exterior en el país.
La nevada que cayó sobre gran parte de Suiza le impidió al mandatario abordar un helicóptero, por lo que debió trasladarse en auto desde el Aeropuerto de Zurich hasta la ciudad alpina que alberga la 46ta. Edición del Foro Económico Mundial, en la que es considerado una de las principales personalidades entre los 40 mandatarios y 2500 líderes políticos, empresarios, sociales y de las artes, entre otros, que participan del encuentro. Esa dificultad hizo que llegara al hotel Seehoff apenas una hora antes de iniciar la ronda de reuniones con empresarios, banqueros y políticos que tendrá hoy su punto más elevado, en una jornada extensa en la que mantendrá encuentros con el premier británico David Cameron y el vicepresidente de EE.UU. Joseph Biden, ambos en compañía del diputado del Frente Renovador, Sergio Massa, que forma parte de la delegación.
También se verá con el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, la reina Máxima y CEOs de varias de las principales multinacionales, entre otros. Al respecto, en un breve encuentro que mantuvo a su arribo con El Cronista y los periodistas de medios gráficos argentinos acreditados al Foro, Macri señaló que "está tratando de aprovechar la agenda al máximo porque cada reunión es una oportunidad de trabajo para los argentinos.
Necesitamos que vuelva la inversión, que vuelvan las fábricas, que la gente sepa que la Argentina volvió y que quiere ser parte del siglo XXI, aceptando todos los desafíos, pero teniéndose mucha fe que las oportunidades que tenemos son muy importantes".
"Esperemos que haya noticias de inversiones, para eso tomé todas estas reuniones. Tengo una cada 15 minutos", señaló, en un reflejo de la apretada lista de encuentros que ayer contempló el paso de Ozan Ozkural, socio gerente del fondo de inversión Tanto Capital Partners; la india Sunny Varkey, con quien habló sobre el interés que tiene GEMS Education de llevar a la Argentina una propuesta para realizar un entrenamiento a docentes y un proyecto de escuelas privadas con nuevas tecnologías; la visita de Hamad Al Daheri, el director ejecutivo de Abu Dhabi Investment Authority, el segundo fondo soberano de inversiones más importante del mundo y que tiene a su cargo gestionar el exceso de reservas de petróleo de Emiratos Árabes Unidos; y una reunión con el titular de Pampa Energía, Marcelo Mindlin, quien le acercó el interés de empresarios en realizar inversiones en materia energética, entre ellos Rick Rieder, CEO del fondo de inversiones estadounidense Blackrock; Daniel Loeb, CEO del fondo de coberturas Third Point; Niall Ferguson, director de la firma de asesoría macroeconómica Greenmantle; Ben Belkman, directivo de Brevan Howard Argentina; Daniel Pinto, alto ejecutivo de la banca JP Morgan a cargo del comité de operaciones en Europa y América latina; Steven Cohen, del fondo de inversiones Point72 Asset Management, y Davide Serra, directivo de la empresa de gestión de activos Algebris Inversiones.
"Ha tenido muy buen eco al cambio en la Argentina. Que realmente queramos volver a tener relaciones constructivas e inteligentes con todos los países del mundo y que realmente ninguna diferencia ideológica, ni interna ni externa evite la mejor solución para los argentinos. Este planteo más pragmático, más moderno, más del siglo XXI ha generado muy buena expectativa y hay que ir concretándola", resaltó el Presidente al llegar acompañado por su esposa, Juliana Awada y su vocero Iván Pavlovsky.
Macri, que compartirá en el Foro un panel con el titular de la OCDE, Angel Gurría, anticipó que hará un pedido formal para que la Argentina ingrese al organismo, un tema en el que, señaló, también está trabajando el ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, quien también se verá con el funcionario mexicano. El jefe de Estado estimó que el acceso a la OCDE redundará en "mayor intercambio comercial, mayor lugar para las exportaciones argentinas. Todo lo hacemos en función de mejorar las oportunidades de trabajo para la Argentina. Eso es lo que nos va a acercar al objetivo que nos trazamos de pobreza cero".
Al respecto, la OCDE advirtió que "la desigualdad de ingresos en latinamérica persiste en niveles de 65% superior al grupo de países con ingresos altos, pero también es 36% más que en naciones del Sudeste asiático y 18% que las e África Subsahariana".
"Los responsables de las políticas deben enfocarse en un concepto más inclusivo de crecimiento de la productividad. Una mejor educación, salud e infraestructura, sumadas a reformas estructurales en pro de la competencia, podrían generar un doble dividendo en términos de productividad e inclusión, de tal forma que todos en América latina se puedan beneficiar de la mayor creación de riqueza", explicó el propio Gurría, con quien Prat-Gay se reunirá hoy en busca de iniciar el proceso de adhesión a la entidad.
El presidente y ceo de Coca Cola, Muhtar Kent, le anunció al presidente, Mauricio Macri, que la empresa invertirá US$ 1.000 millones en la Argentina. El jefe de Estado y el empresario mantuvieron una reunión en el foro económico mundial de Davos.
Desde la Casa Rosada informaron que la inversión será en un plazo de cuatro años y se destinará al desarrollo de infraestructura de operación y distribución e iniciativas ambientales y de promoción de la actividad física.
Coca-Cola está presente en el país desde 1942. Su red de embotellado, comercialización y distribución emplea de manera directa a 8.500 personas e indirectamente a 6.300. Llega a más de 260.000 clientes.
Coca-Cola es la compañía de bebidas más grande del mundo, fundada en 1886. Posee más de 500 marcas, tiene cerca de 900 plantas de embotellamiento y sus productos representan el 3,3% de las bebidas consumidas diariamente en el mundo.