La empresa Isagén fue vendida a la multinacional canadiense Brookfield por 6.4 billones que equivale al 57.6 % de la participación, la subasta se realizó en la bolsa de valores de Colombia sin más oferentes. (Con venta de ISAGEN Estado dejaría de recibir 225 mil millones de pesos anuales)
La venta de la empresa se da luego que la Sección Cuarta del Consejo de Estado no atendiera las medidas interpuestas para frenar "la subasta", igualmente no se atendió las 8 tutelas presentadas por el sindicato de la empresa. La oferta se dio en medio de la indignación de hombres y mujeres que a las afueras de la bolsa manifestaban su oposición a la venta de la empresa que por más 20 tuvo como mayor accionista al Estado colombiano.
Brookfield, empresa con sede en Canadá y con un activo de más de 225 millones de dólares, maneja temas de infraestructura, sector de bienes raíces y por más de 100 años ha manejado empresas del sector hidroeléctrico en países como Estados Unidos, Brasil, Canada y ahora tendrá el control de la segunda empresa de generación de energía en Colombia, la multinacional ha estado bajo investigación en Brasil por haber pagado sobornos en la solicitud de permisos en el año 2013.
El siguiente es el perfil empresarial de la compañía canadiense Brookfield Asset Management que esta mañana se quedó con la mayoría accionaria de Isagén, al adquirir el 57,6% de las acciones que tenía el Estado en la tercera generadora más importante del país. (Documento de la Presidencia de la República).
• Fundado en 1899, el fondo de inversión Brookfield, con sede en Toronto, Canadá, fue el único oferente para la venta de Isagen. Sus inversiones están enfocadas en bienes raíces, energíasrenovables, proyectos de infraestructura e inversiones de capital privado.
• Sus activos totales alcanzaron la cifra de 203.000 millones de dólares en 2014, y sus ingresos netos fueron de 5.200 millones de dólares.
• Cuenta con 577 unidades de generación hidroeléctrica en todo el mundo, lo que representa una capacidad instalada de más de 5.300 megavatios, el equivalente a 18 veces la capacidad instalada de la represa El Quimbo.
• Sus principales inversiones se encuentran en Estados Unidos, donde cuenta con 135 unidades de generación hidroeléctrica. También ha realizado inversiones en Brasil, Chile, Perú y Colombia.
• En Latinoamérica, la sede de operaciones se encuentra en Rio de Janeiro y actualmente son los dueños de Transelec S.A., la mayor empresa de distribución de electricidad de Chile.
• En Colombia, son dueños de la Empresa de Energía de Boyacá Ebsa. La compañía fue adquirida en diciembre de 2011 por US$394 millones. Ebsa reportó ganancias y Ebitda en 2014 por US$188,7 millones y US$60,4 millones, respectivamente.
• En la historia reciente de Colombia ha habido varios procesos de adjudicación, incluso de activos en el sector eléctrico, en donde ha habido un único proponente. Ese escenario estaba contemplado en el proceso y por eso se determinó un precio base que fuera garantía para la Nación.
• Entre los ejemplos de procesos con un único proponente se encuentran Electrocosta y Electricaribe, Cerrejón Zona Norte, Empresa de Energía de Boyacá, Central Hidroeléctrica de Caldas, Empresa de Energía de Cundinamarca y Electrificadora de Santander y Centrales Eléctricas de Norte de Santander.
• El precio de venta fue de $4.130 por acción, por lo que la Nación recibirá $6,49 billones.
• El precio representa una prima de cerca del 50 por ciento sobre el precio de bolsa de diciembre pasado.
• Ese precio es un 30 por ciento superior al nivel en que se negocian empresas generadoras de energía similares en América Latina.
• El Gobierno se aseguró de obtener el mayor valor posible por la venta de su participación en Isagen. Prueba de ello es que de 10 empresas interesadas en la compra, nueve se retiraron por considerar el precio muy elevado.
• Lo recaudado por la venta de Isagen, por ley, debe ser destinado a promover e invertir en infraestructura. Según el Plan Nacional de Desarrollo el dinero debe ir a las arcas del Fondo Nacional para el Desarrollo de la Infraestructura (Fondes), administrado por la Financiera de Desarrollo Nacional (FDN).
• Para vigilar los recursos, el Gobierno pidió a los exministros de Hacienda, que representan a todas las vertienes políticas, hacer seguimiento de las inversiones producto de la venta.
Brookfield, de Canadá, es una de las empresas inversionistas en bienes raíces más grandes del mundo; además es, tras el retiro de Colbún, la única empresa en la puja por Isagén, único activo estatal en el sector eléctrico y tercera generadora del país, cuya venta se llevaría a cabo el miércoles.
La empresa extranjera, según un informe de 2012 de The Wall Street Journal, ha estado bajo investigación de la Fiscalía de Brasil debido a que en ese mismo año habría pagado sobornos para ganar permisos de construcción en 2013. No obstante, la compañía canadiense ha negado continuamente los cargos.
El argumento, fue que las denuncias que los comprometen provienen de Daniela González, quien se desempeñó hasta 2010 como directora financiera de la filial en Brasil de la compañía. El juicio contra la multinacional continuó, y en octubre de 2014 un juez brasileño desestimó el recurso de los acusados.
Asimismo, según un informe de Businesss Wair, revelado por Caracol Radio, la Comisión de Bolsa y Valores del Departamento de Justicia de Estados Unidos también tiene en la mira a la compañía canadiense por una posible violación de la Ley de Prácticas Corruptas en el Extranjero.
Isagen, cuyo valor de las acciones del Estado asciende a 6,4 billones de pesos, cerca de US$2.000 millones, tiene seis centrales de generación de energía hidroeléctrica y una térmica. En estas siete centrales se produce el 16% de la energía que el país necesita, con una capacidad instalada de producción de 3.032 MW, motivo por el que es considerada como una empresa estratégica por quienes se oponen a su privatización.
Este martes, un importante y diverso grupo de congresistas pidió al Gobierno Nacional que no venda la parte de su participación accionaria en Isagén, por lo que radicaron un recurso de insistencia ante el Consejo de Estado.