Durante el Gobierno nacional anterior, se registraron avances en el proyecto de Gasoducto del NEA, con los tramos de las provincias de Formosa, Chaco y Santa Fe. También se registró la conclusión del proyecto de ingeniería básica para Corrientes y Misiones. Para Corrientes y Misiones se hizo el llamado de obras pero no el cruce del río que es fundamental.
Pero a mediados de octubre de 2015, el Gobierno de Corrientes condicionó la habilitación de la construcción del Gasoducto del NEA en territorio provincial a la realización de obras complementarias como se prevén para las demás provincias de la región.
El planteo de Corrientes aludía en especial al último tramo licitado del Gasoducto del NEA para Corrientes y Misiones, que para el caso de Corrientes incluía sólo la construcción de conductos y ramales principales, mientras que para Misiones el Estado nacional se haría cargo de obras secundarias y complementarias en ese territorio.
Por ello, a través de la Secretaría de Energía, el Ejecutivo de Corrientes presentó ante el Instituto Correntino del Agua y del Ambiente (ICAA) objeciones técnicas al proyecto del gasoducto, con el propósito de asegurar que el abastecimiento del gas natural contemple el crecimiento residencial e industrial, como así también se prevean derivaciones para llegar con el gasoducto a la mayoría de las localidades de la provincia.
Ahora, pasado varios meses y con el cambio del Gobierno nacional, el Gasoducto del NEA sería una de las obras que se ratificaría en el marco del plan de obras para la región norte grande del nuevo Gobierno nacional.
Al respecto, desde el Gobierno de Corrientes confirmaron a Momarandu.com que se insistirán con las solicitudes realizadas anteriormente a ENARSA donde pidieron otros tramos en la provincia y el cambio de sección de caños, con incremento de diámetros de los ductos.
Los planteos de Corrientes se hicieron porque hay lugares donde la provisión de energía eléctrica es extremo o punta de línea, y en esos lugares la red de gasoducto debe tener capacidad para cubrir parte de esa demanda con generación del gas natural.
Argumentan que el actual diseño del gasoducto resulta insuficiente para garantizar un horizonte de abastecimiento razonable en la provincia, por ejemplo para sustituir el uso de gasoil para generación de energía en Santa Rosa y Esquina, ni tampoco se contempla necesidades de las localidades de Mercedes, La Cruz y Alvear, entre otras zonas de la provincia. Para el Gobierno provincial, una obra esperada por 5 o 6 décadas como el Gasoducto del NEA, debe tener un horizonte de abastecimiento de varias décadas.
Desde la secretaría de Energía de la vecina provincia señalaron que insistirán ante el nuevo gobierno nacional con las objeciones técnicas al proyecto del Gasoducto del Nea que ya habían planteado el año pasado al gobierno de Cristina Kirchner. Aseguraron que de no cumplirse con los cambios que piden, no otorgarán la autorización de viabilidad ambiental necesaria para que el ducto atraviese Corrientes y llegue a Misiones.
Los planteamientos de Corrientes habían sido formulados oportunamente por el propio gobernador Ricardo Colombi, quien se mostró disconforme con varios aspectos del proyecto del Gasoducto del NEA al tiempo que el área de Energía de dicha provincia presentó una serie de “objeciones técnicas” que desde octubre del año pasado mantienen demoradas las gestiones necesarias para que se puedan concretar las obras.
El mandatario consideró que tal como está planteado el Gasoducto, Corrientes es discriminada porque para esa jurisdicción se proyecta la instalación del conducto central pero no las obras secundarias y complementarias que sí se contemplan para Misiones y Chaco. En tanto que la secretaría de Energía de Corrientes presentó al Instituto Correntino del Agua y del Ambiente (ICAA) una serie de objeciones al proyectado gasoducto al considerar que “las secciones definidas para el suministro de gas natural a algunas localidades de la provincia resultan insuficientes para garantizar un horizonte de abastecimiento razonable”.
Plantean la necesidad de incrementar el diámetro del caño de vinculación al troncal que cruzará el río Paraná y de caños subtroncales y agregar tramos hasta Gobernador Virasoro y Mercedes por tratarse de “localidades de alto desarrollo industrial” y a Alvear y La Cruz en la costa del río Uruguay y San Miguel en la zona del centro de la provincia.
Tras el cambio de signo en el gobierno nacional, desde Corrientes confirmaron que se insistirán con las solicitudes realizadas anteriormente a ENARSA donde pidieron otros tramos en la provincia vecina y el cambio de sección de caños, con incremento de diámetros de los ductos.
Corrientes tiene un antecedente en materia de conflictos con la Nación por obras de infraestructura en su territorio. Se trata del tendido eléctrico de 500 kv entre Yacyretá y Resistencia, proyecto que Corrientes se negó a autorizar si en paralelo no se realizaba un tendido en territorio provincial.
El planteo es similar al que ahora formulan en relación al Gasoducto y en aquella oportunidad, la Nación debió financiar la construcción de los tendidos secundarios dentro de Corrientes para que esta provincia accediera a otorgar los permisos para que se erigiera el tendido de 500 KV.