Roberto Aguirre
El futuro de Vaca Muerta está en el gas. La frase parecía sólo una expresión de deseo cuando el barril de petróleo superaba los 100 dólares, pero la abrupta caída de más del 50% en pocos meses obligó a cambiar de perspectiva.
Rápidas de reflejos -y acaso esperando un mejor precio de parte del nuevo gobierno nacional- las empresas empezaron a mudar sus inversiones a activos de gas. Según informaron a "Río Negro Energía" desde la Subsecretaría de Hidrocarburos de la provincia, cuatro de los cinco proyectos que se vienen en la formación estrella neuquina estarán orientados a este tipo de hidrocarburo.
YPF, Total, Shell y Petrobras ya preparan los papeles para conseguir concesiones de 35 años y lanzar pilotos no convencionales en la "media luna rica" de Vaca Muerta, una zona donde se produce gas húmedo.
En el gobierno neuquino aguardan novedades sobre estos compromisos para el año que comienza, aunque creen que las definiciones podrían estirarse para el segundo semestre, cuando las dos variables centrales para este tipo de inversiones, el precio del recurso y el tipo de cambio, estén acomodadas.
La petrolera bajo control estatal pone todas sus fichas a los bloques La Ribera I y II. Allí, a mediados del año pasado, anunció el descubrimiento de shale gas. Aunque la producción inicial estuvo dentro de lo esperado, lo más interesante es el espesor de la formación Vaca Muerta en algunos segmentos del bloque, que supera los 258 metros.
El yacimiento, ubicado a 25 kilómetros de Añelo, linda con Rincón del Mangrullo, un bloque donde YPF explota tight gas junto a Pampa Energía. Esta cercanía permitirá aprovechar la infraestructura ya instalada al menos en la etapa inicial de proceso
Además de La Ribera, YPF tiene expectativas de lanzar algún proyecto en el yacimiento Loma Amarilla, donde hubo muy buenos resultados de shale oil en dos pozos exploratorios. Pero estos bloques son más "difíciles" de vender por la situación del petróleo. De hecho, la empresa aún no consiguió un socio de peso para meterse de lleno en Bajada de Añelo, un bloque en el cual todavía no hubo actividad de peso.
Mueven las privadas
Las empresas privadas también apostarán al gas. La francesa Total es la petrolera que más buceó en las profundidades de Vaca Muerta después de YPF y ahora, con la expectativa de un mejor precio, espera consolidar sus proyectos.
En Aguada Pichana, su bloque insignia, la francesa tiene varios proyectos en carpeta dentro de la vasta geografía. Uno de ellos es un piloto de shale gas que en la práctica ya comenzó, bajo el actual permiso de concesión que posee. Sin embargo, la empresa evalúa presentar un proyecto para conseguir 35 años de permiso y poder consolidar una etapa de desarrollo, que no vislumbran como lejana.
Tal como publicó este medio semanas atrás, Total conectó varios pozos shale en los últimos meses con muy buenos resultados.
Además de Aguada Pichana, la francesa también apuesta a una concesión "larga" para Rincón de la Ceniza y la Escalonada, otro bloque de gas donde es socia de Shell y de la estatal GyP. Aquí también largaron una suerte de piloto donde prometieron invertir unos 300 millones de dólares para hacer sísmica 3D e instalaciones de superficie. Los pozos también arrojaron buenos resultados.
El más singular de los proyectos de gas apenas mira de reojo a Vaca Muerta y apuesta a las columnas de tight. Se trata de Río Neuquén, un bloque estrella de Petrobras donde ya se lanzó un plan de inversiones que avanza con piloto automático. La empresa brasileña también aspira a conseguir una concesión no convencional en medio de un plan de desinversión que podría postergar esa medida. Allí prometieron invertir unos 280 millones de dólares para hacer quince pozos entre el 2015 y el 2017.
Lo llamativo de este bloque, un vecino de Lindero Atravesado de PAE, son las características de la formación Punta Rosada, una columna de casi 1.000 metros de ancho que se ubica adentro de Lajas, la capa tight por excelencia. Los especialistas creen que, por esta condición, podrá ser perforada con pozos verticales, lo que bajaría sensiblemente los costos.
Lo que sobra
Según datos del gobierno neuquino, son once los proyectos no convencionales que hay en la provincia. Y esos once proyectos prometen inversiones totales por 100.000 millones de pesos en las próximas décadas, una cifra sideral.
Gracias a estas aventuras shale y tight, la provincia pudo consolidar sus valores totales, torciendo la curva negativa que ostentaba desde mediados de la década pasada. El no convencional representa hoy el 34% del total de gas y el 22% del petróleo que sale de las entrañas de la provincia.
Pero además de destacar lo que hay, en el Ejecutivo remarcan lo que sobra. Es que estos once proyectos, que están en distintas etapas pero que aun así movieron el amperímetro, se ubican sobre el 8,6% de la superficie de que ocupa Vaca Muerta.
Es decir que, al menos en esta dimensión 2D, todavía queda formación de sobra.
El recurso está, lo que aún no está claro que cuánto valdrá. La expectativa de las empresas es que se sincere el costo del gas y se traslade a la tarifa. El ministro de Energía Juan José Aranguren dio señales en ese sentido.
En el sector especulan con que podría unificarse el precio a un valor que ronde los 4,50 dólares el millón de BTU, 1,50 dólares más que el promedio actual.
También creen que podría mantenerse el Plan Gas que lleva el valor a 7,50 dólares vía subsidios. Lo que no se sabe es si esa diferencia la seguirá poniendo el Tesoro vía aportes del Estado o también se ponderará en una tarifa única, lo que inevitablemente subirá el precio.