El uranio se ha convertido en el producto básico de minería con mejor desempeño durante el 2015.
El metal que alimenta los reactores nucleares ha estado recuperando gradualmente de una fuerte caída tras la estela de la japonesa Fukushima en 2011, y los analistas esperan que el producto continúe dando grandes ganancias a los inversores en 2016, ya que los precios se perfilan para seguir subiendo, señaló Reuters.
Según Credit Suisse, los precios del uranio lugar ganarán en 2016 a un promedio de US$ 40 por libra, antes de llegar a US$ 45 en 2017, US$ 50 en 2018 y US$ 60 por libra en 2019.
Los analistas estiman un superávit en el mercado global de 20 millones a 27 millones de libras en 2015, aunque es probable que caiga a entre 7,5 millones y 10 millones en 2020.
Los expertos estiman que alrededor de 150 millones de libras de uranio se han consumido en el año 2015, según datos de la World Nuclear Association.
Los ponósticos sobre la demanda que habrá a partir del 2016 son prometedores.
Las centrales nucleares actualmente proporcionan alrededor del 11% de la electricidad del mundo, pero la proporción es probable que aumente a medida que China y la India a ampliar sus capacidades, señaló The Globe and Mail.
El gran país asiático, tratando de reducir su dependencia del carbón contaminante, planea construir seis a ocho centrales nucleares al año durante los próximos cinco años, y la India tiene como objetivo generar 25% de su electricidad a partir nuclear para el año 2050, por encima del 4% en 2013.
Mientras tanto Japón está reiniciando cuatro reactores, lo que puede acelerar el retorno del país a la energía atómica.
Kazajstán, el mayor productor de uranio del mundo, acaba de firmar acuerdos de cooperación con empresas chinas para construir una planta de combustible nuclear.
En tanto, Cameco, la minera canadiense de uranio más grande del mundo, firmó un contrato de cinco años para suministrar los reactores nucleares de la India.