La propuesta de compra para BG Group por parte de su rival Royal Dutch Shell por 53 mil millones de dólares funcionará incluso si los precios futuros del petróleo se sitúan en la parte baja de 60 dólares por barril, informó la empresa angloholandesa.
Shell, que anunció también otro recorte de cinco millones de dólares de gastos el próximo año, había dicho antes que el umbral de rentabilidad del acuerdo era de 65 dólares el barril.
La compañía hizo público el martes el prospecto para sus accionistas, fijando el 15 de febrero como la fecha límite para culminar el acuerdo, el mayor en el sector energético en una década y que ayudó a que 2015 sea un año récord para las fusiones y adquisiciones.
Los accionistas de ambas compañías votarán el acuerdo en reuniones del 27 y 28 de enero. Algunos grandes accionistas ya hicieron público su apoyo al pacto, aunque otros se mostraron preocupados de que Shell pueda estar pagando un sobreprecio tras una caída de más de 35 por ciento en el precio del crudo desde que se anunció el acuerdo en abril.
El crudo Brent está cerca de mínimos de 11 años, de unos 36 dólares por barril, y analistas sondeados por Reuters prevén un precio promedio de 57.95 dólares en 2016.
"Respaldamos el acuerdo desde una perspectiva estratégica. Tiene mucho sentido unir ambas compañías", dijo a Reuters Ben Ritchie, director de inversiones de Aberdeen Asset Management, destacado inversor tanto en Shell como en BG.
Shell recortó en dos mil millones de dólares su plan de gasto de capital para el grupo combinado el próximo año, hasta 33 mil millones,y sus costos operativos en otros tres mil millones, argumentando que esto podría mejorar su capacidad de capear la desaceleración en el sector y mantener el pago de sus dividendos.