Argentina debe  a Bolivia las facturas de dos meses  del envío de gas natural. La obligación suma alrededor de 300 millones de dólares, informó ayer el ministro de Economía, Luis Arce. La autoridad espera la regularización de los pagos, para no tener que cerrar válvulas.

"Tenemos un contrato firmado y si no se cumple,  el Estado boliviano tiene la opción de tomar acciones. Nos deben dos facturas, pero están  dentro del periodo de tolerancia, de acuerdo con el contrato; si entrara un tercer mes, tendríamos que actuar con más contundencia”, aseguró Arce.

Según  sus cálculos, el monto adeudado es de alrededor de 300 millones de dólares; atribuyó la mora en el pago  al cambio  de Gobierno. El actual presidente argentino, Mauricio Macri, asumió  el 10 de diciembre.

"Tendrán que ponerse al día; si ya se vence el periodo tendremos que asumir algunas medidas. El Gobierno argentino tiene  ese respiro que, me imagino, estará calculando, porque el hecho de que nosotros podamos cerrar válvulas, o tomar algunas medidas, puede tener un efecto mucho más grave en la economía argentina”, afirmó.

El analista en hidrocarburos, Hugo del Granado,  afirmó que el mercado argentino, a partir de enero  de este año, ha incurrido en mora en el pago. Por mes, cancela entre 250 y 280 millones de dólares al país.

"Sabemos que ya pagó hasta junio; es decir, que debe del tercer trimestre -julio, agosto y septiembre- porque hay  un tiempo de gracia. Pero eso puede ser parte de una jugada política del anterior gobierno de Argentina para dejar al actual con deudas”, opinó el especialista.  

En su opinión, ante la falta de pago, al Estado le queda solicitar amistosamente que se respete el contrato, pero en  caso de incumplimiento, tras el tiempo de espera, se pueden ejecutar las boletas de garantía.

 El 15 de diciembre, el ministro de Hidrocarburos, Luis Alberto Sánchez, aseguró que estos retrasos no contravienen el contrato binacional y tampoco suceden por primera vez.

Un reporte del sitio web argentino lapoliticaonline.com, del pasado 12 de diciembre, reveló que YPFB envió a la estatal  Energía Argentina S.A. una carta en la cual exige el pago de la deuda acumulada, que es superior a los 300 millones de dólares, que corresponden a los envíos de combustible registrados en los últimos cuatro meses, según ANF.

La carta está fechada el 9 de diciembre, un día antes de que Mauricio Macri asumiera la presidencia argentina.  
 
El contrato de compraventa de gas natural entre YPFB y Enarsa fue suscrito en enero de 2007 y tiene vigencia hasta  2027.

Establece el envío de un volumen inicial de 7,7 millones de metros cúbicos al día (MMmcd) durante los tres primeros años, con laposibilidad de crecer en función de las ampliaciones de gasoductos en ambos países. En 2027, en el último año del convenio, el volumen máximo llega a  27,7 MMmcd.  

El precio de exportación  para este trimestre llegó  a 4,8 dólares por millón de BTU. Se prevé que bajará en 2016.