En los primeros nueve meses del año, la producción de acero crudo exhibió una caída de 7,8% interanual. Y se estima que el año concluirá en torno a las 5,1 millones de toneladas fabricadas, un 6,8% menos que en 2014. El contexto internacional continúa resultando adverso para la actividad. La desaceleración de la economía china y los efectos de la caída del precio de petróleo mantienen el bajo dinamismo de la demanda global de acero, agudizando los excedentes de oferta y la caída de precios.
En tanto, la producción de laminados acumuló un retroceso de 9,8% entre enero y septiembre de 2015. El comportamiento de la actividad ha tenido un comportamiento heterogéneo a nivel de productos, en función de los sectores demandantes. Las ventas de tubos sin costura para el sector petrolero cayeron abruptamente ante el retroceso de las inversiones en hidrocarburos, tanto a nivel global como local. Ello condujo a que la producción de aceros largos se contraiga un 17,3% en los primeros nueve meses del año.
En particular, las exportaciones de tubos sin costura se redujeron a la mitad durante 2015. El deterioro de la competitividad de la industria argentina, en un contexto de menor demanda global, sobrecapacidad productiva en China y agudización de la competencia internacional, acentúa la dinámica contractiva de los envíos al exterior, que en el acumulado a septiembre exhibió una caída interanual en cantidades de 63,0%.
En cambio, la situación del mercado interno se presenta más favorable que el frente externo. Las ventas domésticas de aceros laminados acumulan una leve caída de 3,5% en lo que va del año, con un aumento de 6,6% en los planos y una caída de 14,1% en los largos, respondiendo al desempeño heterogéneo de los distintos sectores de actividad. El mejor comportamiento relativo del mercado interno responde a la recuperación evidenciada por determinados sectores, principalmente los ligados al consumo durable (productos de línea blanca) y la construcción, si bien otros como el automotriz continuarán traccionando a la baja.
En cuanto a los precios internacionales, se espera que la tendencia descendente se mantenga el resto del año.Influido principalmente por la menor demanda global, los precios de los productos de acero ajustaron a la baja hasta el mes de julio un 37,0% interanual. De todos modos, la industria encuentra un alivio en la baja de los precios de su principal insumo, el mineral de hierro, que a julio de 2015 se redujo 20,0% interanual.
Para el año próximo se prevé que la actividad siderúrgica se mantenga en niveles similares o levemente inferiores a 2015, en línea con la actividad económica en general. Por el lado externo, la persistencia de precios del petróleo no mayores a los USD 50 por barril continuará frenando las inversiones, por lo que no se espera una reacción de las exportaciones de tubos sin costura. Mientras tanto, en el plano interno, las expectativas a la baja para el sector automotriz y de línea blanca de electrodomésticos afectaría la demanda de laminados planos. La construcción, en tanto, sufriría una contracción durante la primera mitad de año, aunque iniciaría su recuperación hacia el segundo semestre, ayudada por el shock de expectativas en torno al nuevo Gobierno y las señales de corrección de las inconsistencias macroeconómicas.
Producción local de acero crudo. En miles de toneladas y var % a/a
