Por tercer mes consecutivo las exportaciones chinas de acero a Estados Unidos cayeron. El descenso acumulado durante este peiodo fue de 75.6 por ciento, equivalente a 195 mil toneladas, según el Buró de Censos estadounidense.
Todavía en julio pasado, China colocó 258 mil toneladas de acero en el mercado de la Unión americana, para octubre, el país asiático sólo pudo vender 63 mil toneladas, el más bajo nivel desde marzo de 2011.
En términos mensuales, la caída del décimo mes fue de 52 por ciento.
Ante los bajos precios del material chino, acereros que integran el TLC de Norteamérica han pedido que se cierre las puertas al acero del país asiático, pues ya ha afectado al mercado de occidente.
Estudios realizados por economistas pertenecientes al Capital Trade Incorporated, en Washington, al Centre for Spatial Economics, en Canadá, y al IMCO, en México, concluyeron que tratar a China como una economía de mercado en investigaciones antidumping crearía un daño “severo” a las industrias siderúrgicas y a las economías pertenecientes al TLCAN.
“China sigue siendo una economía regida por el Estado y no opera de acuerdo a los principios de mercado; aun así argumenta que debería ser tratada como una economía de mercado, ya que cumple en diciembre del 2016, 15 años de su inclusión en la OMC”, señalaron las asociaciones.
“Otorgar el estatus de economía de mercado a China es prematuro y llevaría a una significativa pérdida de empleos en el sector siderúrgico, en el cual las plantas están siendo paralizadas y los trabajos están disminuyendo, lo que es inaceptable”.
El precio del acero de la nación asiática es inferior en 31.5 por ciento al operado en Nueva York, es decir, la tonelada en el mercado chino se encuentra en mil 829 yuanes, similares a 286 dólares, mientras que en la plaza estadounidense es de 376 dólares.
Mientras tanto, las ventas de acero de México a Estados Unidos se incrementaron 1.9 por ciento en octubre, con lo que se ubicaron en 222.6 mil toneladas. Los envíos mexicanos representan el 8.2 por ciento del total de compras estadounidenses de acero, superior al 2.3 por ciento que representan las ventas de China.
La industria siderúrgica de Brasil, la principal de Latinoamérica y una de las diez mayores del mundo, producirá este año 33.2 millones de toneladas de acero, lo que significa un 2,0 % memos que en 2014, según las previsiones divulgadas hoy por la patronal del sector.
Con esa reducción se busca adaptar la producción a la fuerte caída de las ventas internas, que se encogerán un 16,3 % este año, hasta 18,2 millones de toneladas, como consecuencia de la recesión que enfrenta el país, según el Instituto Acero Brasil (IABr).
La patronal calcula en 2016 habrá una caída de la demanda del 4,0 %, hasta 17,4 millones de toneladas.
"Vivimos la peor crisis en la historia de la siderurgia brasileña", afirmó el presidente ejecutivo del IABr, Marco Polo de Mello Lopes, en una rueda de prensa en Río de Janeiro.
Las exportaciones, sin embargo, aumentaron un 36,2 % hasta 13,3 millones de toneladas, impulsadas por la fuerte devaluación del real brasileño frente al dólar, al punto que los ingresos brasileños por exportaciones de acero, pese al aumento del volumen embarcado, bajaron un 1,5 % en relación a 2014.
La recesión, en cambio, hundió las importaciones, que terminarán el año con una caída del 16,9 % en volumen y un 22% en valor, según las previsiones de la patronal.
De acuerdo con De Mello Lopes, la crisis obligó al sector a despedir a 21.786 trabajadores en los dos últimos años y a paralizar o desactivar 40 unidades de producción.
El dirigente alegó que, además de la recesión en Brasil, el sector fue afectado por el excedente de capacidad de producción de acero en el mundo, de cerca de 700 millones de toneladas, de las cuales 400 millones de toneladas en China, y por un mercado que ofrece importaciones baratas y prácticas desleales de comercio.
Según el presidente de la IABr, los productores brasileños están compitiendo en el mercado mundial con empresas que reciben elevados subsidios en China, país que consiguió elevar sus exportaciones desde 90 millones de toneladas en 2013 hasta 130 millones de toneladas este año.
El dirigente afirmó que la participación de China en las exportaciones mundiales de acero saltó desde el 1,3 % en 2000 hasta el 52 % este año.
En cuanto a la demanda interna, alegó que la recesión que enfrenta Brasil afectó principalmente los sectores automotor, construcción civil y máquinas y equipos, que son responsables por el 80 % del consumo de acero en el país.
Los analistas prevén que la economía brasileña, que creció un 0,1 % el año pasado y entró en recesión en el primer semestre de este año, sufrirá una contracción del 3,15 % en 2015 y del 2,01 % en 2016.
