Cristina Fernández tiene previsto encabezar cinco actos públicos institucionales en los próximos 10 días hábiles, con otros tantos discursos que tendrán un fuerte contenido político.
El último de ellos será el 9 de diciembre próximo, cuando hará una despedida final en la Casa Rosada, el día previo al traspaso del mando.
Cabe recordar, que la planta dedicada al enriquecimiento de uranio fue reinaugurada a través de un plan del gobierno nacional y la propia presidenta encabezó una visita allí el 25 de octubre de 2010.
Las instalaciones del CTP, dependiente de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), fueron reactivadas en el marco del relanzamiento del Plan Nuclear Argentino, que se realizó en noviembre de 2006. La misma está ubicada en Pilcaniyeu, a unos 45 kilómetros de Bariloche.
La presidenta ha defendido en varias oportunidades la labor de la planta, incluso en el acto mencionado aseguró que "estamos devolviendo a nuestro país un derecho al que nunca debimos haber renunciado, como es manejar recursos estratégicos de carácter nuclear".
La mandataria indicó que este desarrollo "había sido abandonado, por no decir capitulado, en la década de los 90" y agregó que "se había renunciado a un país con desarrollo estratégico nuclear", a pesar que Argentina "ha garantizado el uso pacífico de este elemento".
El Complejo Tecnológico Pilcaniyeu cuenta con una superficie cubierta de casi 30.000 metros cuadrados. Allí se enriquece uranio a través del proceso de difusión gaseosa, manteniendo y mejorando las condiciones operativas.
El uranio, para ser utilizado en reactores de potencia, se lo lleva a una concentración isotópica que puede estar entre el 0,85 y 5 por ciento para el U235.
El reacondicionamiento y actualización de las instalaciones del complejo se hizo dentro del marco de la adhesión al uso pacífico de la energía nuclear y del cumplimiento de los tratados internacionales garantizados por el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).