El Gobernador electo asegura que las actividades extractivas son las más demandas para invertir. Pérez le da el visto bueno a la “reconversión” de San Jorge.
Las actividades extractivas, como el petróleo y la minería, seguirán en la agenda económica de Mendoza, tanto por la “herencia” que dejará Pérez como las intenciones de Cornejo. El Gobernador electo cree que allí puede haber una oportunidad para revertir “la curva descendiente de la economía mendocina”. Dentro de su esquema productivo, Cornejo cree que la exploración y extracción de petróleo y gas serán fundamentales, pero no le cierra la puerta a la minería y asegura que “está abierto” a analizar proyectos que sean reformulados.
En ese caso hay un punto en común con el actual gobernador. Francisco Pérez le dio el visto bueno, por ejemplo, al rediseño del proyecto minero San Jorge, para extraer la roca y procesarla en San Juan. Según dijo a Diario Vox, en su paso por Estados Unidos, los grupos interesados en invertir en Mendoza resaltaron a Cornejo la necesidad de que el Gobierno avance en un sistema de promoción de las actividades extractivas. “Hay mucho interés en invertir en tecnología para la exploración de gas, donde las reservas son mayores y las posibilidades extractivas son muy lucrativas”, ahondó. “Hay proyectos que ni siquiera usan agua y han sido descartados por la opinión pública”.
Sobre la minería, Cornejo pide “un cambio de mirada, sin posturas tajantes ni fanatismos”, que permitirá rever algunos proyectos descartados en los últimos cuatros años, además de otros nuevos. “Es una actividad lícita y no hay que estar cerrada a nada”, confesó a Diario Vox en la cena de la Cámara de la Construcción. Y agregó que se atenderá a aquellos casos, “siempre y cuando sean proyectos viables con el medio ambiente y el uso del agua”. “Hay proyectos que ni siquiera usan agua y han sido descartados por la opinión pública”, resaltó y adelantó que propiciará una “discusión madura sobre la matriz productiva de la provincia, basada en la capacidad de sus recursos naturales, de una manera sustentable y equilibrada”. De esta manera, abre el camino para que nuevos proyectos extractivos avancen en las etapas de validación técnica, necesarias para ser tratado en la Legislatura. Pero no serán los únicos, ya que quedará una puerta abierta para todos aquellos proyectos como San Jorge, que en estos años atravesaron por un proceso de reconversión y reformulación de objetivos.
El Proyecto San Jorge está en proceso de “aprobación” en el Gobierno. Pérez le dio el visto bueno político y podría tener la firma antes de que deje el cargo. Incluso la empresa tuvo un cambio en el directorio y los rusos tomaron el comando operativo de las negociaciones. Cornejo no habló específicamente de ese proyecto, pero no cerró la puerta. “Habría que ver la viabilidad de los que están en proceso de reconversión”, reiteró. El debate planteado por Cornejo sobre la minería llega en un momento clave. Se espera que durante los primeros días de diciembre, cuando él asuma, la Suprema Corte defina si la ley 7722, que restringe la minería, es constitucional o no.