La Política Online
Cristina Kirchner extendió hoy las sesiones ordinariashasta el 9 de diciembre con el objetivo de sumar nuevos cargos para La Cámpora, nombrar jueces afines y crear una sociedad del Estado con Yacimientos Carboníferos de Río Turbio (YCRT) que le permita sumar a los trabajadores.
Este último proyecto ingresó el viernes a Diputados, aún está dando vueltas por los despachos y según pudo averiguar LPO sería una jugada de la presidenta para meter en la empresa a sindicatos afines
“El kirchnerismo hace tiempo que está con eso. Sería terminar la intervención y unificar los yacimientos con la usina eléctrica que aún no comenzó a funcionar”, sostuvo a LPO un legislador que ojeó la iniciativa.
El plan de Cristina es que el Senado y Diputados sesionen la semana siguiente a las elecciones y si es posible despache todos los proyectos que le interesan.
Aunque no haya sesiones en diciembre debió extender las ordinarias porque de lo contrario las comisiones no podrían emitir dictámenes entre el 20 y el 30 de noviembre
No será tan fácil juntar quórum. Los gobernadores no toleraron la escandalosa sesión de Diputados que nombró a dos camporistas como auditores generales y demoraron la sesión. Nadie puede garantizar cómo se manejarán después del 22
En el Senado la idea de Miguel Pichetto es armar una sesión el miércoles 25, cuando por la mañana deberán abrir el recinto para que juren los electos el un mes antes. Será la excusa para que los suyos viajen.
La presidenta no se rinde. La semana pasada envió 15 pliegos de jueces afines y los quiere aprobados antes de irse.
Y exigirá que la Cámara alta sancione la ley de Juventud, que crea cinco nuevos organismospara darles más trabajo a los militantes de La Cámpora. Urgencias de estas semanas.
La presidenta buscará además aprobar las cuentas de inversión de 2014. En los últimos meses Cristina empezó a temerle a la revisión de sus números: ordenó aprobar las cuentas de 2012 y 2013 y tensó su relación al límite con los gobernadores para nombrar a los amigos de su hijo en la AGN.
No faltarán los clásicos ascensos militares de fin de año en el Senado , necesarios para que puedan trasladarse junto a sus familias.
Otros proyectos en danza son la ley de hábitat, enviada por Cristina y aprobada en Diputados; y hay quienes se animan a apurar el digesto jurídico, un trabajo de dos años para comprimir la legislación nacional.
Esta síntesis trabajo algunas polémicas como la supresión de la primera ley de educación que obligaba a una enseñanza laica, artilugio usado por la Iglesia para promover la instrucción católica en colegios de Salta. Nadie sabe si conviene terminar el Gobierno con esa polémica.
Es literal: Cristina Kirchner quiere que el Congreso vote sus leyes hasta el último día de su mandato. De manera sorpresiva, el Poder Ejecutivo publicó ayer en el Boletín Oficial el decreto 2329 que prorroga las sesiones ordinarias hasta el próximo 9 de diciembre, es decir hasta exactamente un día antes del recambio presidencial. El período ordinario concluye el 30 de noviembre, pero con los 9 días extra la Casa Rosada se aseguraría la aprobación de 15 nombramientos en el Poder Judicial que acaban de ingresar en el Senado y también una serie de ascensos en las Fuerzas Armadas y en la Cancillería.
Uno de los temas más polémicos que busca apurar la Presidenta en el Senado es la aprobación de los dos pliegos que envió para cubrir la vacante de Eugenio Zafarroni en la Corte Suprema y la que se producirá el 11 de diciembre, fecha en la que Carlos Fayt dejará el Máximo Tribunal. Los tiempos no dan para concluir el proceso y la oposición ya avisó que –de todos modos– no facilitaría los dos tercios que se necesitan y que el FpV no alcanza. Sin embargo, el kirchnerismo les daría estado parlamentario a las candidaturas a fin de condicionar al próximo gobierno.
La prórroga también le dará tiempo para aprobar la ley de promoción de juventudes, impulsada por La Cámpora y que crea cinco organismos estatales en los que la tropa K se aseguraría trabajo después del 10 de diciembre. A coro, la oposición salió a rechazar la prórroga. “Es una caja de Pandora”, dijo el diputado radical Mario Negri (ver pag. 5). Ya se había levantado polémica con otros proyectos que abren espacio a la militancia oficial y, sobre todo, el que designó a dos camporistas en la Auditoría, el miércoles, cuando la oposición se retiró antes de la jura (ver pág. 5).
El bloque oficialista de Diputados, por otro lado, se propone aprobar en su próxima sesión –el miércoles 25– la creación de un Instituto de Presupuesto de la Cámara baja. La iniciativa prevé para ese organismo un presupuesto de 12 millones anuales y la contratación de 24 profesionales rentados. Mañana, además, la Comisión de Presupuesto del Senado se propone dar dictamen a un proyecto de creación de la Oficina de Presupuesto del Congreso. La diferencia es que sería bicameral. La comisión también analizará un proyecto del diputado ultra K Carlos Kunkel que ya tiene media sanción para crear la Universidad Nacional Raúl Scalabrini Ortíz en San Isidro.
El jueves pasado, la Casa Rosada había enviado al Senado un listado pidiendo acuerdo para las designaciones en el Poder Judicial de un camarista, 9 fiscales y 5 defensores oficiales. Varios de los postulantes, como Alejandro Alagia, propuesto para fiscal de la Cámara de Casación Penal, y Gabriel de Vedia, impulsado para fiscal en la Cámara Nacional de la Seguridad Social, están identificados con la agrupación K “Justicia Legítima”. Pero por los plazos reglamentarias era imposible que esos pliegos consiguieran su acuerdo correspondiente antes de la finalización del período ordinario de sesiones.
Con la prórroga, esos plazos se podrán cumplir, aunque habrá que ver si los senadores oficialistas terminan cumpliendo con los deseos de Cristina a tan escasos días de que finalice su administración. Es que esos pliegos recién se podrían estar aprobando en una eventual sesión a realizarse el 2 o el 9 de diciembre. Ayer se decía que desde el regreso de la democracia nunca el Senado sesionó un día antes de un recambio presidencial.
La próxima sesión del Senado está prevista para el próximo miércoles 25, cuando obtendrían estado parlamentario estos 15 pliegos con nombramientos para el Poder Judicial más los de ascensos de militares y de embajadores, que serían enviados por el Ejecutivo en las próximas horas. “Con los de las Fuerzas Armadas y Cancillería seguramente no habrá problemas, pero habrá que ver que hacemos con los de los jueces. Yo no estaría tan seguro de que se les dé acuerdo a todos”, dijo anoche a Clarín un senador del FpV.
En esa sesión, el oficialismo deberá cumplir con otra demanda de la Presidenta: retirar el pliego de Roberto Carlés para la Corte y dar ingreso a los dos nuevos postulantes de la Casa Rosada: Domingo Sesín y Eugenio Sarrabayrouse. Una eventual administración macrista deberá negociar con los senadores peronistas para el retiro de estos dos pliegos: para hacerlo necesitará el voto de una mayoría de 37 senadores, un número inalcanzable para Cambiemos.
Diputados también tendría una sesión más en los primeros días de diciembre. La Secretaría Parlamentaria de esa cámara solicitó en las últimas horas a los diputados del Frente para la Victoria que les informen que proyectos tienen interés que se traten en esa hipotética sesión.