Royal Dutch Shell reportó el jueves una fuerte caída en sus ganancias del tercer trimestre debido a los bajos precios del petróleo y un cargo de 8.200 millones de dólares que incluye amortizaciones en Alaska y Canadá.
Las ganancias recurrentes CCS excluyendo ítemes identificados de Shell, la definición de utilidad neta de la compañía, cayeron a 1.800 millones de dólares en el tercer trimestre desde 5.850 millones de dólares en el mismo período del año anterior y desde 3.835 millones de dólares en los tres meses anteriores.
Las utilidades también incumplieron las expectativas de los analistas de 2.740 millones de dólares, según un sondeo de Reuters.
Shell mantuvo su dividendo en 47 centavos de dólar por acción.
"Estos cargos reflejan tanto una perspectiva más baja del precio del petróleo y el gas como las medidas firmes que estamos adoptando para revisar y reducir el conjunto de opciones a largo plazo de Shell", dijo el presidente ejecutivo Ben van Beurden en un comunicado.
"Estas son decisiones difíciles, pero que tendrán impacto. Estoy decidido a que Shell se convierta en una empresa más centrada y competitiva como resultado", agregó.