El Gobierno dispuso la expropiación de una serie de inmuebles y terrenos ubicados en la ciudad bonaerense de Lima, en el partido de Zárate, para construir allí la cuarta central nuclear a cargo de la empresa Nucleoléctrica Argentina Sociedad Anónima (NASA)
La medida fue dispuesta a través del decreto 2197/2015, publicado hoy en el Boletín Oficial, que designa a la empresa como sujeto expropiante y al Tribunal de Tasaciones de la Nación como organismo que estimará el valor de los inmuebles a expropiar.
En el lugar actualmente ocupado por los inmuebles y terrenos a expropiar se "construirá, conservará y explotará la cuarta central de uno o dos módulos de energía de fuente nuclear", indica la norma.
El carácter de expropiante de Nucleoelétrica la faculta para promover los respectivos juicios de expropiación y tomar posesión de los bienes expropiados.
El financiamiento de los gastos de la expropiación será atendido dentro del presupuesto destinado por la empresa para el proyecto de la cuarta central nuclear.
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El presidente de la estatal Nucleoeléctrica, José Luis Antúnez, destacó ayer el decreto de expropiación de terrenos e inmuebles en la localidad bonaerense de Lima para construir la Cuarta Central Nuclear argentina. El martes, a través del decreto 2197/2015, el gobierno nacional dispuso la expropiación de terrenos e inmuebles que permitirán iniciar las obras. “Este evento es un elemento esencial para iniciar próximamente las obras en el sitio. Se trata de uno de los pasos previstos en el programa del proyecto y un evento fundamental que permite proseguir con el desarrollo de los siguientes hitos y la concreción de la nueva instalación”, expresó Antúnez.
Atucha III será un reactor de uranio natural y agua pesada con una potencia de 760 megavatios (MW). No se construirá otro reactor como los de Atucha I y II porque es un diseño desarrollado por la alemana Siemens, empresa que se retiró de la actividad nuclear, lo que obligó al gobierno argentino a hacerse cargo de la terminación de la segunda central a través de la firma Nucleoeléctrica. Descartado Siemens, el único desarrollador de reactores de uranio natural con agua pesada es Canadá, propietario de la tecnología Candu (Canadian Deuterium Uranium), de probada experiencia a nivel mundial. La Argentina ya tiene antecedentes en el uso de la tecnología Candu. En 1973, le adjudicó al consorcio canadienseitaliano AECL Italimpianti la construcción de un reactor Candu de 600 MW en Embalse, obra que comenzó en 1974 y puso en servicio en enero de 1984. Desde entonces posee la tecnología y tiene autorización para replicarla en el país cuantas veces quiera. Lo único que requiere de los canadienses son las actualizaciones y la documentación de una central de referencia,
El 18 de julio del año pasado, el ministro de Planificación, Julio De Vido, firmó con el director de la Administración Nacional de Energía de China, Xu Xinxiong, un convenio de cooperación para la construcción de esa cuarta central nuclear que estará a cargo de Nucleoeléctrica. Ese acuerdo marco le permitirá a la Argentina obtener financiamiento a tasas bajas y plazos largos para llevar adelante la obra.
La nueva instalación se construirá en el país de acuerdo a lo establecido por el Plan Nuclear Argentino que lleva adelante el Ministerio de Planificación Federal, desde su relanzamiento en el año 2006 de la mano del ex Presidente Néstor Kirchner y consolidado por la Presidenta Cristina Fernández.
“Este evento es un elemento esencial para iniciar próximamente las obras en el sitio. Se trata de uno de los pasos previstos en el programa del proyecto y un evento fundamental que permite proseguir con el desarrollo de los siguientes hitos y la concreción de la nueva instalación”, expresó Antúnez.
El Decreto dispone la expropiación de los terrenos lindantes al Sitio Atucha para la construcción de la Cuarta Central Nuclear, en virtud de lo dispuesto por el artículo 9° de la Ley N° 26.566.
La próxima central contará con una potencia de aproximadamente 750 megavatios, y su construcción tendrá una alta participación de los sectores productivos argentinos, generando empleo para más de 7 mil trabajadores.
“La finalización de Atucha II más allá del importante aporte energético y las grandes dimensiones técnicas del proyecto, representó la recuperación de las capacidades nacionales para el diseño y construcción de centrales nucleares de potencia. Esta realidad, sumada a la experiencia acumulada gracias a la exitosa operación de Embalse nos permite hoy encarar la construcción de la Cuarta Central con recursos nacionales”, afirmó Antúnez.
Nucleoeléctrica Argentina en el rol de dueño, arquitecto, e ingeniero llevará adelante el pre-proyecto, diseño, construcción, puesta en marcha y operación de la nueva central.
Argentina es propietaria de este tipo de tecnología, lo que permite al país replicar este reactor en el territorio nacional. También, fabrica localmente el agua pesada y el combustible nuclear necesario para su funcionamiento, situación que permite tener el ciclo completo de combustible en forma local.