JULIETA MARINO
La petrolera estatal Pemex reportó una pérdida neta de 167,566 millones de pesos (US$ 9.921 millones) en el 3T 2015 como consecuencia de la baja en los precios del crudo, menor producción de petróleo y la depreciación del peso mexicano frente al dólar.
Los ingresos de la petrolera se vieron afectados por una menor producción de crudo, que bajó un 5.5% en el trimestre, a un promedio de 2.266 millones de barriles por día (bpd), y menores exportaciones y ventas en México.
Pese a todos los intentos de Pemex por mantener estable su producción de crudo, enfrenta un declive en sus principales campos, un recorte en su presupuesto y un agresivo régimen fiscal.
En su comunciado enviado a la Bolsa, la petrolera informa que ha emprendido "una serie de acciones que ayudarán a mejorar su estructura de capital. Ejemplos de estas medidas han sido el ajuste al presupuesto y gasto autorizados por el Consejo de Administración en febrero de este año, con ahorros relevantes en el gasto de operación por más de 11 mil millones de pesos a la fecha; el proceso de renegociaciones con la cadena de proveeduría; la monetización de activos considerados no estratégicos, y el aprovechamiento de nuevos instrumentos de fondeo que permitan mejorar los indicadores financieros hacia adelante".
La firma estatal también informó que concluyó el proceso de reestructuración interna de la empresa, dando origen a Pemex Exploración y Producción, y Pemex Transformación industrial, como las empresas productivas del Estado subsidiarias que realizarán las actividades principales de Pemex.
La petrolera informó también que recibió autorización de Estados Unidos para importar hasta 75,000 barriles por día (bpd) de petróleo ligero, con los que busca reducir la producción de combustóleo y aumentar la de gasolina y diésel.
Sin embargo un portavoz de la petrolera explicó a Reuter: "No tenemos nosotros el compromiso de exportarles una cantidad 'swap', es a cambio de lo que ya estamos exportando".
La licencia emitida por Estados Unidos tiene vigencia de un año a partir de octubre, plazo después del cual México puede disminuir el monto solicitado o elevarlo, de acuerdo a sus necesidades.
El primer cargamento llegará al país en la primera quincena de noviembre, comentó el portavoz.
Las importaciones de crudo ligero de Estados Unidos buscan incrementar la producción de gasolina y diésel y disminuir la de combustóleo y de petrolíferos con alto contenido de azufre en el Sistema Nacional de Refinación (SNR) de México, con capacidad para procesar 1.5 millones de bpd.