Además, ratifica la competencia de la Justicia Federal de San Juan para llevar adelante la causa penal que investiga conducta de ejecutivos de Pelambres.
La Justicia argentina ha fijado plazos perentorios para que finalmente Minera Los Pelambres cumpla la medida cautelar ordenada hace siete meses, destinada a evitar que durante la tramitación del juicio, la escombrera de la empresa chilena -dispuesta ilegalmente en propiedad del proyecto Pachón en Argentina- genere más y mayores daños ambientales. Mientras tanto, el juicio cuyo objeto principal es el retiro total de la escombrera de territorio sanjuanino, única solución definitiva admisible bajo la legislación argentina y para Pachón como propietaria de los terrenos, continúa su trámite.
Pachón valora como muy positivos los avances de la justicia y espera que este nuevo escenario permita que las medidas de protección ambiental ordenadas en la medida cautelar sean implementadas sin más demora ni excusas por parte de Pelambres.
La Justicia argentina, en el marco de la medida cautelar, a requerimiento de la provincia de San Juan y de Pachón y a fin de asegurar la protección del ambiente, ordenó a la operación de Antofagasta Minerals comenzar en 10 días los monitoreos de agua y presentar sus resultados; acreditar en 20 días que ha iniciado los trámites para obtener los permisos necesarios para los trabajos precautorios; y presentar en 30 días la ingeniería de detalle del plan de obras precautorias, ingeniera que tendrá que tomar en cuenta las observaciones efectuadas por Pachón como dueño del terreno y por la provincia de San Juan en defensa y resguardo del medio ambiente sanjuanino. Estos plazos han comenzado a correr el 15 de octubre.
Para estos efectos, la provincia de San Juan exigió considerar como línea base la calidad de las aguas existente antes del inicio de la construcción de la escombrera. Así, se rechazó de plano la insostenible propuesta de Pelambres de fijar como línea base la calidad de las aguas que surjan de las muestras que serían tomadas al iniciar las obras de aislamiento provisorio de la escombrera.
En paralelo, y en relación a la causa penal en curso, la Justicia argentina rechazó el planteamiento de Pelambres que cuestionaba la jurisdicción de estos tribunales y confirmó que la Justicia Federal de San Juan es competente para llevar adelante la investigación contra quienes resulten responsables de los delitos denunciados: usurpación de terrenos y aguas y contaminación.
Un revés judicial tuvo Antofagasta Minerals (AMSA) por el juicio que mantiene con Glencore en Argentina, a raíz de la instalación de parte de un botadero de estériles de Los Pelambres tras la frontera, en terrenos del Pachón.
La firma de capitales nacionales había cuestionado la competencia del tribunal de San Juan, ya que el tema debía ser resuelto por instancias binacionales. Sin embargo, según comunicó Pachón, la justicia argentina rechazó el planteamiento y ratificó la competencia de la justicia federal “para llevar adelante la investigación contra quienes resulten responsables de los delitos denunciados: usurpación de terrenos y aguas y contaminación”.
En paralelo, además, el tribunal fijó los plazos perentorios para que Los Pelambres comience a ejecutar la medida cautelar ordenada hace unos meses, la que consiste en hacer un cierre ambiental del botadero que está sobre la frontera, para evitar posibles daños ambientales.
“Pachón valora como muy positivos los avances de la justicia y espera que este nuevo escenario permita que las medidas de protección ambiental ordenadas en la cautelar sean implementadas sin más demora ni excusas por parte de Pelambres”, dijo en un comunicado Glencore.
En ese sentido, explicó que se le ordenó a AMSA comenzar dentro de 10 días el monitoreo de agua y presentar sus resultados, acreditar en 20 días que ha iniciado los trámites para obtener los permisos necesarios para los trabajos precautorios y, finalmente, presentar en 30 días la ingeniería detalle del plan de obras de cierre, la que -dijo Pachón- tendrá que tomar en cuenta las observaciones del dueño del terreno y de la provincia de San Juan.
La minera suiza mantiene su objetivo de que la única salida admisible para ellos es retirar totalmente el botadero, algo que de realizarse podría tomar 4 ó 5 años. Pelambres ha planteado que la salida debe ser el cierre ambiental, que es lo que se hace en otras instalaciones de este tipo en cualquier minera.
Pachón informó que San Juan estableció que la línea base de calidad de las aguas debe ser la con parámetros anteriores a cuando se construyó esta instalación. Pelambres, en tanto, había solicitado que fueran los resultados de la calidad de las aguas del inicio de las obras de aislamiento.