Ante el escenario de bajos precios que ha marcado el desarrollo del mercado del cobre durante gran parte de 2015, la Empresa Nacional de Minería adoptó medidas de apoyo crediticio para el sector de la Mediana Minería fuertemente afectado en sus márgenes operacionales. A la fecha, suman más de USD$ 10 millones aportados por la empresa en créditos de apoyo, sustentación y renegociaciones otorgadas a una decena de compañías mineras que han solicitado las operaciones.
De esta manera, junto a la aplicación de la tarifa de sustentación anunciada para el sector de la pequeña minería en el mes de febrero, el Directorio de ENAMI acordó otorgar el crédito de sustentación a la Mediana Minería para precios inferiores a USD 2,80 la libra, por un máximo de 10 ¢US$/lb por todo el presente año, existiendo de tal modo un crédito individual disponible para las compañías que lo solicitaron y cuya devolución se estableció en función al precio del cobre. Al respecto, se estima que 2015 podría finalizar con la entrega de alrededor de USD$ 3,9 millones, de los que ya han sido otorgados a la fecha, más de USD$ 2,2 millones.
Adicionalmente, ENAMI anunció en septiembre un apoyo crediticio individual para la Mediana Minería dirigido a todas aquellas mineras que mantienen contratos de venta con la empresa y conforme a las entregas efectivas realizadas, por un valor equivalente de hasta 10 ¢US$/lb. La medida, vigente hasta fin de año, permitirá entregar en total una cifra cercana a los USD$ 2,2 millones. Su devolución se estableció para 2016 mediante un programa mensual de 10 cuotas más dos meses de gracias de capital e intereses.
Asimismo, entre las acciones para alivianar a los medianos productores, se aceptó renegociar las solicitudes de crédito presentadas por algunas compañías mineras, con montos que para el presenta año alcanzan a USD$ 6 millones.
De esta manera, ENAMI implementa las acciones necesarias para alivianar el momento complejo que viven los productores mineros y contribuye a brindar sustentabilidad económica a compañías que han visto en riesgo la continuidad de su actividad, con el consiguiente efecto sobre los empleos en las regiones donde están insertas.