La petrolera china Sinopec, la segunda en relevancia en Santa Cruz, informó el cese de la actividad extractiva, lo que significa que dejará de producir promedio de 2.500 m3 de petróleo y 42.000 m3 de gas.
La firma, a través de un comunicado, responsabilizó a Rubén Uribe, integrante de la comisión directiva del Sindicato de Petróleo y Gas privado de Santa Cruz, que junto a un grupo de trabajadores tomaron el yacimiento Las Heras 3 (LH3). Hay preocupación en el gobierno provincial por la incidencia económica del conflicto y la amenaza de detener desde hoy la producción plena.
"Desde el 8 de octubre de 2015, un grupo de personas lideradas por Rubén Uribe, miembro de la comisión directiva del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Santa Cruz, tomó nuestras instalaciones de Las Heras 3, impidiendo toda clase de actividad en la misma, desalojando a los trabajadores que cumplían tareas y, luego de violar el acceso a la planta, cortaron la energía, afectando la producción de petróleo y gas", informó Sinopec a través de un comunicado.
A la vez la petrolera que tiene cerca del 30% de los yacimientos hidrocarburíferos en suelo santacruceño, señaló que el conflicto que aún persiste, se estaba atendiendo en el marco de la Secretaría de Trabajo provincial "donde en sucesivas reuniones y audiencias se manifestó la actitud irracional e irresponsable de los trabajadores, que violaron desde el 10 de septiembre dos conciliaciones obligatorias y por último un arbitraje emitido el 25 de septiembre por la autoridad provincial, donde se los intimaba a deponer su actitud y a retomar sus tareas en forma inmediata".
Por estas horas, un conflicto en el sector petrolero era lo que el gobierno de Daniel Peralta buscaba evitar. El mandatario en plena campaña, aseguró que no iba a permitir que nada perturbe "la paz social con nuestros petroleros". El sindicato que nuclea a más de doce mil trabajadores principalmente en la zona norte de Santa Cruz, sufre una fuerte interna entre sus principales dirigentes.
El Sindicato asegura que hubo 80 despidos de la empresa Huinoil, contratista de Sinopec, algo que desmintió hace días la petrolera asegurando que pese a las reiteradas notificaciones realizadas en la Secretaría de Trabajo, "los trabajadores no se presentaron a trabajar".
Sinopec señaló en la comunicación oficial que el conflicto impide "el normal desenvolvimiento de la explotación del yacimiento y paraliza la actividad por el corte de energía que afecta a las usinas PC 303 y Sub Estación Eléctrica LH3, que a su vez afectan a la Planta LH3, LH10, Batería PC305, LH10 y LH12".
Con la continuidad del conflicto, la firma hidrocarburífera expresó que no puede estimarse la magnitud de los perjuicios causados, "dado que sus efectos no han cesado". Hasta ayer las pérdidas estarían arrojando un volumen de "2.500 m3 de petróleo y 42.000 m3 de gas". Aseguran que "de continuar las medidas, a partir de hoy nos veremos en la obligación de parar la producción de 1.120 m3 / día de petróleo y de 190.000 m3 / día de gas, debido a la falta de capacidad de almacenaje".
En este escenario de tensión, Sinopec expresó en su comunicado que la decisión del referentes sindical y la persistencia del conflicto, "impide y entorpece la normal producción, transporte y provisión de hidrocarburos, cuestión particularmente grave para la República Argentina, que ha declarado mediante la Ley 26.741 de interés público nacional y como objetivo prioritario el logro del autoabastecimiento de hidrocarburos, así como la exploración, explotación, industrialización y transporte a fin de garantizar el desarrollo económico. Esta medida afecta además económica y financieramente no sólo a nuestra empresa, sino también a la Provincia y a la Nación".
El secretario adjunto del Sindicato, que encabeza hace varios días el reclamo, exige a Sinopec el pago de un fondo compensador para 29 trabajadores que pertenecen al área de mantenimiento de producción, y la recategorización de siete trabajadores, además del pago de un retroactivo sobre recategorizaciones anteriores. "Estos tres puntos, además de dejar sin efecto los despidos, permitirán levantar la huelga", señaló Uribe hace unos días a la prensa. La petrolera sin embargo.
La producción en LH 3 finalmente no sufrió grandes interrupciones ante el reclamo que lleva adelante un grupo de petroleros apostado en el ingreso a dicha planta, ubicada en la Zona Norte de la provincia.
El pasado martes, Sinopec Argentina daba cuenta que “un grupo de personas lideradas por Rubén Uribe, miembro de la comisión directiva del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Santa Cruz, tomó nuestras instalaciones de Las Heras 3 (LH 3), impidiendo toda clase de actividad en la misma, desalojando a los trabajadores que cumplían tareas y, luego de violar el acceso a la planta, cortaron la energía, afectando la producción de petróleo y gas”, y decía que dichas acciones “impiden el normal desenvolvimiento de la explotación del yacimiento y paraliza la actividad por el corte de energía que afecta a las usinas PC 303 y Sub Estación Eléctrica LH3, que a su vez afectan a la Planta LH3, LH10, Batería PC305, LH10 y LH12”.
Pero ayer, desde la propia operadora, señalaron a La Opinión Austral que por el accionar de Gendarmería Nacional y la protección llevada adelante en los yacimientos “se logró restablecer la producción”, mientras que a horas de la noche de ayer alcanzó los niveles normales.
Sin embargo, se ha precisado que los manifestantes amenazaron con llevar adelante acciones a fin de hacer sentir su reclamo, anoche. Pues se barajaba la posibilidad de que el objetivo sería la paralización de la producción y aseveraron que Gendarmería deberá reforzar el patrullaje a fin de evitar la concreción de dichas amenazas.
Es necesario indicar que durante el pasado fin de semana llegó un contingente de unos 170 efectivos de Gendarmería Nacional para custodiar las instalaciones de Sinopec e YPF.
Sin despidos
Por otro lado, el secretario general del Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Santa Cruz, Claudio Vidal, señaló a este matutino que las negociaciones con Sinopec Argentina continúan llevándose adelante a fin de llegar a un entendimiento y buscar la salida al conflicto.
“Seguimos buscando alternativas a este reclamo, el diálogo sigue y debemos aclarar que no hay despidos” expresó el dirigente sindical en un breve contacto con La Opinión Austral, y que “la gente allí apostada responde a Rubén Uribe (secretario adjunto de Petroleros Privados) y está bien claro que es un reclamo armado”.
Vidal llamó a la clase trabajadora a “proteger las fuentes laborales y ante cada conflicto suscitado, a respetar los procesos y plazos legales, a buscar las alternativas institucionales y al diálogo permanente para evitar acciones irracionales que luego perjudican esencialmente a nuestras fuentes laborales y a nuestra institución gremial”, y advirtió que existen “ciertos focos” que responden a “sectores opuestos a nuestra gestión y a la oposición de turno, buscando solamente un rédito personal, pretendiendo quebrantar la paz social”.
Recordemos que sin llegar a un acuerdo entre Sinopec Argentina y el Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Santa Cruz, un grupo de 80 asalariados de la firma Huinoil decidió llevar adelante su reclamo en LH3, la mayor productora de gas de la provincia.